La abstención de EH Bildu marca la aprobación de los presupuestos vascos para 2022

El Gobierno vasco ya tiene presupuestos para 2022. Son los mayores de su historia y los que de momento han logrado más apoyos de la legislatura con solo once escaños en contra de los 75 de la Cámara. El Parlamento de Vitoria los ha aprobado este jueves con el apoyo de los 41 escaños de PNV y PSE-EE, la abstención de los 21 de EH Bildu y los 11 votos en contra de Elkarrekin Podemos-IU, PP+Cs y Grupo Mixto-Vox -faltaban dos diputados-. El Ejecutivo podrá gastar 13.107 millones de euros, un incremento de de 694 millones, es decir, un 6% más que el año pasado -excluyendo amortizaciones, el TAV y la Variante Sur de Bilbao-. El presupuesto contempla inversiones por valor de 1.605 millones de euros, con un incremento del 50% respecto a 2021. Además, el 77% del gasto previsto corresponde a políticas sociales. Por departamentos el grueso del gasto público se distribuye entre los departamentos de Salud (4.352 millones de euros) y de Educación (3.333 millones de euros) con un aumento de la financiación para inversiones sanitarias de 37 millones de euros, hasta los 106,7 millones. El gasto en vacunas crece hasta los 19,2 millones de euros, cinco millones más mientras que el gasto en farmacia se mantiene estable.

Para Elkarrekin Podemos los Presupuestos de 2022 consolidan los “recortes” en ámbitos como la sanidad y las políticas sociales, pese al “maquillaje” con el que, según ha dicho, el Ejecutivo pretende ocultarlos. El año pasado pactaron las cuentas con el Gobierno vasco. Este han reprochado a EH Bildu que, con su abstención, “está amparando los recortes y las enormes limitaciones” de los presupuestos de Euskadi. la portavoz Miren Gorrotxategi se ha mostrado muy crítica con el tratamiento de la sanidad pública en las cuentas autonómicas y, por extensión, con la gestión de la pandemia por parte del Gobierno. De esa forma, ha denunciado que los presupuestos “consolidan la falta de inversión en sanidad, las altas tasas de temporalidad y la inacción ante el colapso de la Atención primaria”. De hecho, ha llegado a decir que el Gobierno vasco podría tener como “ejemplo” la política sanitaria de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

El resto de la oposición cree que las cuentas son más de lo mismo. Luis Gordillo de PP+Cs ha criticado que estos presupuestos “siguen la línea de los anteriores y repiten sus errores y deficiencias”, de forma que van a dejar a Euskadi “desarmada ante los retos que la sociedad debe afrontar”. Su grupo presentó alrededor de 1.500 enmiendas parciales que han sido tumbadas. La parlamentaria del Grupo Mixto-Vox, Amaia Martínez, los ha rechazado porque cree que se trata de unos presupuestos “basados en la construcción de una nación vasca e independiente de España”.

Los 21 parlamentarios de EH Bildu se abstuvieron porque con sus aportaciones se dan mejor respuesta a los problemas de los ciudadanos vascos. El acuerdo ha movilizado partidas por valor de 176 millones y consta de un “acuerdo político sobre I+D+I que supone un montante de 77 millones”. Pese a todo, la parlamentaria de EH Bildu, Nerea Kortajarena, ha denunciado que el Gobierno actúa “como pollo sin cabeza” en la gestión de la pandemia. “El acuerdo abre puertas que permanecían cerradas a cal y canto hasta el momento”, ha añadido la portavoz de EH Bildu.

Para el PNV estos presupuestos son “ambiciosos, inversores; y muy importantes por la cuantía, pero sobre todo por el acierto en su destino”. Su portavoz, Itxaso Berrojalbiz, ha puesto en valor el acuerdo alcanzado con EH Bildu, subrayando que ambas partes han “aparcado” lo que les separaba, y que “aquello que era bueno para Euskadi se ha incorporado”. “Ha sido un ejercicio sincero de diálogo y entendimiento con resultados positivos. Su socio de Gobierno, el PSE, ha destacado el incremento del dinero destinados a políticas públicas, los más de 1.600 millones de inversión, el “firme compromiso” en I+D, los ocho de cada diez euros destinados a gasto social, el mantenimiento del programa covid en Salud y Educación, y la apuesta “inequívoca” por la perspectiva de género. Su portavoz, Sonia Pérez, ha puesto en valor que las cuentas salen con el 80% de la Cámara vasca. “Nos alegramos de haber llegado, a través del diálogo y la negociación, al acuerdo con el principal grupo de la oposición, EH Bildu, que refuerza aún más este proyecto presupuestario”, ha afirmado.