8 fotosLa estela del primer africano campeón del mundo de boxeoEstos son los rostros de la nueva generación de boxeadores de Saint Louis, la ciudad senegalesa en la que nació Battling SikiPaco PuentesSaint Louis (Senegal) - 05 jun 2019 - 15:47CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinBlueskyCopiar enlaceGorgui Tour, 22 años. En Saint Louis, la ciudad senegalesa en la que nació Battling Siki, el primer africano campeón del mundo de boxeo, hay tres salas de entreno de este deporte. Paco PuentesPapa Ibrahima Diagné, 26 años. La memoria del primer campeón de boxeo africano de la historia está muy presente en su ciudad natal. Las nuevas generaciones, sin embargo, miran más bien hacia Muhammed Alí.Paco PuentesPapa Diop, 32 años. En el gimnasio de Guisse Mamadou, en el barrio de Balacoss, una decena de jóvenes y niños calientan los músculos. Hay quien va descalzo. Paco PuentesYolo Ndiaye, 20 años. Dicen que un pariente lejano de Battling Siki, Massar Diop, también entrena en el gimnasio de Guisse Mamadou.Paco PuentesFadel Cissé, 18 años. El 'ring' del gimasio es en realidad un espacio delimitado por unas cuerdas tendidas entre la pared y una columna. En la pared de atrás, solo cuelga una foto. Es una instantánea de un combate de Muhammad Alí. Paco PuentesAbrane Coury, 23 años, solo lleva un año entrenando. Admite que, aunque conoce la historia de Siki, con quien sueña es con Muhammad Alí. Entrena tres días por semana y compite en la categoría de peso ligero (64-65 kilos). Espera que en el futuro pueda ganarse la vida con esto, pero de momento le toca seguir trabajando con su padre. Paco PuentesAbass Camara, 24 años. "La nueva generación es más de Tyson o Muhammad Alí", lamenta Elhadji Kane Sow, presidente de la liga regional de boxeo de Saint Louis. "Queremos que la gente sepa que este deporte existe y nuestro esfuerzo empieza a dar frutos, pero necesitamos medios".Paco PuentesMoustapha Niang, 22 años. "Battling Siki se fue muy joven y no volvió a Senegal. Creo que si hubiera regresado, quizás su influencia hoy sería mayor. Habría podido originar un cambio histórico y cultural”, explica Yann Benoiton, entrenador. "Los jóvenes saben que no van a ganar dinero con el boxeo, pero hay un orgullo en representar a su país".Paco Puentes