La decisión sobre la extradición del rapero balear Valtònyc se retrasará varios meses
La justicia belga preguntará a la Corte Constitucional si las ofensas al rey son libertad de expresión
El segundo asalto tendrá que esperar. El tribunal de Apelación de Gante ha evitado pronunciarse este martes sobre la extradición a España del rapero balear Valtònyc. Antes de dictar sentencia, el juez belga quiere saber si las ofensas al rey entran o no dentro de la libertad de expresión en Bélgica, por lo que ha optado por dirigirse a la Corte Constitucional por medio de una pregunta prejudicial, según han informado esta mañana fuentes de la defensa. Josep Miquel Arenas Beltrán fue condenado en España a tres años y medio de pr...
El segundo asalto tendrá que esperar. El tribunal de Apelación de Gante ha evitado pronunciarse este martes sobre la extradición a España del rapero balear Valtònyc. Antes de dictar sentencia, el juez belga quiere saber si las ofensas al rey entran o no dentro de la libertad de expresión en Bélgica, por lo que ha optado por dirigirse a la Corte Constitucional por medio de una pregunta prejudicial, según han informado esta mañana fuentes de la defensa. Josep Miquel Arenas Beltrán fue condenado en España a tres años y medio de prisión por enaltecimiento del terrorismo, amenazas, y calumnias e injurias graves a la Corona.
Al conocer la decisión, Valtònyc ha evitado interpretarla en clave de victoria o derrota. Y ha ironizado refiriéndose a las últimas noticias sobre el rey emérito. “Es una opción que teníamos prevista. Para mí está bien, porque visto lo visto los Borbones cada semana que pasa lían alguna. Lo que dije no es ninguna mentira y solo se me ha condenado por hacer un spoiler, por decir que los Borbones son unos ladrones y unos mafiosos, como al final se ha demostrado".
Su defensa, formada por Paul y Simon Bekaert, padre e hijo, también parte del equipo legal de Carles Puigdemont y los independentistas fugados en Bélgica, ha explicado que en el país existe una ley del siglo XIX que castiga las injurias al rey y a la familia real, pero estiman que ha quedado invalidada. Ahora, la máxima autoridad judicial del país deberá decir si esa regla decimonónica es compatible con el derecho a la libertad de expresión prevista en la Constitución belga, y si incumple la Convención Europea de Derechos Humanos. La decisión, por tanto, podría tener repercusión en futuros casos de injurias al rey en Bélgica.
“Como ya pasó con Lluís Puig, cuando declararon al Supremo incompetente, me gustaría demostrar que tanto la Audiencia Nacional como el Tribunal Supremo del Estado español también lo son”, añadió Valtònyc en referencia a la última victoria judicial del exconsejero independentista.
El proceso cumple ya más de dos años en marcha, el tiempo transcurrido desde que Valtònyc huyera a Bélgica al saber que iba a ser apresado y España le reclamara con una orden de detención europea. Y amenaza con prolongarse bastante más. El caso se encuentra en la segunda instancia después de que en la primera se rechaza su entrega a España, y todavía quedará abierta la posibilidad de recurrir a otra más. El próximo 3 de diciembre se celebrará una nueva vista, pero no está claro cuándo llegará la respuesta del Constitucional belga. Una vez haya una contestación, el juez podrá tomar una decisión, que todavía podrá ser recurrida una vez más por las partes.
En caso de que así fuera, o de que la euroorden fuera denegada por Bélgica. Valtònyc no podría regresar libremente a España mientras no se retirara la orden nacional de arresto en su contra. Por tanto, si quedara libre de cargos en el resto de la UE, para poder evitar la detención al pisar territorio español tendría que obtener un hipotético indulto, o en caso contrario esperar al menos hasta 2023, cuando sus delitos prescriben al cumplirse cinco años de su condena firme el 20 de febrero de 2018.
Los precedentes son favorables para el rapero. No solo porque se rechazara su extradición en primera instancia. Hace seis meses el Tribunal de Justicia de la UE determinó que España no podía pedir la entrega automática del cantante basándose en un Código Penal posterior a 2012, como pretendía. Al tener que basarse en el texto de 1995, la pena por enaltecimiento del terrorismo se rebajaba de tres a dos años de cárcel, mientras que el umbral mínimo de los 32 delitos de la euroorden que implican la entrega automática es de tres años, disminuyendo así las opciones de que se aceptara mandarlo de regreso.
La Audiencia Nacional considera culpable a Valtònyc de incluir en sus temas expresiones “en apoyo y alabanza” a las organizaciones terroristas GRAPO y ETA, así como amenazas contra Jorge Campos, presidente de la entidad españolista Círculo Balear, y frases injuriosas contra el Rey y sus familiares, como “el rey tiene una cita en la plaza del pueblo, una soga al cuello que le caiga el peso de la ley” o “hagamos que Urdangarin curre en un Burger King y la infanta Elena pida disculpas por ser analfabeta y no estudiar en Cuba”.