Vox detona el pacto con Prohens, pero lo mantiene en el Consell de Mallorca

Vox ha roto en Baleares el acuerdo de gobernabilidad que mantenía con el PP de Marga Prohens, al que ofrecía su apoyo externo en el Parlamento autonómico, pero sin contar con cargos orgánicos en el Ejecutivo. La formación de ultraderecha ha retirado su apoyo y el PP de Prohens tendrá que gobernar en minoría apenas un año después de su toma de posesión. A pesar de que no fue aclarado desde la dirección nacional, el partido en las islas circunscribe la retirada del apoyo al PP sólo al ámbito de Gobierno autonómico y asegura que el gobierno de coalición entre los ultras y los populares se mantiene en el Consell de Mallorca y en los diferentes ayuntamientos de las islas.

La presidenta del Gobierno de Baleares ha comparecido este viernes para manifestar que su partido queda liberado del cumplimiento de los 110 puntos acordados con Vox para garantizar la gobernabilidad de las islas y ha avanzado que se ceñirá al programa de gobierno del PP. “Ya no tengo ningún compromiso con los puntos pendientes de los 110 acuerdos que no figuren en el programa de gobierno del PP”, ha señalado Prohens, quien ha recordado que uno de esos puntos es, precisamente, ceder a Vox la presidencia del Parlamento que ahora ostenta el ultra Gabriel Le Senne. La líder del PP ha dado por hecho que la decisión de Vox implica, “como no puede ser de otra manera”, que Le Senne renuncie al cargo. Prohens también ha criticado que nadie de la dirección nacional o regional de Vox se ha puesto en contacto con ella.

Sobre las medidas pactadas con Vox que ya se han aprobado, como el plan voluntario de segregación lingüística, la presidenta ha aclarado que se mantendrán, a la espera de ver cómo evoluciona a lo largo del curso lectivo. Con respecto a las que están en tramitación, como la derogación de la Ley de Memoria Democrática, Prohens ha señalado que su futuro dependerá de las negociaciones parlamentarias. Sobre las medidas que todavía no se han impulsado, entiende que “Vox ha renunciado a su aplicación”. Para Prohens “el escenario no cambia tanto” porque el partido de Abascal no tenía cargos orgánicos en el Gobierno regional, aunque ahora, sin el apoyo de los siete diputados ultras, el PP no tiene garantizado poder sacar adelante sus medidas.

Otra de las aristas de esta crisis es la situación en la que queda el Consell de Mallorca, donde PP y Vox gobiernan en coalición. Los ultras ocupan la vicepresidencia de la institución insular y la consejería de Cooperación Local. Fuentes de la formación ultra en las islas aseguran que la ruptura solo afecta al Gobierno autonómico. Es precisamente el Consell la institución que tiene las competencias para atender a los menores migrantes no acompañados que llegan a Baleares, de la que es responsable el Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales. “El Govern”, ha dicho Prohens, “siempre ha sido respetuoso con la autonomía de cada Consell y Ayuntamiento y corresponde a los presidentes insulares y los alcaldes decidir y velar por la gobernabilidad y la estabilidad de las instituciones”. En el acuerdo suscrito con la ultraderecha para garantizar los apoyos a su gobierno, no se mencionaba el tema de los menores migrantes no acompañados. El texto decía: “Aprobaremos un plan de choque inmediato contra la inmigración ilegal, la ocupación y la creciente inseguridad, garantizando la atención humana que las víctimas de las mafias deben recibir. Dicho plan incluirá la colaboración documental necesaria con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para la identificación de personas en situación ilegal en las islas con el objetivo de que se proceda a su repatriación conforme a la ley”.