La brecha salarial de las mujeres se recorta un punto pero las trabajadoras con sueldos más bajos aún duplican a los hombres

El salario medio de las mujeres ascendió en 2022 a 1.941,7 euros al mes (en doce pagas, con las extras prorrateadas), por lo que esta cantidad representa el 84,2% del salario medio de los hombres, que se situó en 2.303,5 euros de media el pasado año. Esta diferencia de 15,8 puntos para llegar a la equiparación retributiva es la forma en la que se mide habitualmente la brecha salarial entre hombres y mujeres, que ha disminuido un punto respecto a 2021, cuando el salario medio de las trabajadoras equivalía al 83,2% de la retribución de sus colegas masculinos, según recogen los datos de Los deciles salariales del empleo principal medidos por la Encuesta de Población Activa (EPA) publicados este viernes por el INE.

Esta brecha se ha recortado 4,4 puntos en los últimos cinco años (en 2017 el sueldo femenino era del 79,8% del de los hombres). Si bien, cuesta recortar estas diferencias, entre otras cosas, porque esta medición no evalúa el sueldo de hombres y mujeres con puestos similares, sino que hace una media de todas las ganancias y las divide entre el número de asalariados. Por ello, esta media refleja la existencia de muchas más mujeres en empleos con menos salarios, ya sea por tener jornadas parciales, contratos temporales o trabajar en actividades menos productivas y peor retribuidas. Así, por ejemplo, el 40,0% de las mujeres tuvo un salario inferior a 1.440,1 euros al mes, frente al 20,7% de los hombres que recibieron los salarios más bajos de la tabla retributiva.

Igualmente, del total de asalariados estudiados en esta encuesta, 14.621.800 de trabajadores tenían jornada completa y los 2.519.800 restantes, jornada parcial. En este último colectivo, prácticamente ocho de cada diez personas son mujeres (casi dos millones) y están fuertemente concentradas en los deciles salariales más bajos: el 63% (1,58 millones de empleados) cobran una media al mes de 365 euros (decil 1) y otro 18% (368.000 personas) perciben una media de 850 euros mensuales (decil 2).

El sector de ocupación también influye en esta brecha por género. La actividad económica con mayor proporción de salarios elevados (situados en los tres deciles más altos) fue la dedicada a financieras y de seguros; mientras que el sector menor remuneración (los de los tres deciles más bajos) correspondió al personal doméstico (compuesto en un 90% por mujeres).

Para elaborar esta estadística, el INE ordena a todos los asalariados —17.141.600 empleados en 2022— según la cuantía del salario mensual percibido y los divide en 10 grupos iguales, con el 10% de los trabajadores en cada grupo. Esto muestra qué tipo de trabajadores se concentran más o menos en cada uno de estos grupos retributivos. En términos generales, con esta medición calculan tanto el salario medio mensual, en términos brutos —que subió un 2% en 2022, hasta los 2.128,4 euros, su cifra más alta desde que comenzó la serie en 2006—, como el salario mediano.

Para determinar este último, el INE divide al total de los trabajadores en dos partes iguales, los que tienen un salario superior y los que tienen un salario inferior, y esta línea divisoria se situó en 2022 en 1.814 euros brutos mensuales, un 3,2% más que en 2021 (56,6 euros más). Según esto, el salario medio de 2022 (2.128,4 euros) fue casi 315 euros superior al salario mediano, porque los trabajadores con sueldos más elevados suben la media más de lo que la bajan el grupo más amplio de trabajadores con salarios más reducidos.

Aumento moderado

El aumento del año pasado fue más moderado que el de 2021 cuando subió un 2,4%. El reparto salarial de todos los trabajadores por cuenta ajena en 2022 fue el siguiente: el 40% de los asalariados (6,8 millones) ganaron entre 1.440,1 y 2.373,7 euros brutos al mes en 2022, mientras que el 30% (5,14 millones de personas) obtuvo remuneraciones de al menos 2.373,7 euros mensuales y el 30% restante (otros 5,14 millones de asalariados) cobró un sueldo inferior a 1.440 euros al mes. Dentro de esos 5,14 millones de asalariados que percibieron las remuneraciones más bajas, más de 3,4 millones ganaron menos de 1.252,7 euros brutos mensuales en su empleo principal, en tanto que 1,7 millones cobraron menos de 955,55 euros. Asimismo, 1,7 millones ganaron más de 3.629,7 euros brutos al mes.

Las comunidades autónomas con mayor concentración de salarios elevados fueron País Vasco (44,4% de asalariados con ganancias de 2.373,7 o más euros mensuales), la Comunidad Foral de Navarra (39,6%) y la Comunidad de Madrid (37,0%).

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