Comida halal, carpas y ropa para niños y adultos: las bases de Morón y Rota se preparan para la llegada de refugiados afganos evacuados por EE UU
La logística y el control consular y sanitario de las personas que aterrizarán en los dos recintos en Andalucía corre a cargo de EE UU
Las bases de Morón (Sevilla) y Rota (Cádiz) están listas para la llegada de los colaboradores afganos del ejército de EE UU que están siendo evacuados por ese país. Se desconoce todavía cuándo y cuántos vuelos aterrizarán en cada una de ellas o el número de refugiados. El desconcierto y la dificultad para la salida de aviones del país, además de razones de seguridad, impiden precisar más detalles sobre la operación de acogida de estos ciudadanos afganos con escala en España, según explican a este diario fuentes de la Embajada estadounidense encargada de coordinar el operativo con las bases andaluzas, si bien la entidad diplomática ha comunicado que no se prevé su llegada para este miércoles.
Mientras se mira al cielo a la espera de que lleguen los aviones, en tierra las operaciones de acondicionamiento están prácticamente ultimadas. Toda la logística, que comenzó a ponerse en marcha a las pocas horas de que se anunciara el acuerdo entre EE UU y España para acoger temporalmente a parte de los ciudadanos afganos que han colaborado en los últimos 20 años con las tropas estadounidenses, ha corrido a cargo de los responsables norteamericanos en las bases, aunque con apoyo del personal civil que trabaja subcontratado.
Es el caso de la base aérea sevillana, donde los trabajadores de la empresa contratista americana KBR han puesto a punto dos edificios, donde en su día también durmieron marines y que en Morón llaman “hoteles”, con una capacidad máxima de 1.500 personas en total. “Nos hemos encargado de supervisar que las habitaciones están en buen uso, de que haya aire acondicionado, agua potable, de revisar los baños, las camas, de poner detectores antiincendios”, explica el presidente del comité de empresa, José Armando. También se ha habilitado una mezquita. Está previsto que cada bloque se utilice para albergar a hombres y mujeres y niños que viajen solos, respectivamente, aunque también habrá unidades familiares, explican fuentes de la base.
En estos edificios ya se han alojado soldados estadounidenses. Durante la Guerra del Golfo de 1991, el Pentágono destinó hasta a 4.000 militares, la capacidad total que se ha acordado albergar tanto en esta base como en la de la Armada en Rota —las fuentes norteamericanas consultadas no precisan si finalmente se alcanzará esa cifra—. En la localidad gaditana, la vida pautada de los más de 6.000 estadounidenses (entre personal de defensa y sus familias) que viven en sus más de 2.000 hectáreas se ha visto alterada por el operativo de acogida temporal de afganos.
Este mismo lunes, Manuel Urbina, presidente del comité de empresa de Rota, ya se percató de que los preparativos habían comenzado. Los soldados americanos han habilitado con tiendas de campaña el campo de béisbol de las instalaciones. Además, cerraron “la bolera y el gimnasio”, que es “la zona donde se van a quedar y a los empleados los han recolocado en otras actividades”, ha precisado Urbina, que forma parte de la plantilla de personal laboral contratado por el Ministerio de Defensa español que trabaja para los americanos.
Las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos han colocado en la base roteña contenedores de ropa para que los propios militares y trabajadores donen prendas para los adultos. Incluso han pedido al personal español que trabaja para ellos “ropa para niños o cunas”, según precisa Urbina. El tamaño de las instalaciones de Rota —de las más importantes en las que está presente Estados Unidos en Europa— y la diversidad de servicios que tiene la convierten en una de las más idóneas para realizar esa primera acogida a los afganos que, en principio, no se extenderá más allá de dos semanas.
La llegada de refugiados a Rota ha despertado una cadena de solidaridad entre los vecinos de la localidad andaluza, hasta el punto de que el Ayuntamiento ha optado por coordinar las donaciones de ropa y productos de higiene personal a través de asociaciones y hermandades de la localidad, tal y como ha confirmado el Consistorio en un comunicado. “Estamos dispuestos a colaborar. Entiendo que estarán dentro del recinto, por lo que al municipio no le afecta, pero en lo que podamos colaborar estaremos”, ha precisado el alcalde Javier Ruiz, informa Jesús A. Cañas.
Las condiciones de la pista de Morón, más larga y muy apartada, han favorecido su uso en otros momentos de crisis. La base ya ha albergado a refugiados somalíes, kosovares e iraquíes que, como ahora en el caso de los afganos, también permanecieron en ella de manera temporal. Fuentes de la embajada estadounidense sostienen que no existen preferencias y que ambas están bien preparadas y son muy similares.
Lo que sí será idéntico en ambas es el protocolo, una vez aterricen. Serán los responsables americanos quienes se encarguen de la misión consular y finalicen el papeleo. También a su cargo corre todo lo relacionado con los recursos sanitarios y los controles anticovid. Rota cuenta con un Hospital Militar que facilitará la primera atención a los refugiados, pero en ambos casos, coinciden las fuentes estadounidenses y las del Ministerio del Interior, se seguirán los protocolos de atención y evacuación hospitalaria que ya se están siguiendo para el personal de las bases.
En ellas ya hay acopio de agua y comida halal. Aunque el acuerdo firmado entre EE UU y España establece que el tiempo máximo de su estancia no puede superar los 14 días, fuentes cercanas a la base de Morón estiman que el tránsito no superará la semana. Otras bases en Europa ya han empezado a recibir a civiles afganos colaboradores del ejército norteamericano. En España se está pendiente de las órdenes de los vuelos. No todos salen de Kabul, puntualizan fuentes de la Embajada americana, también podrían arribar aviones que despegan de otros puntos de Oriente Próximo.
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