Interior registra un aumento de casi un 70% en los delitos contra la orientación sexual en España
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, califica de “preocupante” la tendencia ascendente de los casos de odio que achaca a un mayor número de denuncias y a la crispación política
Los delitos de odio ―aquellos en los que las víctimas se eligen por motivos de raza, origen, religión, discapacidad u orientación sexual, entre otros― constituyen un “fenómeno complejo”, en crecimiento desde 2014. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha calificado este lunes de “preocupante” su tendencia ascendente y la ha atribuido al mayor número de denuncias y a la crispación política. El último Informe sobre la Evolución de los Delitos de Odio en España, hecho público este lunes, revela un aumento muy llamativo en los ataques relacionados con la orientación sexual, que han subido un 67,63%, según datos de 2021. El trabajo compara los casos con los de 2019, porque los datos de 2020 no son representativos por la incidencia de la pandemia.
De las 1.724 denuncias relacionadas con delitos de odio registradas por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de Estado en 2021, casi un 6% más que en 2019, sobresalen las que tienen una motivación racista o xenófoba (639), seguidas de las relacionadas con la orientación sexual o identidad de género (466) y las que tuvieron que ver con la ideología de la víctima (323). Estas últimas, sin embargo, han caído un 45,3% con respecto a 2019. La estabilización de la situación política en Cataluña ha contribuido, según Marlaska, a ese descenso.
“Al mismo tiempo que han descendido los hechos relacionados con la ideología, existe un mejor tejido social y una mayor confianza en las fuerzas y cuerpos de seguridad que han ayudado a mejorar los niveles de infradenuncia [los casos que no se denuncian]”, ha explicado Marlaska, apuntando que ocho de cada diez delitos de odio siguen quedando impunes. “Por otra parte, es cierto que la crispación política y los discursos de odio pueden influir en lo que se piensa de alguien por su raza, su orientación sexual, su religión, es decir, en todos los ámbitos que atañen a los delitos de odio”.
El perfil de las víctimas
Los principales afectados por este tipo de comportamientos son personas del sexo masculino (el 63,82%), mientras que el grupo de edad más victimado es el comprendido entre los 26 y los 40 años, con un 32,98%. Los menores de edad constituyen el 11,31 del total de victimizaciones en 2021.
Según la nacionalidad de los afectados, el informe refleja que en primer lugar se encuentran los españoles, con el 65,53% del total de victimizaciones registradas. Dentro del conjunto de víctimas de nacionalidad extranjera (34,47% restante), las que contabilizan valores más elevados son las procedentes de Marruecos (9,66%), Colombia (2,72%) y Venezuela (1,76 %). Y por lo que se refiere a la tipología delictiva de estos hechos de odio, destacan en primer lugar las lesiones (382) y las amenazas (381), seguidas por los daños (124) y las injurias (117). La mayoría de ellos (732) fueron cometidos en la vía pública, y después aparece la vivienda, en 373 ocasiones.
El número de detenidos o investigados en 2021 por delitos e incidentes de odio asciende a un total de 743. Las personas de sexo masculino protagonizan un porcentaje muy elevado de estas detenciones e investigaciones: el 81,29%. Con relación a los grupos de edad, un porcentaje importante de los autores de estos hechos se encuadran dentro del rango de 26 a 40 años, en concreto, el 29,21%.
Tendencia alcista
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado investigaron en 2021 un total de 1.802 infracciones penales e incidentes de odio en España, incluyendo las infracciones administrativas. Se trata de 96 hechos de odio más que en 2019 (un aumento de un 5,63%), lo que confirma la tendencia alcista de este fenómeno delictivo registrada desde 2014. De ellos fueron esclarecidos 1.133, el 63%.
Con el fin de revertir esta tendencia, el ministro del Interior ha recordado el estado de ejecución del Primer y el Segundo Plan de Acción de Lucha contra los Delitos de Odio, aprobado el pasado mes de abril y con vigencia hasta finales de 2024. Entre los objetivos cumplidos, el ministro ha destacado la creación de grupos especializados en la investigación de los delitos de odio en la Comisaría General de Información (CGI) de la Policía Nacional y en la Jefatura de Información de la Guardia Civil, tanto en sus servicios centrales como en su despliegue periférico.
“Estoy convencido de que el trabajo que desarrollarán estos equipos especializados de investigación mejorará las tasas de esclarecimiento policial de los hechos de odio, una circunstancia que a buen seguro nos ayudará a rebajar el alto nivel de infradenuncia detectado en este fenómeno delictivo”, ha señalado.
Bandas juveniles
En el marco de los recientes tiroteos de este fin de semana en Alcorcón y Fuenlabrada con resultado de muerte, Grande-Marlaska también ha destacado la Instrucción 8/2022 dictada por el secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez, el pasado mes de mayo, y relacionada con el Plan de Actuación y Coordinación Policial frente a Grupos Violentos de Carácter Juvenil. En virtud de esa instrucción, las investigaciones de hechos delictivos cometidos por este tipo de grupos juveniles violentos ya tienen en cuenta e incluyen en los atestados la posible motivación de odio.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.