Sánchez estrenará en Kiev el primer acto de la presidencia española de la UE como gesto de apoyo a Ucrania

El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, tiene previsto viajar a Kiev este sábado para arrancar la presidencia semestral de la UE en Ucrania. La visita, la segunda de Sánchez en pocos meses, busca simbolizar el apoyo sin fisuras de la Unión al país invadido por Rusia en un momento, además, particularmente intenso, en los primeros compases de la decisiva contraofensiva ucrania y con el Kremlin debilitado por la rebelión fallida del fin de semana, pero que sigue escalando su amenaza. En Kiev, el líder español, se reunirá con el presidente ucranio, Volodímir Zelenski, según fuentes comunitarias, ante quien remarcará que Ucrania será uno de los focos principales del semestre español, que tendrá en su agenda elementos clave como las conversaciones sobre la adhesión de Kiev a la UE.

La visita de Sánchez a Ucrania, a pocos días de inicio de la campaña electoral por los comicios adelantados al 23 de julio, le impedirá participar en el gran desfile del Orgullo LGTBI en Madrid como el primer presidente en hacerlo, un gesto que algunas voces del colectivo esperaban en un momento en el que la deriva ultraconservadora de Vox —con el que ha pactado el PP para gobernar juntos 140 ayuntamientos en toda España y la Comunidad Valenciana— ha dejado imágenes como la retirada de banderas arcoíris de edificios oficiales y otras medidas homófobas. Al desfile sí asistirán miembros del Gobierno como la vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, o el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

“Vamos a mostrar la unidad al presidente Zelenski”, ha incidido Sánchez este jueves en Bruselas, donde participa en la cumbre del Consejo con los líderes de los Veintisiete, que cuenta con la intervención por videoconferencia de Zelenski y con la presencia al inicio del secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg. En la reunión, ha precisado el presidente español, evaluarán “los últimos acontecimientos en Rusia”, el paquete de sanciones para ahogar la maquinaria de guerra del Kremlin y las fórmulas para que Rusia rinda cuentas por sus crímenes de guerra en Ucrania. También las iniciativas para impulsar el plan de paz de 10 puntos de Volodímir Zelenski y su petición de que se celebre una conferencia de paz.

Sánchez estrenará la presidencia española en Kiev y se embarcará en una intensa agenda en los primeros días del semestre, en los que recibirá en Madrid a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, al presidente del Consejo de la UE, Charles Michel, y a los comisarios de la UE la próxima semana. Antes, en Kiev, conversará con Zelenski, que en las últimas semanas ha tanteado a España para que se sume a la “coalición Patriot” y aporte a Kiev una de las baterías antimisiles que tiene. La presidencia española tendrá entre sus principales prioridades el apoyo sostenido a Ucrania, como trasladó el líder español a Zelenski en su visita en febrero, coincidiendo con el primer aniversario del inicio de la guerra a gran escala lanzada por Putin. Kiev depende del sostén económico (y político) de la UE para mantenerse a flote y corresponderá al semestre español el inicio de las conversaciones sobre la revisión del marco presupuestario plurianual que ha propuesto la Comisión Europea y que incluye un nuevo instrumento de apoyo económico de 50.000 millones de euros para Ucrania, una cantidad “extra” que se pide a los Estados miembros.

España, que iniciará la presidencia de turno heredada de Suecia muy poco antes de las elecciones, tendrá que coordinar también las conversaciones entre los Estados miembros tras el informe sobre los progresos de Ucrania en su camino hacia la UE, que se prevé para octubre y que determinará si se abren negociaciones de adhesión con Kiev, como desea Zelenski, o hay que esperar un poco más. Cuando la Unión Europea busca otras fórmulas para apoyar económicamente a Kiev, el debate de si se puede utilizar los activos congelados por las sanciones de la UE sobre Rusia —o los beneficios que generan— para pagar la reconstrucción de Ucrania será otro de los puntos en la mesa de la presidencia española.

Zelenski trasladará a Sánchez el agradecimiento por el apoyo sostenido de la UE (y de Lituania) y volverá a elevar el reclamo de que su país necesita compromisos de seguridad de la Unión y de los países de la Alianza Atlántica, apuntan fuentes de Ejecutivo de Kiev. Es un debate caliente en el seno de la organización militar de la que también es miembro España y en el que los países más activos en su apoyo a Kiev se plantean brindar compromisos de seguridad de forma bilateral o en grupo, como adelantó EL PAÍS; una fórmula que significa fundamentalmente acuerdos para que los envíos de armas occidentales sigan fluyendo hacia Ucrania para crear una coraza que sea disuasoria para Rusia. Un debate que también van a mantener los líderes de la UE este jueves en Bruselas.