El Gobierno evita confrontar en el Senado frente a la arremetida del PP y la indignación de Compromís por la dana

Por mucho que la ministra portavoz, Pilar Alegría, haya repetido que ya habrá tiempo de “depurar responsabilidades”. Por mucho que la también titular de Educación haya insistido en que “los debates” sobre si la Generalitat y Gobierno central actuaron o no con diligencia el día del paso de la dana por la Comunidad Valenciana son cosa del futuro. Por mucho que La Moncloa haya preferido evitar entrar al fondo de la cuestión, y no “confrontar”, algunos senadores de distinto color político se han lanzado en cualquier caso a la arena del hemicilio del Senado con la gestión de la gota fría en el centro. Durante la primera sesión de control tras el temporal del 29 de octubre, las acusaciones han llegado principalmente desde la bancada del PP contra los ministros socialistas. Aunque quien ha ido más lejos en sus aseveraciones ha sido el senador valenciano de Compromís Enric Morena, que ha anunciado acciones judiciales de su partido contra el president Carlos Mazón. Y con un supuesto delito ya claro.

—Aquí se ha producido un homicidio imprudente, temerario (...). La querella por esta imprudencia será puesta contra el presidente Mazón.

Morera ha cargado las tintas contra la Generalitat, a la que ha acusado de estar integrada por “incompetentes” y con un presidente autonómico “incapaz”, que ha llevado al pueblo valenciano a “padecer muertes evitables” y a la “destrucción más grave”. Pero el senador de Compromís también ha repartido contra el Gobierno central. “Usted lo sabe porque estuvo allí”, ha afirmado Morera dirigiéndose al ministro de Interior, Grande-Marlaska, que estos días se turna con el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, para secundar el Cecopi, organismo de coordinación de emergencias, reunido cada jornada en Valencia. “Usted y el Estado también son responsables. Usted, viendo lo que había allí, tenía que haber actuado, con toda la fuerza del Estado, porque estamos en manos de unos incompetentes, eso lo tenía que haber hecho sin esperar a la declaración del estado [de emergencia] 3″, ha señalado el senador valenciano.

Siguiendo la instrucción pautada por La Moncloa de no presionar por el momento en público a Mazón, y de no ahondar en los pormenores de la gestión de la crisis, sino de enfocar el mensaje en la reconstrucción y auxilio, Grande-Marlaska ha pasado por encima de las recriminaciones de Morera. El ministro se ha dedicado, por contra, a enumerar las advertencias de la Aemet —dependiente del Ejecutivo central—, dadas desde hacía días antes y hasta el fatídico 29 de octubre. “Desde ese día, el Gobierno ha estado a disposición del Gobierno valenciano”, ha respondido el ministro.

En el grupo parlamentario popular, su portavoz, Alicia García, ha abonado el terreno ya sembrado en la mañana de este martes por su líder, Alberto Núñez Feijóo. El argumentario de Génova pasa ahora por incidir en el hecho de que la ministra para la Transición Ecológica y responsable última de la Confederación Hidrográfica del Júcar, Teresa Ribera, cometió dejación de funciones al encontrarse de viaje entre París y Bruselas, recuperando el ya famoso, aunque ahora traído a colación para la dana, “Gobierno a la fuga” de Sánchez. Y en cargar contra La Moncloa por no declarar la emergencia nacional, lo que en la práctica supone quitar el mando de la gestión de la crisis a Mazón.

—La ministra Ribera lleva 15 días escondida en Europa. Ahora tendrá que salir del escondite para explicar por qué solo alertaron del río Magro, por qué nadie miraba al barranco de Poyo. Los responsables de esto estaban de gira.

Tras la alocución de la senadora popular y desde las bancadas contrarias, se ha escuchado. “¡Mazón comiendo!”. Alguno de los parlamentarios ha exclamado en medio del murmullo en alusión al almuerzo del president con una periodista que provocó que llegara a la reunión del Cecopi del martes 29 pasadas a las 19.30, dos horas y media después. “Su único afán es construir un relato mentiroso para exculpar a Sánchez de su dejación de funciones, sigan construyendo un relato para dañar, que nosotros seguiremos construyendo lo dañado (...) Ni emergencia ni despliegue, un presidente que ha dimitido de sus funciones. ¿Qué más tiene que pasar para que declaren la emergencia nacional?”, ha expresado García durante su intervención, dirigida a Félix Bolaños.

El ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes no ha entrado al trapo más allá de reiterar que no es el momento de “confrontar”, en consonancia con la línea de Alegría, Grande-Marlaska y la consigna del Gobierno. “Su tono no lo merecen los valencianos. Estamos trabajando con la Generalitat Valenciana, desplegando todos los medios públicos. Su tono de hoy resulta tan ajeno a lo que está pidiendo la ciudadanía (...) “Espero que olvidemos cuanto antes la intervención que ha tenido hoy en esta Cámara”, ha ironizado el ministro, que este domingo hizo una ronda de contactos con los portavoces de los grupos en el Congreso para abordar las consecuencias de la dana. También con el PP a través de sus diputados Miguel Tellado y Juan Bravo. Bolaños ha asegurado que los emisarios populares no pusieron sobre la mesa esa solicitud de estado de emergencia nacional pese a que la formación de Feijóo lo reitere en público.

—Solo les faltaba a ustedes para su indignidad venir a parapetarse detrás de las víctimas.

Así ha concluido el senador de Vox Ángel Pelayo la lista de preguntas en torno a la dana.