En el salón, un gran ventanal inunda de luz natural toda
la estancia y comunica con un pequeño patio interior, que se abre a otro más grande.Raúl CandalesEl despacho es una gran caja que recibe toda la luz exterior
y a la vez se comunica con
el salón y la cocina. Raúl CandalesLas paredes de ladrillo visten
el espacio con su textura
y el blanco aporta luminosidad.Raúl CandalesLa chimenea es una pieza del edificio original, del siglo XIX.Raúl CandalesLa cocina tiene una encimera
de mármol y frontales en hierro.Raúl CandalesEl dormitorio,
al igual que el salón, está coronado por grandes ventanales que dan a la fachada principal de la vivienda. Raúl CandalesEl baño destaca
por la originalidad
de su lavamanos, que recuerda
a los antiguos tocadores de baño.Raúl CandalesEl salón destaca por sus techos altos, de casi cuatro metros. En este proyecto se ha buscado desnudar la vivienda para extraer todo su potencial.
Raúl Candales