Meghan Markle: “Lo que más me molesta es que me aclaren la piel”
La actriz y novia de Enrique de Inglaterra habla de los retos de una intérprete mestiza en Hollywood
Antes de revelarse al mundo como la novia de Enrique de Inglaterra, Meghan Markle llevaba años labrándose su carrera como actriz. Mientras algunos medios se hacen eco de los rumores sobre que la intérprete abandonaría la serie Suits para empezar a encajar en la realeza británica, Markle nunca se ha pronunciado al respecto. Poco dada a hablar con los medios desde que se hiciera pública su relación con el príncipe el pasado octubre, Markle, de 35 años, sí que ha querido participar en el número de abril de Allure, dedicado a las mujeres y la diversidad. En la revista habla de cómo es ser una actriz de origen multirracial.
En la entrevista para el número en el que participan 41 mujeres (también las actrices Eva Longoria o Jessica Alba), Markle cuenta que hasta que fue adulta que no empezó a tener conciencia de su origen mestizo. Su madre es afroamericana y su padre de ascendencia neerlandesa e irlandesa. “Recuerdo el sentimiento de pertenencia, no teniendo nada que ver con el color de mi piel. Fue lejos del confort de mi hogar cuando comencé a darme cuenta. Acudí a una clase de estudios afroamericanos en Northwestern donde exploramos el tema del color. Fue la primera vez que pude poner un nombre a cómo sentirme demasiado clara en la comunidad negra y demasiado mezclada en la comunidad blanca. En los castings, me calificaron de ‘étnicamente ambigua’. ¿Era latina? ¿Sefardí? ¿Exótica caucásica?”, se pregunta la actriz.
Feliz con su aspecto, hoy una de las cosas que más le molestan es que “cambien mi tono de piel y borren mis pecas tras una sesión de fotos”. Y lanza un recuerdo en forma de consejo para quienes se avergüenzan de sus pecas: “Como me decía mi padre cuando era niña, un rostro sin pecas es como una noche sin estrellas”.
Lo que la actriz ha pretendido la actriz con esta entrevista es enviar un discurso de aceptación de uno mismo sin hablar de frivolidades ni de su vida privada. Lo mismo hizo el pasado mes de diciembre, cuando la actriz firmó una carta en la edición británica de la revista Elle en la que hablaba del mismo asunto. “La gente por la calle asumía que mi madre era mi niñera y ella no sabía que casilla marcar cuando le preguntaban por mi raza en los formularios escolares", relataba. También confesaba que le dijeron que solo podría llegar a interpretar papeles de mujeres latinas o afroamericanas. “No era lo suficientemente negra para un papel de afroamericana ni lo suficientemente blanca para el resto. Me dejaron en un limbo como un camaleón étnico que no podía tener un trabajo”, escribió.
En cualquier caso, los paparazis son los encargados de desvelar casi todos sus pasos. Como cuando hace dos semanas hizo su oficial su relación con Enrique de Inglaterra al ser su acompañante en la boda en Jamaica de uno de sus amigos más íntimos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.