Díaz Ayuso crea un sistema paralelo al oficial para la recepción de refugiados ucranios
La presidenta de la Comunidad de Madrid pide a los desplazados que acudan al hospital Zendal para registrarse y ofrecer servicios y Escrivá responde en el Congreso: “¿Para qué quieren llevar a los refugiados al Zendal? ¿Para hacerse una foto? ¡No hace falta!”
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha anunciado este miércoles una serie de medidas para la recepción de los refugiados ucranios aunque buena parte de ellas duplican los servicios que ya ofrece y coordina el Gobierno central. Un portavoz de la presidencia madrileña niega que se trate de duplicar servicios que ya ofrece el Estado, que es quien tiene la competencia, sino de reforzar la ayuda que ya se da y facilitar los recursos a los desplazados. Según recoge el diario Abc, se trata de “ordenar el caos”, en palabras del consejero de Presidencia y Justicia Enrique López.
El Comité de Crisis de Ucrania, creado por el Gobierno regional, ha decidido implementar, entre otras cosas, un “Registro Único de Desplazados” en el que “será necesario inscribirse” si se quiere acceder a algunos de los servicios ofrecidos por las diferentes consejerías. La Comunidad propone que el alta en ese registro se haga presencialmente en el Hospital Enfermera Isabel Zendal, inaugurado en diciembre de 2020 para hacer frente a la pandemia de covid-19 y que la Comunidad quiere convertir en un centro de referencia y recepción en el contexto de la guerra en Ucrania.
La Comunidad había ofrecido a la Delegación de Gobierno varias veces el hospital para que la Policía documente allí a los refugiados, como ya ocurre en el centro de Pozuelo de Alarcón y en otros tres habilitados por el Gobierno en Alicante, Barcelona y, próximamente, en Málaga. La oferta del Gobierno regional incluía también centralizar en el hospital otros trámites así como control sanitario y posibilidad de vacunación, pero el Gobierno declinó el ofrecimiento por no considerarlo necesario.
El ministro Escrivá se ha referido enojadamente a la iniciativa de Díaz Ayuso en el Congreso en la tarde del jueves. Respondía al diputado popular José Ortiz Galván, quien le reprochó haber rechazado el hospital “por connotaciones políticas”. El ministro leyó en voz alta la nota de prensa del anuncio de la Comunidad de Madrid e indignado arrancó: “De lo que se trata es de que cuando llega un refugiado no le carguemos de trámites. No le hagamos ir también al Zendal a que se registre cuando ya se ha registrado. Se les está poniendo un trámite adicional y ¿para qué? ¿Para hacerse una foto en el Zendal? ¿Para qué? ¡No hace falta!”. El ministro ha insistido en que el derecho a la sanidad y a la educación, entre otros, ya están garantizados sin necesidad de más registros y, elevando el tono, ha concluido: “Lo que tienen que hacer es engrasar su sistema sanitario y de educación para que cuando vayan llegando puedan darles el derecho que tienen”.
El hospital está 20 minutos en transporte público del aeropuerto de Barajas, pero a 48 minutos de la Puerta del Sol o a 1 hora y 17 minutos (y tres transbordos) del centro de recepción de Pozuelo, parada imprescindible para cualquier refugiado que busque instalarse en España vía la capital. Está aún más lejos de algunos lugares, como Cercedilla, en los que se han instalado ya a decenas de refugiados. Una segunda opción contempla que se acuda a las consejerías y se haga el registro remoto con la ayuda del personal de Atención al Ciudadano.
La nota de prensa de la Comunidad de Madrid no especifica las ventajas de este registro que ya hace el Gobierno central de forma inmediata en todo el territorio nacional al tramitar los permisos de residencia y trabajo de cada refugiado. Sí da a entender que darse de alta en él es necesario para recibir determinados servicios, aunque los derechos de los ucranios como el acceso a la sanidad, a la educación o la asistencia jurídica, ya están reconocidos en la directiva europea de protección temporal que rige en toda la UE la acogida de los refugiados y en la legislación nacional.
Otra de las novedades anunciadas por el Gobierno regional es un Punto de Atención e Información presencial que también se ubicará en el Zendal. Este espacio, según la Comunidad, ofrecerá información y atención “general” en ucranio y en español de todos los servicios disponibles en la región. Aquí se podrá tramitar el alta en la Tarjeta Sanitaria de la Comunidad de Madrid que, en realidad, ya puede hacerse en cualquier centro de salud tras las instrucciones dadas para ello por el Ministerio de Sanidad. También se podrá gestionar aquí la escolarización de los menores que, en Madrid, puede realizarse directamente en los centros educativos, a través de los ayuntamientos o la propia consejería de Educación. El servicio promete también expedir la tarjeta de transporte gratuito, algo que ya gestionan las ONG responsables por la acogida de refugiados.
La idea de acudir al Zendal para realizar todos estos trámites, aclara un portavoz, es que se pueda salir de allí con el mayor número de necesidades (como la tarjeta sanitaria o la de transporte) resueltas de una vez. “Estamos tratando de evitar desplazamientos innecesarios, que salgan de allí con los servicios facilitados”, explica.
También en ese punto del hospital se ofrece “asesoramiento en la activación para el empleo” y “formación para emprendedores”, un servicio que la red de acogida nacional ofrece como “atención laboral” y que contempla formación, orientación laboral, homologación de títulos...
Otra de las prestaciones lanzadas por el Gobierno regional es la creación de un servicio específico en el teléfono de atención al ciudadano 012 y un número específico para los ucranios (900 822 833). Este servicio gratuito y con intérpretes está disponible 24 horas al día, exactamente igual que el número habilitado la semana pasada por el Gobierno central (91 047 44 44) para asistir en todos los trámites y en el proceso de acogida a los refugiados.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.