_
_
_
_
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Hacer realidad la Garantía Juvenil

Uno de cada cinco jóvenes europeos no encuentra trabajo; para remediar esa situación, el Consejo y el Parlamento Europeo han aprobado un plan de ayudas de 6.000 millones

Conforme amaina la tormenta económica que ha hecho estragos en Europa, nos encontramos ante el momento de evaluar sus consecuencias. La mayor crisis económica en décadas ha dejado atrás una situación social que es una cuestión prioritaria, con un número de parados sin precedentes. Más de 26 millones de personas están hoy día sin empleo en la Unión Europea, de los que 5,5 millones son jóvenes menores de 25 años, lo que significa que uno de cada cinco jóvenes europeos en el mercado laboral no encuentra trabajo. Se trata de datos extraordinarios. El tema laboral en España resulta bastante sensible, dado que uno de cada dos jóvenes que busca un trabajo tiene problemas para encontrarlo. Esta situación no puede aceptarse como permanente y los responsables públicos tenemos el deber de responder al desafío que plantean las altas tasas de desempleo juvenil, que también dañan la confianza en los sistemas económico y político de la Unión Europea.

El Gobierno de España lucha contra esta situación y ha hecho reformas laborales y de educación importantes. En el caso de la Unión, el Parlamento Europeo lleva años tratando de mejorar las condiciones de trabajo y formación para los jóvenes y, por su parte, la Comisión Europea ha lanzado una importante y ambiciosa iniciativa, la Garantía Juvenil. Esta iniciativa implica una reforma en toda la Unión Europea para apoyar a los jóvenes de una manera muy innovadora a introducirse en el mercado de trabajo, facilitándoles la transición entre el mundo académico y formativo y el laboral. La idea es sencilla: que en los cuatro meses siguientes de terminar la educación formal o de perder su empleo, todo joven europeo menor de 25 años deberá recibir una buena oferta de trabajo, formación continua, formación de aprendiz o un periodo de prácticas.

Ahora es crucial que los Estados miembros pongan en práctica esta iniciativa. El Gobierno español ha presentado su Plan Nacional de implementación de la Garantía Juvenil a la Comisión, explicando cómo pone en práctica la Garantía Juvenil que será en parte financiada por la Unión Europea. La Garantía Juvenil adoptará un enfoque preventivo e integrado de reacción rápida por parte de todas las instituciones que puedan ayudar a mejorar la empleabilidad y la integración en el mercado laboral de los jóvenes.

Todas las regiones españolas podrán acceder a esta nueva financiación

Para garantizar el éxito de esta iniciativa es fundamental que el Gobierno de España desarrolle un número de importantes reformas, así como continuar con la mejora del sistema educativo y de formación. La Garantía Juvenil también requiere del Servicio Público de Empleo para que asegure que cada joven reciba los consejos adecuados sobre las oportunidades de trabajo, educación y formación según su situación, lo que se traduce en un servicio personalizado y que se concreta con una oferta en un plazo de cuatro meses.

La puesta en funcionamiento de la Garantía Juvenil tendrá un coste financiero que la Organización Internacional del Trabajo ha estimado en la eurozona de 21.000 millones de euros. Sin embargo, el coste de no implementar la Garantía Juvenil sería mayor. De hecho la Fundación Europea sobre las Condiciones de Vida y Trabajo (Eurofound) calcula que las altas cifras de jóvenes sin trabajo o sin realizar actividades de formación y educación implicó una pérdida económica para la Unión Europea de alrededor de 150.000 millones de euros en 2011 en términos de prestaciones y pérdidas de producción, lo que equivale a un 1,2% del PIB de la Unión.

El Consejo y el Parlamento Europeo, conscientes de esta carga económica, acordaron crear un instrumento dotado de 6.000 millones de euros, la Iniciativa de Empleo Juvenil (IEJ), que comprende 3.000 millones provenientes de una nueva partida del presupuesto de la UE dedicado al empleo juvenil acompañada de otros 3.000 millones de euros aportados por las asignaciones nacionales del Fondo Social Europeo (FSE). La IEJ aumenta el apoyo financiero disponible para las regiones con tasas de desempleo juvenil del 25% ó más.

Todas las regiones españolas entran dentro de esta categoría, por lo que podrán acceder a esta nueva financiación. En este sentido, se estima que España recibirá casi 1.900 millones de euros de la Iniciativa de Empleo Juvenil que se complementarán con recursos adicionales del Fondo Social Europeo (FSE) y con inversiones en las reformas estructurales para modernizar los servicios de empleo, sociales y de educación para jóvenes, así como para mejorar el acceso a la educación, la calidad y las conexiones con las demandas del mercado laboral.

En toda Europa, los empresarios buscan perfiles profesionales que no pueden encontrar en sus países

El Fondo Social Europeo (FSE) tiene probada experiencia en el apoyo al empleo juvenil desde hace tiempo y ha sido imprescindible para controlar el aumento de desempleo entre los jóvenes. El presupuesto del FSE para toda la UE se sitúa en torno a los 10.000 millones de euros anuales, destinándose en torno al 70% del mismo a proyectos en beneficio de jóvenes, por lo que este instrumento seguirá siendo crucial en el futuro. España deberá consagrar a nivel nacional una proporción significativa de este Fondo en el período de 2014 a 2020 para poner en funcionamiento la Garantía Juvenil.

Otra de las soluciones sobre las que se está trabajando para atajar el desempleo en Europa es una mejor coordinación entre la oferta y la demanda laboral. En toda Europa, los empresarios buscan perfiles profesionales que no pueden encontrar en sus países, mientras trabajadores cualificados están sin empleo en otros Estados miembros. A pesar del récord de desempleo alcanzado estos últimos años por la crisis, dos millones de puestos de trabajo continúan vacantes en la Unión Europea. Los europeos están beneficiándose de la movilidad que ofrece la Unión para conseguir las oportunidades laborales que más se ajustan a sus características.

La red paneuropea de búsqueda de trabajo EURES ofrece a los ciudadanos europeos que quieran trabajar en Europa acceso a las vacantes laborales de toda la Unión. Más de 324.000 españoles y de 2.700 empresas españolas han registrado sus currícula o sus perfiles en el portal de EURES y cada minuto una media de 30 españoles visita el portal de esta red. No obstante, la búsqueda de trabajo en el extranjero no deja de ser una opción personal, aunque buena, pero nuestro objetivo es garantizar empleo sostenible en todos los Estados miembros.

No hay una solución fácil para un tema tan complejo como el desempleo juvenil, sin embargo, tenemos total confianza en que si actuamos todos juntos y ponemos en marcha las políticas adecuadas, conseguiremos resolver la mayor parte de los efectos negativos de la crisis económica y financiera que padecemos. Tanto el Parlamento Europeo como la Comisión seguirán trabajando de manera conjunta con el Gobierno de España y actuando con eficacia y determinación en favor de nuestros ciudadanos. Para lograrlo, es fundamental aplicar las medidas y políticas acordadas. El compromiso de España y de Europa es crear oportunidades para los jóvenes, éste es el horizonte común que compartimos.

László Andor es Comisario europeo de Empleo, Asuntos Sociales e Inclusión. Pablo Zalba Bidegain es Vicepresidente de la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_