L Catterton compra la icónica empresa de sandalias Birkenstock con el respaldo de LVMH

El holding L Catterton ha acordado comprar la firma de sandalias alemana Birkenstock. La empresa francoestadounidense cerró la operación el pasado viernes, y podría alcanzar los 4.000 millones, según Bloomberg. También pujó por la empresa germana el fondo CVC Capital Partners, que estuvo cerca de llegar a un trato, pero finalmente fue L Catterton quien convenció a los propietarios de Birkenstock por su capacidad para acometer una expansión . La cartera de inversiones de L Catterton se acerca a los 23.000 millones de dólares en 18 países, según la información de la compañía.

L Catterton es un holding nacido en 2016 del acuerdo entre 6 de la firma de capital privado Catterton, LVMH y Groupe Arnault, el holding familiar de Bernard Arnault. La presencia de este último también habría influido en la decisión de los dueños del fabricante de sandalias al contar el grupo LVMH con marcas como Moët Chandon, Hennesy o Louis Vuitton.

“Nuestra plataforma y red global proporcionarán a Birkenstock no solo con nuevas oportunidades, sino con los recursos para apoyar el crecimiento continuo de la marca y el negocio “, aseguró Michael Chu, codirector ejecutivo de L Catterton. Según los términos del acuerdo, la firma de capital privado y la empresa de inversión familiar del multimillonario Bernard Arnault adquirirán una participación mayoritaria en Birkenstock. Los hermanos Christian y Alex Birkenstock conservarán una participación en la empresa.

Goldman Sachs asesoró en la venta, que fue encabezada por el director ejecutivo de Birkenstock, Oliver Reichert, para el que la marca “da un salto cuántico hacia el próximo capítulo de nuestra historia de éxito“.

L Catterton también tiene en su catálogo otras empresas textiles como Pepe Jeans, la firma de cosméticos Bliss y el minorista en línea Everlane. Por su parte, Birkenstock es una marca de casi 250 años más conocida por sus sandalias, que comenzaron vendiéndose a un público joven y alternativo y se han convertido en un objeto de lujo respaldado por el gusto de muchas famosas. El año previo a la pandemia, la empresa había vendido 23,8 millones de pares de zapatos (su ejercicio fiscal acaba en septiembre), con unos ingresos de 721 millones de euros. En Estados Unidos, Birkenstocks se introdujo en 1966, cuando la modista y diseñadora Margot Fraser comenzó a importar las sandalias después de descubrirlas en unas vacaciones en Alemania. También fabrican complementos como cinturones o bolsos.

Empresas históricas controladas por familias como Birkenstock buscan con esta operación capitalizar el aumento de las valoraciones que están impulsando a las empresas de consumo. Por otra parte, el capital privado ha visto en ellas una oportunidad para impulsar las ventas y atraer inversores a través de un eventual salida a Bolsa.