Feijóo recupera el "despilfarro bipartito" para las municipales de 2011

Funcionó hace año y medio con el Audi de Touriño y como la crisis es hoy más grave, el Partido Popular retoma ahora la campaña sobre el "despilfarro bipartito", esta vez aplicada a las coaliciones de las ciudades, con la vista puesta en las municipales de 2011.

Lo anticipó ayer su presidente, Alberto Núñez Feijóo, desde el Monte do Gozo, con las torres de la Catedral al fondo, y la metáfora del Camino siempre a mano para animar a sus siete candidatos a completar su peregrinación hacia el poder. "Los bipartitos son un despilfarro, doble sede, doble logotipo, doble alcalde, doble ineficancia", lamentó. "De los 200 asesores que tienen los municipios y diputaciones bipartitas, sobran la mitad y eso es lo que vamos a reducir cuando lleguemos al Gobierno".

El presidente elogia a sus candidatos y pone deberes al hombre de Baltar

El guión de la precampaña está lanzado. El PP citó ayer a sus siete candidatos para posar en la Ruta Xacobea de la que apenas recorrieron unos metros antes de que el secretario general, Alfonso Rueda, leyese el acta que acababa de aprobar el comité electoral. No hubo sorpresas, repiten los que ganaron hace cuatro años: Corina Porro, en Vigo; Telmo Martín, en Pontevedra y Gerardo Conde Roa, en Santiago. Carlos Negreira tendrá una segunda oportunidad en A Coruña; en Lugo, debuta como aspirante Jaime Castiñeiras; en Ferrol probará suerte José Manuel Rey; y en Ourense capital concurre la apuesta de los Baltar, Rosendo Fernández.

Que este último candidato no es un hombre de Feijóo lo evidenció el propio presidente popular en su discurso. Después de alabar a los otros seis, Feijóo olvidó los adjetivos para el elegido de Baltar, al que sin embargo se apresuró a poner deberes. Recordó que hace cuatro años, Enrique Poly Nóvoa, su preferido en Ourense, al que agradeció ayer públicamente su trabajo, se quedó a unos centenares de votos de la mayoría absoluta. "Si conectamos con Ourense, Ourense conectará con nosotros", dijo Feijóo a Rosendo Fernández, que tendrá el reto de aglutinar en la capital al baltarismo y a sus detractores: "De nosotros depende recuperar esos centenares de votos".

Antes, Feijóo había elogiado "la energía" de Telmo Martín en Pontevedra quien, en su turno, glosó su experiencia en Sanxenxo y al frente de sus empresas inmobiliarias para "ponerla al servicio de los ciudadanos". Llamó alcaldesa a Corina Porro, fiel a su costumbre de deslegitimar las coaliciones electorales, "que dan el poder a los que pierden" y animó a Carlos Negreira a dejar atrás "28 años de socialismo" en A Coruña. El presidente volvió a deslizar la idea de que España "está intervenida", cargó contra Zapatero y reservó sus mayores golpes para el alcalde vigués, Abel Caballero, muy criticado también por Corina Porro. "Pierde todas las elecciones a las que se presenta", dijo Feijóo.

Conocido el cartel electoral del PP para las ciudades, el líder del PSdeG, Pachi Vázquez, aseguró que Feijóo apuesta por los "perdedores de hace cuatro años" y demuestra que el PP "no tiene recambio ni banquillo".