La empresa de motos eléctricas de alquiler Coup dejará de operar este viernes
La compañía, con 1.300 'scooters' en Madrid, justifica la decisión en la "dura competencia" en el sector y los "elevados costes operativos"
Coup, una de las principales empresas de alquiler de motos eléctricas de corta duración en Madrid, ha anunciado este miércoles a sus clientes en España que pondrá fin a su servicio el próximo viernes, apenas un año después de su desembarco en Madrid. "Lamentablemente no podemos dar continuidad a Coup de un modo económicamente sostenible, pues a la dura competencia existente en el mercado de la movilidad compartida, se suma lo elevado de los costes operativos que tenemos que afrontar para dar el servicio de calidad que el usuario merece", ha señalado en un correo electrónico la compañía, propiedad del grupo alemán de componentes automovilísticos y electrodomésticos Bosch.
El pasado noviembre, la empresa, que tiene 1.300 scooters en Madrid, ya había adelantado que dejaría de operar en todas las ciudades donde prestaba su servicio: comunicó el cese de sus operaciones en Berlín y Tubinga y notificó que los servicios en las capitales francesa y española iban a concluir “próximamente”. Ya entonces aludía a un "mercado extremadamente competitivo" que hacía "económicamente inviable" operar de "manera duradera".
En el correo enviado a sus clientes en Madrid, Coup precisa que los minutos gratuitos y los packs de tiempo ya adquiridos podrán ser utilizados hasta las 13.00 de este viernes. En este último caso, el coste de los minutos no consumidos será reembolsado a los usuarios el próximo enero. Las motos serán guardadas por ahora en almacenes.
El cierre de Coup, creada en Berlín en 2016, afectará a unos 120 empleados, 20 de ellos en Madrid. La compañía señala que "se proporcionará ayuda para buscarles un empleo alternativo" dentro de Bosch y, en los casos en los que no sea posible, se les ofrecerá una indemnización por despido.
Las motos de Coup destacaban por su diseño urbano, aunque solo incorporaban un casco, en vez de dos, como es habitual. La empresa entró en el mercado madrileño con una estrategia de diferenciación por precio: una tarifa fija competitiva, de 3 euros por trayectos de hasta 20 minutos. Meses más tarde pasó a cobrar 25 céntimos de euro por minuto, una tarificación que la situaba en la media del mercado. Poco después comenzó a ofertar packs de tiempo y, recientemente, regalaba tres viajes de seis minutos gratis. Desde mayo había probado además con clases de conducción segura.
Tras el tirón inicial del motosharing, impulsado en parte por las medidas de regulación del acceso en las ciudades, como Madrid Central, 2019 ha visto el primer síntoma de concentración en el sector. El mes pasado, Muving e IoScoot acordaron su fusión, en el primer movimiento corporativo de este tipo en España. Los otros tres operadores en Madrid son Ecooltra, Acciona y Movo.
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