La Audiencia de Vizcaya absuelve a los tres imputados en el 'caso Brouard'
La Fiscalía había pedido entre 25 y 31 años de cárcel para Morcillo, Amedo y Masa
La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Vizcaya ha decidido absolver a los tres acusados del asesinato a tiros del diririgente de HB Santiago Brouard, cometido el 20 de noviembre de 1984 en Bilbao. La Fiscalía había imputado a José Luis Morcillo Pinillos, a quien se le acusó de ser coautor del crimen, al subcomisario de la Policía José Amedo, y al teniente coronel de la Guardia Civil Rafael Masa.
El Tribunal considera que no ha quedado acreditada la participación de los tres procesados, uno de ello en calidad de coautor -José Luis Morcillo Pinillos-, en el asesinato del pediatra bilbaíno y se remite a los hechos probados en la sentencia de la Audiencia vizcaína, tras el primer juicio, en el que se condenó a Rafael López Ocaña a 33 años de cárcel por haber asesinado a tiros a Santiago Brouard, junto con otra persona, en su consulta médica en Bilbao. Además, recuerda que Juan José Rodríguez Díaz, alias El francés, facilitó las armas para el crimen, por lo que fue condenado a ocho años de prisión.
Durante el juicio, que se celebró durante las dos primeras semanas de este mes, el Ministerio Fiscal había pedido entre 25 y 31 años de cárcel para Morcillo, Masa y Amedo, mientras que la acusación particular, ejercida por el abogado Txema Montero, solicitó las mismas penas para los dos primeros, pero retiró la acusación para Amedo, al considerar que, durante la vista oral, no quedó "suficientemente acreditada" la participación del ex policía en el crimen. Además, Morcillo estaba acusado de tenencia ilícita de armas.
"Un plan preconcebido" para asesinar a Brouard
La sentencia de hoy indica que Rafael Masa era amigo de Morcillo Pinillos y padrino de uno de sus hijos, auque estima que no se ha probado su implicación en el crimen, al igual que en el caso de José Amedo. "No se ha acreditado que Rafael Masa y José Amedo hubieran acordado incluir al doctor Brouard, entre las personas que, por móviles políticos, se preveía eliminar por mercenarios que, al efecto, se contrataran", asegura.
La sentencia indica que "la muerte de Brouard fue ejecución de un plan preconcebido, acordado y decidido por terceras personas desconocidas" que tenían motivaciones políticas para acabar con la vida del dirigente de HB.
Además, recuerda que la muerte fue asumida por los GAL a las ocho y media de la tarde del 20 de noviembre de 1984, día del atentado, y desmentida a las 11 de la noche de ese día, "mediante un comunicado que se redactó en la Jefatura Superior de Policía de Bilbao por orden interna".
La resolución judicial indica que el confidente del comisario Antonio Rosino -encargado de realizar las primeras investigaciones- desapareció cuando iba a facilitar la detención de los presuntos autores del asesinato y que, en enero de 1985, finalizó "toda pesquisa" por iniciativa de la propia Policía.
Además, apunta que las armas del atentado estuvieron en la vivienda de Alberto Granados Céspedes -del que se llegó a creer que era el confidente- y que fue asesinado por su propio cuñado, Miguel Angel López Ocaña. El Tribunal señala que este último, cuando fue asesinado Brouard, mantenía una relación comercial con el acusado José Luis Morcillo Pinillos. No obstante, no cree probado que Morcillo "se concertara" con el hermano de Miguel Angel, Rafael López Ocaña, para cometer el atentado.
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