Disney extiende el contrato de Bob Iger hasta 2026

Cuando se dijo a finales del año pasado que Bob Iger volvía a casa no se exageraba. Disney ha dado este miércoles señales que extienden la bienvenida a uno de sus ejecutivos más populares. La empresa ha anunciado mediante un comunicado que le ha extendido el contrato como consejero delegado hasta 2026. El gigante del entretenimiento modifica de esta forma los planes que tenía para Iger, quien volvió a finales del año pasado a hacerse con el timón después del despido de Bob Chapek. Entonces se informó que el retorno de Iger, de 72 años, sería solo por dos años y en lo que preparaba a un sucesor. La decisión adoptada este julio apunta, sin embargo, a la continuidad.

Bajo el nuevo acuerdo, Iger será consejero delegado hasta finales de diciembre de 2026. La noticia ha sido bien tomada por el mercado. Los títulos de la compañía registraron una ligera subida hasta colocarse en 90,15 dólares por acción. El precio, sin embargo, está casi 50% por debajo de la cotización que tenía hace dos años. La noticia tomó a Iger en Idaho, donde acude a la conferencia de Sun Valley, una importante reunión anual de directivos de empresas de medios y entretenimiento. “Aún hay más por hacer antes de culminar esta transformación. Estoy comprometido para llevarla a cabo”, aseguró Iger a los empleados en un correo electrónico enviado después del anuncio.

De esta manera se extiende su segundo periodo al frente de la compañía. El primero duró 15 años hasta que el ejecutivo anunció en febrero de 2020 que se retiraba y pasaba el testigo a Chapek, quien era el encargado de parques y productos. La gestión inicial de Iger dio solidez financiera al lugar más feliz del mundo, como le gusta promocionarse al territorio de Mickey Mouse. El consejero delegado convirtió a Disney en una marca global en algo más de una década, gracias a la compra de Pixar, Marvel, Lucasfilm y 21st Century Fox.

La segunda gestión al frente del gigante ha sido muy distinta. Iger volvió a las oficinas de Burbank en noviembre de 2022 tras el fracaso de Chapek, un ejecutivo que no logró convencer a los integrantes de la junta del consejo ni a los miles de fanáticos de la compañía. Era un momento complejo. Debía conducir a la empresa en tiempos de crisis y después de una pandemia que aceleró las transformaciones de la industria. Su plataforma de video bajo demanda, Disney+, había perdido más de 10.000 millones de dólares desde su lanzamiento en 2019. Su liderazgo fue puesto en duda por un inversor activista, quien le exigió un plan de emergencia para reducir costos. Como resultado de la afrenta encabezada por Nelson Peltz, Iger anunció en febrero que recortarían 7.000 empleos a lo largo de toda la estructura. Era una estrategia que tenía como objetivo disminuir el gasto de operación en 5.500 millones de dólares.

En su mensaje a los empleados, Iger hizo referencia a estos momentos de austeridad que se viven en la industria que, además, está afectada por la huelga de guionistas. “Nuestro progreso no será lineal mientras seguimos navegando un difícil entorno económico y cambios sísmicos en nuestra industria. Es un momento que requiere de una visión firme y estratégica que tenga claridad del camino”, añadió el ejecutivo.

A inicios de junio, Disney concluyó con la tercera y última ronda de despidos, que afectaron a los estudios, las divisiones de entretenimiento y productos, además de los parques. Como parte de este plan de reducción de recursos, ESPN, la cadena deportiva, comunicó el cese de 20 personalidades que salían a cuadro. Entre estas se encontraban Jeff van Gundy, el entrenador de la NBA convertido en analista del baloncesto, el exjugador de la misma liga Jalen Rose y el presentador Max Kellerman, entre varios más. En otras rondas, la empresa había recortado 300 puestos de trabajo en Pekín. Todos estos eran personal que daba servicio a los servicios de streaming incluidos en Disney+.

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