Agricultura, a punto de cerrar el código de la cadena alimentaria

El código que regulará las relaciones entre todos los actores de la cadena alimenticia está a punto de cerrarse. Y puede concluirse hoy mismo en las negociaciones que mantienen los representantes del sector agrario, los de la industria agroalimentaria, la gran distribución y el Ministerio de Agricultura. Pero antes tendrán que aclararse puntos como qué hacen los distribuidores con sus marcas propias y con las de los fabricantes, la necesidad de no ofrecer como regalo un producto alimentario por la compra de otro en las campañas de promoción o la baja política de innovación.

Los acuerdos incluidos en este Código de Buenas Prácticas Mercantiles, nombre oficial del texto, solamente serán obligatorios, pero solo para las empresas que se adhieran al mismo de forma voluntaria.

El código supone abordar y fijar compromisos sobre otras cuestiones básicas, junto a las ya citadas, que afectan al equilibrio de la cadena, como la venta de productos perdiendo dinero para atraer clientes, la regulación de los vales descuento, el cumplimiento y modificación de contratos o sistemas de arbitraje o mediación. Los productores, además, demandan que se aproveche este código para instar a que se cumplan las reglas sobre plazos de pagos a 30 y a 60 días para productos frescos y no perecederos, algo que ya incluye la normativa actual.

El código prevé la creación de una comisión de seguimiento que estará integrada por cuatro representantes de los productores agrarios, el mismo número de la industria, así como de la distribución, dos del Ministerio de Agricultura y otros tantos de Economía.