El Govern fía la última milla de la fibra óptica desplegada de urgencia a los municipios

La Generalitat mantiene en marcha las obras para sumar 51 municipios más a su red propia de fibra óptica. Adjudicadas por 9,9 millones, las obras está previsto que se finalicen a finales de septiembre. No obstante, los nuevos tramos de la red —cuya explotación corresponde a Cellnex, que mantiene su concesión— aún no llegarán a ningún hogar. El Govern cede esa responsabilidad, la de la última milla y la conexión definitiva a los hogares a la fibra, a los operadores locales y los ayuntamientos.

Los trabajos, iniciados a mediados de mayo, han sido tramitados como urgentes porque “el coronavirus ha permitido ver lo importante que es la conectividad”, según defiende el consejero de Políticas Digitales, Jordi Puigneró.

Pese a la urgencia del despliegue actual, el Govern no tomará ninguna medida excepcional en la última milla y, en ese aspecto, seguirá la vía ordinaria. “Cuando los tramos se acaben se pondrán a disposición de los operadores locales”, detalla Puigneró, que reconoce que la llegada de los nuevos nodos de conexión a las casas no será inmediata, si bien en algunos casos “a finales de año podría estar operativa”. “Si el Ayuntamiento no hace nada, pasará lo que quiera el mercado”, apunta el consejero en referencia a la necesidad de un estímulo local en zonas donde las grandes como Movistar, Orange o Vodafone no invierten por su poca densidad de población.

El director-gerente de la Federación Catalana de Empresarios Instaladores de Telecomunicaciones (Feceminte), Guillermo Canal, ve fundamental la colaboración entre ayuntamientos y operadores para desplegar las ramificaciones finales de la red. “A veces pactan no pagar nada por las canalizaciones en el municipio”, ejemplifica. Otra opción es que puedan colocar antenas en instalaciones municipales, como en depósitos de agua elevados. Coincide con él el presidente del Consejo Comarcal del Pallars Sobirà, Carles Isús, que concluye: “Somos un matrimonio necesario”.

Puigneró celebra que la Xarxa Oberta de Catalunya (XOC) ha propiciado la creación de 70 nuevos operadores locales en los últimos cuatro años. Wicat.net da cobertura al Pallars conectando los troncales de fibra de la XOC ya existentes a antenas de radioenlace, que hacen llegar internet por aire a velocidades más bajas que un cableado de fibra. Este sistema resulta más rentable. “Soterrar cable es carísimo por la obra civil que conlleva”, apunta Isús. “Un municipio del Pallars tiene una capital y ocho o diez núcleos más. Es impensable, a corto o medio plazo, cablearlos todos”, reflexiona el cofundador de Wicat.net, Arnau Orriols. Con el sistema aéreo la compañía puede ofrecer hoy 30MB a todos los pueblos. Una desventaja es que las antenas son susceptibles a la meteorología. “Tenemos una en el pico del Orri y su clima extremo hace que aumente el índice de incidencias”, reflexiona.

“En los núcleos de menos de 50 habitantes es evidente que ni ahora ni dentro de cinco años llegará la fibra”, apunta Puigneró, que menciona las alternativas inalámbricas: “Pero como más cerca tengas la fibra, más fácil es encontrar la solución”. Es el caso del Pallars, donde pasarán dos tramos nuevos, que conectarán Llavorsí con Vielha y Sort, respectivamente. Isús explica que el Consejo Comarcal está trabajando junto a los operadores —se reunieron con ellos el miércoles— para usar esos nuevos troncales y ampliar la conexión inalámbrica de 30 a 100MB en un año.

La XOC cubre, bajo el asfalto de las carreteras de la Generalitat, de manera extensa las provincias de Girona y Barcelona y llegará este 2020 a 39 de las 42 capitales de comarca. Sin embargo, presenta aún grandes vacíos en Lleida y Tarragona, donde se concentran la mayor parte de las obras en marcha. La red, que una vez acabadas las obras llegará al 37,69% de los municipios (un 84% de la población y a un total de 386 polígonos industriales), suscita críticas en el ámbito local porque redunda el despliegue de fibra en lugares que ya cuentan con oferta privada y sigue dejando desconectados a pueblos sin ninguna opción en el mercado.

Críticas al precio fijo

Para proporcionar fibra óptica a velocidad de 1GB, la línea de la XOC cuesta al mayorista 1.162 euros de alta, más 890 euros mensuales. Además, según estima la fundación Guifi.net, hacen falta otros 1.000 euros para la instalación inicial. El precio es fijo en todos los troncales de Cataluña. “Los operadores pequeños buscarán que, como máximo, la inversión tenga un retorno a los 5 años”, expone Canal. “Comparado con los precios de mercado es mucho más barato. Pero en zonas de baja población, los costes siguen siendo importantes”, opina Orriols.

Ascó (1.160 habitantes) tiene un nodo de la XOC a 17 km (Móra d’Ebre), demasiado lejos. Pero el municipio ha estrenado la fibra óptica esta semana. Hasta ahora solo tenían ADSL. El Ayuntamiento asumió el cableado de la última milla. “Como tenemos las nucleares, el presupuesto nos permite hacer este tipo de cosas”, explica el concejal de Ascó de Nuevas Tecnologías, Joan Martínez.

La red interna la han conectado a un troncal de la red de la empresa Lynthia (1GB) por 1.600 euros al mes. El servicio lo prestarán dos operadores locales, ya que ninguna administración (tampoco el Govern) puede ofrecer el servicio finalista por razones de competencia. El concejal de Nuevas Tecnologías, lamenta no haberse podido conectar a un troncal que en 2014 la Generalitat llevó al municipio y acabó adquiriendo Telefónica.

Los nuevos tramos de Xarxa Oberta

Bagà-Puigcerdà. Se trata de una obra dividida en dos tramos que finalizará en agosto. La inversión prevista es de 1,4 millones de euros.

Castellterçol-Moià. Los trabajos acabarán en julio tras una inversión prevista inicialmente de 298.791 euros.

El Vendrell-Valls. La Generalitat ha comprometido 615.378 euroa para la construcción, que acaba en agosto.

Súria-Solsona. Otra obra dividida en dos y que costará 1,5 millones de euros. Su finbalización está prevista para agosto.

Mollerussa-Les Borges Blanques. Prevista para finales de agosto, costará 620.495 euros.

Valls-Montblanc. Costará 650.654 euros y estará listo en agosto.

Móra la Nova-Falset. Dos tramos por un importe de 1,1 millones de euros. Previsto para junio.

Tortosa-Gandesa. Construcción en tres tramos por un importe de 1,3 millones de euros. Tendría que concluirse en agosto.

Llavorsí-Vielha. Se hace en dos tramos. El último se finalizará en septiembre de este año. 1,75 millones de euros.

Llavorsí-Sort. Agosto de 2020, por 606.964 euros.