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Sánchez se abre a mejorar la representación y el reconocimiento de sindicatos y patronales

El presidente del Gobierno dice en el congreso de UGT que quiere aprobar una ley de participación institucional en esta legislatura, después de que Pepe Álvarez le pida más financiación

Josep Catà Figuls
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, a su llegada este martes al Congreso Confederal de UGT, en Barcelona.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, a su llegada este martes al Congreso Confederal de UGT, en Barcelona.Lorena Sopêna (Europa Press)

En la cita de Pedro Sánchez con UGT este martes, en el 44º Congreso Confederal del sindicato, ha habido sobre todo muestras de agradecimiento, abrazos y sonrisas, pero también alguna reclamación. El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, el único candidato que se presenta en este congreso y que presumiblemente será reelegido este miércoles para un tercer mandato, ha pedido al presidente del Gobierno que impulse un acuerdo para que el Estado retribuya a los agentes sociales —sindicatos y patronales— por el trabajo que hacen al representar a trabajadores y empresarios. Minutos más tarde, en su intervención, Sánchez ha recogido el guante, y ha afirmado que pretende aprobar una ley de participación institucional en esta legislatura “que reconozca el trabajo de los agentes sociales”, sin concretar si se tratará de aumentar la financiación o solo de incrementar su peso en el diálogo social.

Álvarez ya reclamó el lunes que mejorase la financiación pública a los agentes sociales, tanto sindicatos como empresas, que son los que pilotan las relaciones laborales y pactan los convenios en la negociación colectiva, así como los planes de igualdad. “Vivimos en un país donde el Estado reclama más y más trabajos a los sindicatos, y solo lo pagan los afiliados con sus cuotas”, ha expresado Álvarez este martes. En 2023, según el Sistema Nacional de Publicidad de Subvenciones y Ayudas Públicas, UGT recibió 5,8 millones de euros en transferencias por su representación institucional, pero Álvarez ha recalcado que la labor de los agentes sociales no está suficientemente reconocida, y lo ha calificado como una “deuda” que tiene España con el sindicalismo desde la transición. Sánchez, por su parte, se ha limitado a aceptar el compromiso de aprobar una ley de participación institucional, pero no ha dado más detalles en su intervención.

El presidente del Gobierno jugaba este martes en casa, con un congreso de UGT en el que han asistido unas 3.000 personas, 800 de ellas delegados sindicales que entre el lunes y el miércoles están debatiendo las propuestas y votarán por la reelección de Álvarez. “Han estado cuatro años de éxitos, y sin este Gobierno no hubiera sido posible. Presidente, tú cumples con los trabajadores de este país, eres un presidente de palabra, de fiar”, ha dicho el secretario general de UGT en su bienvenida. Sánchez en un inicio tenía que participar en la primera jornada del congreso como las demás autoridades políticas —el lunes intervinieron, entre otros, la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y el presidente del PP, Alberto Núñez-Feijóo—, pero cambió la agenda y ha terminado participando solo este martes, una jornada que en principio tenía que dedicarse solamente a cuestiones internas del sindicato. En el congreso de un sindicato que comparte su momento fundacional con el PSOE, la similitud con un mitin socialista estaba en el aire, y se ha confirmado con las fotografías que los asistentes se han ido sacando con Sánchez, que han retrasado unos minutos el inicio de su intervención.

En su discurso, Sánchez ha hecho un repaso a todas las medidas económicas y sociales que ha impulsado el Gobierno de coalición, y las ha reivindicado frente a “una derecha que no tiene programa, sino solo bulos y mentiras”. El presidente ha comparado la rápida recuperación del PIB y la ocupación en España tras la pandemia, bajo su administración, con los largos años de recortes que siguieron a la crisis financiera de 2008, bajo gobiernos del PP: “La respuesta neoliberal tardó más de 10 años en recuperar el PIB y el empleo, mientras que la respuesta progresista consiguió recuperarlo en tan solo dos años. Hoy tenemos uno de los mejores niveles de paro en los últimos tres lustros y contamos con 21 millones de ocupados”, ha expresado.

El presidente ha reivindicado la reforma laboral, el incremento del salario mínimo interprofesional, la revalorización de las pensiones y la transición energética. “Todo esto lo hemos logrado, y es de justicia dar las gracias a los sindicatos, que nos ayudaron y nos convencieron”, ha dicho. También ha marcado los retos que quedan por delante en los tres años siguientes de legislatura —”y en los que vengan después”, ha dicho para dejar claro que quiere seguir liderando el PSOE en las elecciones de 2027—: aplicar la ley de vivienda, de la que el tope a los alquileres solo se ha implementado en Cataluña y construir más vivienda pública para pasar del 2% actual del parque habitacional al 9% de la media europea; reducir la jornada laboral, para lo que ha pedido a la patronal que vuelva a sentarse en la mesa de negociación, y abolir la prostitución, entre otras medidas. También ha afirmado que “no puede haber justicia social sin justicia fiscal”. “Eso me va a llevar siempre a seguir reivindicando un impuesto a la banca, a las energéticas, a las grandes fortunas”, ha añadido.

Sánchez también ha cargado contra el PP por la gestión de la dana en Valencia, y ha acusado a la derecha de negar, por acción o por omisión, la evidencia científica de la emergencia climática. “La gran lección de Valencia es que hay un peligro más grave, que son gobiernos negacionistas que por acción u omisión niegan la emergencia climática. Cuando se vayan los focos, el Gobierno continuará con Valencia hasta que recuperen completamente su normalidad”, ha expresado Sánchez, quien se ha mostrado “orgulloso” de ser militante de UGT y presidente del Gobierno de coalición: “Estamos en el lado bueno de la historia”.

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Sobre la firma

Josep Catà Figuls
Es redactor de Economía en EL PAÍS. Cubre información sobre empresas, relaciones laborales y desigualdades. Ha desarrollado su carrera en la redacción de Barcelona. Licenciado en Filología por la Universidad de Barcelona y Máster de Periodismo UAM - El País.
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