Shannen Doherty cuenta entre lágrimas su batalla contra el cáncer

Shannen Doherty, más conocida por su papel como Brenda en la serie de los noventa Sensación de vivir y más tarde como una de las protagonistas de Embrujadas, confesó en agosto de 2015 que padecía un cáncer de mama que le había sido diagnosticado en marzo de ese mismo año. La noticia, además, tenía otro detonante: Tanner Mainstain, la compañía encargada de administrar su carrera y controlar sus finanzas, no había pagado el seguro médico de la actriz desde noviembre de 2013, dejándola sin cobertura médica durante todo 2014. Por lo tanto, cuando los médicos la atendieron le informaron de que el tumor se había ramificado en 2014, cuando no tenía seguro y por ello no podían cubrir el tratamiento. Ella, como era de esperar, demandó a Tanner Mainstain, un proceso judicial que aún sigue vigente.

Desde que reveló su enfermedad a la revista People, la actriz, de 44 años, no había vuelto a dar entrevistas. Sin embargo, ahora regresa a un set de televisión para hablar del tema. La intérprete acudió al programa del doctor Oz para describir cómo ha sido la batalla que libra contra el cáncer. Entre lágrimas narró lo difícil de su situación. "Te preocupas más por la gente que amas. Quieres asegurarte de que van a estar bien", dice la actriz en el adelanto que ha publicado el programa.

“Creo que una de las razones de por qué la confesión de Shannen fue tan emotiva es porque es la primera vez que habla en público del tema, y reconoce el miedo que siente. El temor muchas veces paraliza. En este caso durante un año. Es quizá ese miedo el que ha hecho que una mujer fuerte como ella continúe con el cáncer de mama después de un año”, cuenta doctor Oz.

En el show, que se emitirá este jueves en Estados Unidos, la actriz confirma que tiene planeado someterse a una cirugía en los próximos meses para remover el tumor. “Ella ha decidido extirpar quirúrgicamente el tumor. Fue difícil tomar esa decisión pues temía que quedara desfigurada”, añade el presentador.

La actriz, además, ha asegurado que desde que se enteró ha contado con el apoyo incondicional de sus seres queridos y que la enfermedad la "ha unido aún más" a su esposo, Kurt Iswarienko. Aunque sus planes de formar una familia han quedado en suspenso, pues el tratamiento bloquea su producción de estrógeno para impedir que crezca el tumor.