Escrivá alcanza un preacuerdo con los autónomos por el sistema de cotizaciones por ingresos reales

El Ministerio de Seguridad Social, que dirige José Luis Escrivá, ha alcanzado un preacuerdo con las asociaciones de autónomos (ATA, UPTA y Uatae) y sindicatos sobre el nuevo sistema de cotización en función de los ingresos reales. Tras meses de dura negociación y dos semanas más tarde de la fecha prevista, el Ejecutivo ha logrado el visto bueno de los autónomos con la última propuesta presentada el viernes por la noche y que rebaja a 200 euros la cuota a partir de 2025 para los trabajadores por cuenta propia que menos ganen. La última oferta de Escrivá consiste en un modelo progresivo a tres años (2023-2025) en el que los autónomos con menos ingresos ven reducida su cuota mientras que los que más ganan la ven incrementada. UPTA y Uatae confirman el acuerdo total, mientras que ATA y el ministerio aseguran que están a punto de cerrarlo.

La Unión de Autónomos (Uatae), que negocia en alianza con CC OO, ha sido la organización que más objeciones estaba poniendo a las ofertas presentadas por el Gobierno en las últimas semanas. A través de un comunicado, Uatae señala: “En los últimos días, se han dado avances suficientes para suscribir un acuerdo que implante en España un sistema de cotización sobre la base de los ingresos netos de los autónomos y mejore su protección social”. María José Landaburu ha confirmado el acuerdo. “Tras un largo proceso de negociación hemos llegado a un acuerdo. Hemos conseguido rebajar las cuotas para las personas que más dificultades tienen y mejorar la prestación por cese de actividad”.

Eduardo Abad, presidente de UPTA, también confirma el acuerdo: “La última propuesta de modificación del sistema de cotización cumple con las expectativas que desde UPTA nos habíamos puesto hace ya 10 meses cuando comenzó esta larga negociación. Nuestra organización dice sí a este nuevo modelo, al cambio de sistema y a que más de dos millones de trabajadores por cuenta propia tengan un ahorro sustancial de entre 400 y 1.200 euros al año”. Lorenzo Amor, de ATA, asegura que aún quedan por cerrar algunos detalles. Desde esta asociación añaden que llevarán la propuesta este miércoles al comité ejecutivo de CEOE ― donde está integrada ATA―, que debatirá el texto. Desde el ministerio también se muestran cautos. Aseguran que el acuerdo está muy cerca, pero quedan algunos pormenores.

La última propuesta enviada por Escrivá a las organizaciones de autónomos el pasado viernes por la noche ha logrado desbloquear unas negociaciones que llevaban empantanadas varias semanas. El Gobierno se había comprometido con Bruselas a aprobar la reforma antes del 30 de junio, pero el acuerdo se le ha resistido. Durante todo el pasado fin de semana las patronales han estado analizando la oferta que básicamente consiste en cuotas de 200 a 590 euros en función de los rendimientos netos. El departamento de José Luis Escrivá planteó esta nueva horquilla el viernes pasado: el tramo alto se mantiene igual que en la anterior oferta y el bajo cae 30 euros, de 230 a 200. Como las últimas propuestas de Escrivá, este diseño del sistema de cotización por ingresos reales contempla 15 tramos, que van desde aquellos inferiores o iguales a 670 euros al mes hasta quienes facturen más de 6.000 euros mensuales.

La horquilla de 200 a 590 euros entraría en vigor de 2025 en adelante. En 2023, los trabajadores por cuenta propia con un rendimiento neto ―la diferencia entre los ingresos computables y gastos deducibles― por debajo de 670 euros pagarían 230 euros al mes y pasarían a pagar 225 en 2024. En el tramo alto, por encima de 6.000 euros, abonarían 500 euros en 2023 y 530 en 2024. Esta es la propuesta completa del Ejecutivo:

Los autónomos que más ahorrarían con este sistema respecto al sistema actual serían aquellos inferiores a 670 euros, que pagarían en torno a 770 euros menos en 2023, en torno a 830 menos en 2024 y 1.130 en 2025. En el otro lado de la balanza, aquellos con rendimientos netos por encima de 6.000 euros abonarían en cuotas en torno a 1.470 euros más en 2023, unos 2.830 en 2024 y 3.550 en 2025.

Con las cifras planteadas por Escrivá, en 2025 la cuota bajaría para los autónomos con rendimientos netos por debajo de 1.300 euros al mes, se quedaría igual para el tramo entre 1.300 y 1.700 euros mensuales y aumentaría para el resto. Hay 2,4 millones de autónomos con ingresos por debajo de 1.700 euros. Son el 77% de los más de tres millones de trabajadores autónomos de España. El tramo más poblado es el de los que ingresan menos de 670 euros al mes, con 1,3 millones de autónomos.

La reducción del tramo bajo a 200 euros ha sido un empujón definitivo del ministerio para desencallar las negociaciones. Entre la antepenúltima propuesta de Escrivá (245) y la penúltima (230) la caída fue de 15 euros, la mitad que en esta ocasión. La cuota más alta queda congelada, mientras que entre el antepenúltimo planteamiento (565) y el penúltimo (590) creció 25 euros.

En un comunicado, Uatae destaca otros puntos del acuerdo más allá de los cambios en las cuotas relacionados con el cese de actividad: ya no se exigirá la reducción del 75% de la jornada de la totalidad de la plantilla, sino el 60%; se elimina el requisito de no tener cumplida la edad ordinaria de jubilación; y la creación de un observatorio para el seguimiento, control y evolución de la prestación por cese de actividad por causas económicas. “Aunque no lo recogen en el texto, por no ser necesario un cambio normativo, están trabajando en establecer un criterio que permita a los autónomos con deudas inferiores a dos veces el salario mínimo su fraccionamiento para poder acceder a prestaciones, ayudas y subvenciones públicas (actualmente es casi imposible fraccionar una deuda de esta cuantía)”, añade esta asociación.

Negociaciones difíciles

ATA es la organización que más discrepancias ha manifestado ante las propuestas del Gobierno durante el proceso, principalmente por el crecimiento de la cuota en el tramo alto de la horquilla, aunque recientemente ya valoró de forma positiva el acuerdo que subía el tramo alto hasta 590 euros.

Las relaciones entre los actores en la negociación han vivido distintas etapas (de acuerdo con el encaje de las propuestas) a lo largo de los últimos meses. Aunque desde el principio todos estaban de acuerdo en la importancia de pactar este nuevo sistema de cotizaciones ―que fue sugerido y aprobado por el Pacto de Toledo―, su desarrollo no ha sido todo lo sencillo que cabía esperar.

El Gobierno acaba de aprobar un real decreto que amplía de cuatro a seis las posibilidades de que un autónomo cambie su base de cotización en función de sus rendimientos y, así, cambie la cuota a abonar. Junto a esta modificación, el real decreto también establece la necesidad de que los trabajadores por cuenta propia faciliten al Ministerio de Seguridad Social una previsión sobre sus rendimientos anuales cuando se den de alta, para que con base a esta proyección se controle, por medio del cruce de datos con la Agencia Tributaria, si lo declarado corresponde con la realidad. En el caso de que se compruebe que existe una desviación, se cargará, si está por encima, o abonará, si está por debajo, la diferencia al autónomo.