Superorganism, la banda más misteriosa y adictiva que ha dado el pop
Son ocho, viven en una comuna musical en Londres y aunque no tienen ni un disco grabado, Frank Ocean ya pincha sus canciones
"Al principio queríamos mantener el misterio", es la excusa que utiliza Harry para justificar, entre risas, la poca información que existe sobre su grupo. Todo lo que rodea a Superorganism es una atmósfera de rumorología y hasta cuesta saber el número exacto de sus componentes - según su web, "ocho y multiplicando”-. También son muchas las preguntas que generaron desde que colgaron en SoundCloud el single Something for your M.I.N.D., Frank Ocean lo incluyó en una de sus playlist en Beats 1 y más tarde desapareció por un sample de derechos dudosos. ¿Era un nuevo proyecto de Damon Albarn?¿Kevin Parker de Tame Impala estaba detrás de todo esto? Las especulaciones les han servido para alimentar el hype, pero esta banda tan atípica no necesita recurrir a ningún truco de márquetin.
“Superoganism es un grupo de gente de diferentes culturas y países trabajando juntos. La idea era reflejar como el trabajo de todos hacia un mismo objetivo es mucho más fuerte que cualquier sueño individual”, explica Harry, el guitarrista de esta banda tan caótica como su sonido. “Creo que nuestra música intenta aunar todas nuestras influencias en algo único. Escuchamos mucha música electrónica, rock clásico, indie de los noventas… La versión corta sería decir que hacemos música pop ecléctica, pero creo que es un conjunto de muchos sonidos".
Tampoco es sencillo hacer un organigrama de la banda –y no, no encontrarás al líder de Blur en él-. Con Harry a la guitarra, Emily produce y compone los temas, Tucan escribe y toca la batería; Ruby, B, y Seoul son sus coristas modernas, mientras Robert se encarga de las visuales y Orono, su líder adolescente y bajita, pone voz a la música y al espectáculo. En total, ocho artistas multiinstrumentales que viven juntos en una especie de comuna musical en Londres. “No hay mucho espacio, pero convivimos en armonía y todos estamos muy involucrados”, bromea Harry cuando le preguntamos por las normas de convivencia. “Es un casa creativa y es muy divertido vivir y trabajar juntos”. Aunque en su forma de componer siguen vigentes viejas costumbres. “Al principio, como cada uno estaba en un país distinto obviamente teníamos que trabajar online y nos enviábamos archivos por Internet. Y ahora que pasamos mucho tiempo en la misma casa, seguimos grabando cosas en nuestras habitaciones y nos los pasamos por email”. Internet también ha determinado su estética.
Un concierto de Superorganism, como el que dieron este fin de semana en el Primavera Club, es como volver a quedar con tus amigos del instituto en los recreativos, como pasarte de nuevo el Supermario, o como ser testigo por fin de la victoria de los nerds. Sobre el escenario, un tropel de músicos con chubasqueros de colores, liderados por una adolescente japonesa con gafas 3D que no alcanza la mayoría de edad, visuales net art y vaporwave que se sobreponen sobre ellos y coristas que bailan raro y sin vergüenza a ritmo de esas melodías pop y electrónicas que muchos tachan de adictivas. Un espectáculo tan maravilloso como extaño con el que debutaron en Londres a principios de mes, hicieron sold out y NME los coronó como 'tu banda favorita del 2018'. "¡Fue tan surrealista!¡700 personas en nuestro primer concierto y la atmósfera era tan buena!", recuerda emocionado Harry. Nada mal para un grupo que todavía está trabajando en su primer disco y cuya única pretensión era "colgar sus primeras canciones y gustarle a alguna gente" y acabó recibiendo halagos, entre otros, de Frank Ocean.
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