La Comunidad Valenciana concentra una de cada cuatro viviendas que la Sareb ofrece a las Administraciones

Casi una de cada cuatro casas que la Sareb ha puesto a disposición de las Administraciones Públicas para engrosar el parque de vivienda pública están en la Comunidad Valenciana. Si se suman las que hay en Cataluña, ambos territorios concentran más del 40% de la oferta. Y Castilla y León es la tercera autonomía con más pisos disponibles. Así se desprende del detalle de la oferta por comunidades autónomas que el Ministerio de Asuntos Económicos ha ofrecido este martes. En total, el banco malo tiene identificados 20.768 pisos para vender o ceder a autonomías y ayuntamientos (que se suman a los 14.000 ya habitados que quiere integrar en el plan de acompañamiento social y a los 15.000 que prevé construir en sus suelos). Según ha especificado la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, de los casi 21.000 pisos, unos 9.000 se encuentran ya en comercialización y otros 12.000 están pendientes de alguna adecuación. Fuentes del banco malo aclaran que estos últimos estarán completamente listos dentro de entre seis y nueve meses.

La Comunidad Valenciana, con 4.950 casas, es el territorio donde más viviendas estarán a disposición del gobierno autonómico o de los ayuntamientos para incorporarlas al parque de alquileres sociales. En estas, detallan las fuentes de la Sareb, se incluyen ya los 500 pisos sobre los que hay un preacuerdo de compra. El pasado febrero, el banco malo y la Generalitat Valenciana anunciaron el traspaso de medio millar de viviendas al parque público de esa autonomía. La operación, que a una media de 100.000 euros por piso (el importe promedio de los pisos de Sareb fue el año pasado de 97.000 euros) supondría un desembolso de unos 50 millones, preveía una primera fase con 335 inmuebles para este mismo mes.

Cataluña, por su parte, aspira a hacerse con hasta 3.539 casas de la Sareb. El ministerio ha señalado que ya se está negociando una operación de compraventa con esta comunidad. Según ha dicho Calviño, esta contempla unas 200 casas y unos 200 suelos. Además, también se negocia con otras Administraciones como la Comunidad de Madrid, Castilla y León o el Ayuntamiento de Torrelavega (Cantabria). Aunque Economía insiste en que “se contemplan convenios de cesión temporal”, la compraventa es la vía favorita para el banco malo porque le permite ir amortizando su enorme deuda. Además, las cesiones hasta la fecha han arrojado unos resultados pobres: llegó a haber más de 3.000 pisos cedidos y ahora son unos 2.000 por la falta de interés de los poderes públicos.

Castilla y León (2.288 casas), Murcia (2.093) y Andalucía (2.040) son las tres siguientes autonomías con más posibles viviendas para incorporar desde la Sareb. También Galicia supera el millar, mientras que Madrid no llega a las 500 (455 casas, exactamente) pese a ser uno de los territorios con mayores problemas de accesibilidad a la vivienda por su elevado coste.

Estas casi 21.000 casas suponen el grueso principal del plan que el Gobierno ha anunciado para sumar hasta 50.000 viviendas sociales. Se trata, en cualquier caso, de un movimiento que depende de la respuesta de comunidades autónomas y ayuntamientos, que son quienes deben comprar o solicitar la cesión temporal de los inmuebles. Además, ese programa contempla 14.000 casas que ya están habitadas y que pueden entrar en el programa de gestión social del banco malo (de hecho, unas 2.000 ya lo están y 400 de esas familias están en programas de acompañamiento para la inserción laboral, ha puntualizado Calviño). Las otras 15.000 son de suelos de Sareb en los que se está ultimando un programa de colaboración público-privada para construcción de bloques de viviendas de alquiler asequible. 10.000 están en suelos ya urbanizables y la Comunidad Valenciana acapara de nuevo, según fuentes del banco malo, un 25% de esos futuros inmuebles.

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