Hollande pide garantías a Siemens y GE para “autorizar” la venta de Alstom
El presidente francés ha recibido en el Elíseo a los máximos dirigentes de GE y de Siemens
El presidente francés, François Hollande, recibió este lunes en el Elíseo a los máximos dirigentes de General Electric y de Siemens, las dos compañías que intentan adquirir, por cerca de 10.000 millones de euros, la división eléctrica de Alstom, el constructor de trenes y turbinas galo. Hollande, según informaron fuentes del Elíseo, pidió garantías sobre las eventuales consecuencias de la operación para el empleo, la independencia energética y la localización de las fábricas. La venta debería resolverse el próximo miércoles.
El Estado francés no posee desde 2006 una sola acción de su vieja compañía pública, florón de los Treinta Gloriosos iniciados tras la posguerra mundial. En 2004, Nicolas Sarkozy, entonces ministro de Economía, torpedeó la venta de Alstom a Siemens y rescató a la compañía de la quiebra comprando con dinero estatal el 21% de las acciones, vendidas dos años después al grupo Bouygues por 2.000 millones de euros.
Ahora, el Gobierno socialista ha decidido no ser menos y se ha puesto al frente de las negociaciones, ejerciendo una tarea bautizada como “vigilancia patriótica” por el ministro de Economía, Industria y Digital, Arnaud Montebourg. Tras conducir el jueves a Patrick Kron, consejero delegado de Alstom, hasta su despacho a bordo de un convoy de sirenas ululantes, el ministro afirmó este lunes que París está “lista para sellar alianzas con los dos socios” en disputa. Preguntado sobre una posible nacionalización de Alstom si las ofertas no convencen a París, Montebourg consideró “prematura” esa posibilidad.
Jeffrey Immelt, presidente ejecutivo de General Electric, ha viajado a Francia para intentar salvar su propuesta de OPA amistosa, pero París y Berlín parecen preferir que sea Siemens el comprador final. El presidente de Siemens, Joe Kaeser, llegó al Elíseo con el respaldo explícito del ministro alemán de Economía, Sigmar Gabriel, quien este lunes dijo que la opción de compra “es una bonita posibilidad de cooperación para Alemania y para Francia”.
Siemens, que está a punto de anunciar la supresión de varios miles de empleos, propone intercambiar la mitad de su división ferroviaria más una cantidad de dinero por la división eléctrica del grupo francés. GE ofrece unos 9.500 millones de dólares.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.