Los ciervos se encuentran en celo y el instinto reproductivo de los machos les lleva a emitir unos sonidos guturales característicos, conocidos como la berrea, con la intención de atraer a las hembras. EL PAÍS acompaña al fotógrafo Mikel Arrazola por el Parque Natural del Gorbea para captar a estos animales en su máximo esplendor