El juez descarta el tráfico de influencias atribuido a Víctor Calvo-Sotelo, exsecretario de Estado

Manuel García-Castellón, magistrado de la Audiencia Nacional, ha archivado las pesquisas abiertas contra Víctor Calvo-Sotelo, secretario de Estado de Telecomunicaciones con el Gobierno de Mariano Rajoy (PP). El juez ha tomado esta decisión al considerar que no existen suficientes indicios contra el investigado, al que atribuía un presunto delito de tráfico de influencias por las supuestas irregularidades detectadas en adjudicaciones al Grupo Zed, liderado por el empresario Javier Pérez Dolset.

En una resolución dictada este martes, el juez explica que solo existen una serie de correos electrónicos que sugieren que Calvo-Sotelo informó al entonces responsable de Industria, José Manuel Soria, y a otras personas del Ministerio sobre la situación de los concursos públicos a los que se presentó el Grupo Zed. El magistrado considera que estos mails son insuficientes para continuar la causa contra el exsecretario de Estado. La Fiscalía también pidió el archivo del caso el pasado 10 de febrero.

Entre los correos se encuentra uno enviado por Calvo-Sotelo al ministro en septiembre de 2014, donde le indicaba a Soria su disponibilidad para hablar del caso Zed y le informaba de que “la propuesta sería que preparen algo mejor para la próxima convocatoria”. El juez destaca otra comunicación “más sospechosa o, cuando menos, de la que cabría inferir algún elemento que podría ser delictivo”. Calvo-Sotelo preguntó en octubre de 2014 a su director de gabinete, Juan Corro: “¿No intentabas rescatarlo?”, en relación al proyecto de Zed. A lo que Corro respondió: “Sí, lo intenté. Pero se me cerró en banda (Antonio Alcolea [entonces subdirector General de Fomento de la Sociedad de la Información]) porque Zed es nuestro primer deudor con diferencia... El lunes lo hablamos con él”.

Pese a ello, García-Castellón recalca en su resolución: “Ha de recordarse que José Manuel Soria no está investigado y que los restantes sujetos que aparecen en las comunicaciones eran, en todo caso, subordinados [de Calvo-Sotelo]”. “No se ha acreditado, siquiera indiciariamente, la existencia de la influencia, ni que esta se haya ejercido sobre los funcionarios ni que haya dado como resultado el dictado de una resolución en el procedimiento de referencia”, continúa el magistrado, que también desimputa a Mauricio Casals, presidente de La Razón, los delitos de tráfico de influencias y falsedad en documento mercantil. Casals ya fue investigado en el caso Villarejo.

Pese a que también levanta la imputación de Javier Pérez Dolset por tráfico de influencias, el magistrado señala que sigue adelante con la causa centrada en su grupo. El empresario fue detenido en 2017 por un presunto fraude de subvenciones de más de 40 millones de euros. También se investiga la quiebra de Zed en este sumario, abierto por delitos de administración desleal, fraude de subvenciones y blanqueo de capitales, entre otros.