El gran hospital de Málaga se hace esperar 17 años y costará casi el doble
El que será el mayor centro sanitario de Andalucía fue prometido por el PSOE para 2015 y el PP lo anunció para 2026, pero no estará listo, como muy pronto, hasta dentro de ocho años
Tendrá 810 habitaciones, cerca de 200 consultas, medio centenar de quirófanos, casi 2.000 plazas de aparcamiento y más de 300.000 metros construidos. El denominado tercer hospital de Málaga será un gran complejo llamado a ser la infraestructura sanitaria más importante de la Costa del Sol y de Andalucía. El problema es que, incluso antes de que sus obras hayan empezado, acumula ya casi dos décadas de retraso. El PSOE lo prometió para 2015 y el PP, cuando llegó al Gobierno autonómico, para 2026. Ahora, un estudio publicado esta semana por la Administración andaluza indica que los nuevos plazos previstos apuntan a 2032. El documento recoge, además, que las obras costarán 686 millones de euros frente a los 375 millones de euros presupuestados de inicio, casi el doble.
El déficit de camas hospitalarias es una de las mayores reclamaciones sanitarias en Málaga desde hace décadas. Es una queja constante entre sindicatos y profesionales. La propia Junta de Andalucía reconocía en 2021 que la situación era “preocupante” y daba datos: la provincia andaluza tenía 147 camas por cada 100.000 habitantes frente a las 237 de media de todo el territorio nacional, número que definía como “preocupante” mientras la ratio empeora debido al constante crecimiento de población, sobre todo en el litoral. El tercer hospital fue siempre el gran proyecto que venía a acabar con el problema y completar al Regional y al Clínico Universitario. María Jesús Montero, hoy vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, anunció el proyecto en 2007 cuando era consejera andaluza de Salud y en 2009 aseguró que la infraestructura estaría lista en “cinco o seis años” si las administraciones se ponían de acuerdo. No lo hicieron y la idea se diluyó. Apenas la mantenía viva la oposición.
Desde ahí, en 2015, Juan Manuel Moreno Bonilla impulsó lo que denominó una “batalla cívica” para reivindicar la infraestructura frente a las “promesas fantasmas” del PSOE, entonces en el gobierno autonómico. Iniciaba una recogida de firmas acompañado por el alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre (PP), y el que entonces era presidente de la Diputación Provincial, Elías Bendodo —hoy vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local en el PP—, quien reclamaba que Málaga necesitaba 800 camas más para situarse en la media nacional. Son justo las previstas en el nuevo hospital, que fue una de las grandes promesas de Moreno Bonilla en las elecciones de finales de 2018. Al año siguiente, ya como presidente, movió ficha con rapidez.
Aquel año licitó el anteproyecto y anunció que las obras empezarían en 2020, aunque no lo hicieron. Ese año sí se firmó un acuerdo con la Diputación Provincial para que ésta cediera gratuitamente la parcela donde se levantará la infraestructura y en agosto de 2021 hizo una gran presentación del proyecto, que destacó cómo el mayor hospital de Andalucía. “Lo vamos a gestionar con mucha, mucha diligencia y sin las demoras a la que estábamos acostumbrados”, aseguró el presidente. Durante la jornada se desgranaron los detalles de un edificio que tendrá 15 plantas, estará conectado con el hospital Civil y el Materno Infantil —ubicados en una parcela cercana— y contará con 10.000 metros cuadrados para Urgencias. Estará diseñado por el prestigioso Estudio Lamela. “Da respuesta a una nueva medicina más personalizada y con gran presencia de la investigación”, explicaron los arquitectos de una propuesta que “incorpora una plaza pública” con “espacios comerciales y de restauración”. Tendrá 257.000 metros construidos de instalaciones sanitarias y otros 51.000 para estacionar vehículos.
“Procedimientos largos”
El complejo tendrá un 100% de financiación pública, pero el parking seguirá el modelo mixto: la empresa que los construya asumirá el coste —79 millones— y luego lo podrá explotar durante 30 años, con tarifas de 1,2 euros la hora y diferentes bonos y descuentos para sanitarios. Esas obras se licitarán en 2025, según anunció hace unas semanas el secretario general del PP en Málaga, José Ramón Carmona. Y según el estudio de viabilidad publicado esta semana por la Administración andaluza, la segunda fase del aparcamiento comenzará a funcionar en 2032 “coincidiendo con la puesta en servicio del hospital”. Es decir, seis años más tarde de lo previsto por los populares y 25 después de que se anunciase por primera vez. Todo a expensas de que se liciten las obras del edificio hospitalario en sí, que durarán cinco años desde su arranque y que aún no tienen ni presupuesto: en las cuentas autonómicas de 2025 no se recoge ni un euro.
“Es la obra de ingeniería civil más grande de los últimos 50 años en Andalucía. No se ha dejado de trabajar en ello, pero acarrea numerosos trámites y procedimientos largos, con plazos muy complejos que no siempre dependen de la administración pública. Seguimos trabajando”, explican fuentes de la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía sobre los retrasos, palabras similares a las realizadas por la consejera, Rocío Hernández, en sus últimas visitas a la ciudad malagueña. La oposición, sin embargo, no atiende a explicaciones. “Nos ha engañado a todos”, denunciaba el pasado martes Daniel Pérez, secretario general del PSOE en Málaga. “Sigue vendiendo humo y ahora confirma que, de abrirse, será en la próxima década. ¿Cuántas veces venderá el PP que van a hacer el Tercer Hospital de aquí al 2032?”, se preguntaba la portavoz de Con Málaga, Toni Morilla, en la red social X.
“Se entiende que una obra de estas características no se suele cumplir en el plazo previsto, pero este retraso es excesivo y sería deseable que la Administración acelere”, explican fuentes del Colegio de Médicos malagueño. “Málaga necesita camas urgentemente”, insisten desde el organismo, que recuerdan el constante crecimiento de población y apuntan que si el acuerdo con Muface no llega a buen término “supondrá un incremento considerable de usuarios nuevos en la sanidad pública”. “Es una vergüenza que en 2009 se hablara de un hospital en seis años y que ahora vayamos ya por 2032″, añade Antonio Martín Noblejas, presidente del Sindicato Médico de Málaga. “Es cierto que desde 2019 hay más movimiento”, reconoce el responsable sindical “pero se esperaba que los plazos fueran menores”. “Además, a saber si luego las obras se retrasan o pasa cualquier cosa o llega una crisis y todo va más lento”, lamenta quien denuncia el “histórico déficit” de camas hospitalarias en Málaga. “Y en los últimos años solo se ha compensado con el crecimiento de los hospitales privados. Por eso ahora somo las tercera ciudad con más recursos de sanidad privada en España”, concluye Martín Noblejas.
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