Colau reprocha a Collboni que no negocie los presupuestos de Barcelona pero dice que aún hay tiempo

Jessica Albiach acusó a Pere Aragonès (ERC) de no llamarla durante tres semanas para negociar las cuentas de la Generalitat. Hoy es Ada Colau quién señala a Jaume Collboni (PSC) por no cogerle el teléfono para hablar de los Presupuestos de la Generalitat. “Collboni habla de diálogo, nosotros le votamos el trámite inicial de los Presupuestos, ha pasado casi un mes y no me ha llamado. Sé como se negocian los presupuestos y la primera norma básica es coger el teléfono y llamar. Nos han mandado alguien de su equipo a decirnos que esto es lo que hay”. Nuevamente, Colau se lamentaba este miércoles en SER Catalunya de la falta de diálogo del alcalde de Barcelona, Jaume Collboni.

El lamento de Colau llega horas después de que ayer las bases de Barcelona en Comú, el partido que lidera la exalcaldesa, decidieran votar no a los presupuestos de Collboni con una amplísima mayoría. “Sabe perfectamente qué hay sobre la mesa, pero hace meses que ha decidido aprobar los presupuestos por moción de confianza. Es su decisión, no la comparto, pero que la explique. Lo que digo yo y también lo dice Xavier Trias. El señor Collboni no tiene ganas de pactar”. El portazo definitivo del partido de Colau aleja más que nunca la idea de repetir por tercera vez un pacto de Gobierno con los socialistas, con quienes gobernaron en los dos últimos mandatos, y coloca a los comunes en la oposición. Pero Colau hoy ha dejado una puerta medio abierta: “La ciudad quiere que nos pongamos de acuerdo. Tirar la toalla no es una opción, ni antes del viernes ni después”.

A primera hora de este martes, cuando faltaban 72 horas para el pleno del Ayuntamiento de Barcelona donde deben votarse los presupuestos, el alcalde Jaume Collboni también elevó la presión hacia los comunes: “Que tengan un poco de generosidad, visión amplia y que escuchen lo que la gente dice”. Collboni señaló las coincidencias que tiene su Gobierno del PSC y con el partido de Ada Colau (con quien gobernó en dos mandatos) y ha considerado “difícilmente explicable que en el pleno del viernes no haya un voto favorable de los comunes”.

En el Ayuntamiento se puede recurrir a la cuestión de confianza, un mecanismo por el que el alcalde presenta las cuentas al pleno y si, en el plazo de un mes, no se arma un gobierno alternativo, quedan aprobadas automáticamente. Visto el panorama, y aunque tanto el alcalde como los comunes insisten en dialogar hasta el final, el gobierno municipal del PSC se ve empujado a aprobar las cuentas por cuestión de confianza, una fórmula a la que han recurrido otros alcaldes.

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