Detenido el líder de Coalición por Melilla por compra de votos y fraude en contratos públicos
El arresto de Mustafá Aberchán y otras cinco personas deriva del escándalo de las papeletas por correo en las elecciones autonómicas de 2023
La Policía Nacional ha detenido este martes al líder del partido local Coalición por Melilla (CpM), Mustafa Aberchán, y a otras cinco personas por el presunto amaño de contratos menores del Gobierno de la ciudad autónoma, según fuentes cercanas a la investigación. La operación, bautizada Santiago-Rusadir, está relacionada además con la investigación que se puso en marcha por supuesto robo y compra de votos por correo en las pasadas elecciones autonómicas de mayo de 2023, según ha avanzado El Confidencial y han confirmado a EL PAÍS fuentes policiales. En el operativo, en el que se han efectuado siete registros, se investigan delitos de pertenencia a organización criminal, fraude en la contratación pública, prevaricación administrativa, tráfico de influencias, falsedad documental y malversación de caudales públicos. Mustafá Aberchán fue presidente de la ciudad autónoma de Melilla durante un breve período entre 1999 y 2000, y su partido formó parte del Gobierno en la pasada legislatura (2019-2023), que es cuando presuntamente se cometió el fraude.
Fuentes policiales sitúan el epicentro de la trama en el partido localista, que formó parte en el pasado mandato del Gobierno tripartito de la ciudad autónoma presidido por Eduardo de Castro (que sería expulsado de Ciudadanos) y en el que también estaba el PSOE. De hecho, en la operación de mayo de 2023 por la supuesta compra masiva de votos en la ciudad autónoma se produjeron al menos 10 detenciones, entre ellas la de Mohamed Ahmed Al Lal, alias Himmi, consejero de Distritos, Juventud y Participación Ciudadana de aquel Gobierno y número tres de la lista electoral de CpM. También fueron detenidos Abdelilah N., yerno del propio Aberchán, y un hermano de aquel.
Entre los arrestados el año pasado también había dos pequeños empresarios, un funcionario de la Consejería de Medio Ambiente y un antiguo candidato del partido Adelante Melilla, una formación situada en la órbita de CpM para restar apoyos a otras similares. Todos ellos fueron acusados de delito electoral y de pertenencia a grupo criminal. En aquella operación se efectuaron 10 registros, en los que fueron encontrados dinero y papeletas, entre ellas algunas supuestamente robadas a carteros en las semanas previas. Entre los domicilios y locales en los que la policía entró, estaba el que usaba CpM como “centro de datos” y que servía como sede del equipo de campaña de la formación.
Entonces, el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, en el decreto por el que encargaba las pesquisas a la Fiscalía Anticorrupción, señaló que los entonces arrestados presuntamente “conformarían una estructura organizada, con planificación previa y concertada” de “individuos afines” o “relacionados” con el partido Coalición por Melilla. En aquel documento, el ministerio público ya apuntaba que “la compra de votos se estaría financiando además con parte de los fondos obtenidos por empresas y particulares relacionadas con el partido político indicado en licitaciones públicas, convenios, contratos y subvenciones que se habrían adjudicado durante la última legislatura en la ciudad autónoma”.
El origen de aquella operación fue un hecho casual: el supuesto amaño de partidos de un modesto equipo de fútbol de la ciudad que era investigado por la Policía Nacional. Durante aquellas pesquisas sobre el fraude en las apuestas deportivas que tenían como epicentro el CD Huracán Melilla, un equipo de la Tercera RFEF (el quinto escalón del fútbol español), los agentes interceptaron con orden judicial una conversación telefónica del expresidente de este equipo, Felipe Heredia Núñez, en la que este supuestamente presumía de haber conseguido más de 500 votos para CpM. Heredia fue uno de los detenidos en mayo por el fraude electoral y posteriormente volvió a ser arrestado por el amaño de partidos.
Aquella información se sumó a la recabada en el transcurso de otra investigación policial, en este caso sobre una red de menudeo de droga, que apuntaba a la existencia de captadores que recorrían las barriadas humildes de la ciudad autónoma en busca de personas dispuestas a vender su sufragio a cambio de cantidades que oscilaban entre los 100 y los 150 euros. Con los datos recopilados, la titular del Juzgado de Instrucción 2 de Melilla, María del Carmen Perles, ordenó cinco días antes de los comicios de mayo de 2023 el arresto de las 10 personas. Entre las subvenciones investigadas ya entonces estaba una que recibió precisamente el CD Huracán en abril supuestamente para financiar sus desplazamientos a la Península a disputar partidos oficiales cuando, paradójicamente, la temporada estaba prácticamente concluida.
El líder de Coalición por Melilla, Mustafá Aberchán, presidente de la ciudad autónoma entre julio de 1999 y julio de 2000, fue condenado por el Tribunal Supremo a dos años de cárcel y dos años y medio de inhabilitación por liderar una trama de compra de votos por correo en las elecciones al Senado de 2008. Esta pena está extinguida desde el pasado agosto.
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