Selena Gomez: “La depresión y la ansiedad es una batalla a la que me enfrentaré de por vida”
La cantante, que recientemente siguió un programa de rehabilitación de dos semanas, está decidida a centrarse en su salud
El pasado mes de enero, Selena Gomez se trasladó temporalmente a Nueva York. Poco después, se supo que la cantante y actriz había viajado hasta la costa este estadounidense para someterse a un programa de dos semanas para tratarse la depresión y la ansiedad. Una parte de su vida de la que ella habla cada vez con más frecuencia, y lo ha hecho de nuevo en el número de marzo de la edición estadounidense de Harper’s Bazaar. “He tenido muchos problemas con la depresión y la ansiedad, y he hablado mucho de ello, pero no es algo que sienta que vaya a superar”, dice Gomez.
Según confiesa en la entrevista que le ha hecho Katherine Langford, protagonista de la serie Por trece razones de la que Gomez es productora, no siente que vaya a superar del todo sus problemas. Aunque ella sabe verle el punto positivo. “Creo que es una batalla a la que me voy a tener que enfrentar el resto de mi vida, y eso me parece bien porque sé que me estoy escogiendo a mí misma por encima de todo lo demás”, dice Gomez, de 25 años. “Quiero asegurarme de que estoy sana. Si eso está bien, todo lo demás estará en su lugar. No me quiero marcar metas porque no quiero decepcionarme si no las consigo”.
La cantante de Bad Liar o Wolves y exniña Disney se ha convertido hoy en la persona con más seguidores del mundo en Instagram: su cuenta la siguen más de 133 millones de personas. Algo que le llegó a consumir y fue uno de los motivos por los que también decidió ingresar en un centro de rehabilitación en 2016. Su relación con las redes sociales, asegura en el número de marzo de la revista, es probablemente una de las más difíciles que mantiene. “Intagram me ha dado una voz entre todo el ruido de gente que trata de narrar mi vida en mi lugar. La única cosa que me preocupa es el gran valor que la gente de nuestra edad le da a las redes sociales. Es una plataforma increíble, pero de muchos modos ha dado a la gente joven, a mí incluida, una falda idea de lo que es importante”, se sincera quien hace justo un mes que no publica fotografía alguna en sus redes sociales.
Aunque Gomez también da crédito a su generación. “Los millennial somos mucho más listos del crédito que nos dan”, sentencia alguien que lo ha demostrado diversificando como la que más su carrera tanto en la industria del entretenimiento (es cantante, actriz y productora) como de la moda (es imagen y diseña para marcas como Puma o Coach) mientras trata a la vez de concienciar sobre las enfermedades mentales y la depresión hablando de su caso públicamente y haciéndolo aún más visible incluso con un tatuaje.
Ella asegura no haber tenido un buen 2017, pues a sus problemas de salud (fue sometida a un trasplante de riñón) se añadió su ruptura con The Weeknd y el enfado con su madre por su reconciliación con Justin Bieber. Ahora Selena Gomez asegura que ha empezado el año con fuerza y trabajando en su nueva música, y aunque lleva tres años sin publicar disco dice no tener prisa alguna hasta tenerlo claro y que hoy vive centrada en su salud y bienestar, tanto físico como mental.
Una reaparición que se produce después de que los medios estadounidenses informaran no solo de que se había sometido a una nueva rehabilitación para su estrés, ansiedad y depresión. También se han encargado de desgranar el centro en el que ha estado ingresada, el Priveé-Swis. Un centro para un retiro de lujo, centrado en la meditación, el pilates y la dieta saludable a 120.000 euros al mes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.