Río Paraíso, ‘influencer’ española contra la islamofobia: “Vete a tu país’, me decían”
La ‘tiktoker’, con un millón de seguidores, habla en el II congreso autonómico de derribar mitos y estigmas sobre la comunidad musulmana
Se llama Kauzar (Ceuta, 27 años) y en Tik tok, donde la conocen como Río Paraíso, cuenta con un millón de seguidores. Desde esa y otras redes sociales ayuda desde hace años a derribar mitos y estigmas sobre la comunidad musulmana entre la población más joven “a veces a través del sarcasmo, a veces del humor”. Ahora vive en Alemania pero este viernes recaló en Valencia para participar en el II Congreso autonómico de Islamofobia, que reivindica soluciones frente a un fenómeno de odio contra las personas musulmanas.
Pregunta. ¿Cómo entró en el mundo de las redes sociales?
Respuesta. Empecé a los 14 años con un perfil anónimo y me gustó, me fui soltando y más tarde creé un grupo llamado Una rosa, café y mujeres, que juntó a más de 8.000 mujeres. Cuando hace cinco años me fui a Alemania salté a Instagram y a YouTube para contar lo que era vivir en otro país. Era un contenido bastante cotidiano y dirigido a mi comunidad en Ceuta, como el que hace la mayoría de creadores, en el que hablaba de cosmética, tiendas y cosas así. Pero un día vi una noticia sobre una chica a la que habían vetado en su instituto por llevar el hiyab y me indigné. En caliente, sin pensarlo, y con 3.000 seguidores en mi cuenta, me puse el teléfono de frente y grabé lo mal que me parecía algo así [polemizó con otro influencer] y critiqué a las personas que fomentan el odio hacia el Islam sin imaginar que el vídeo llegaría tan lejos. Entonces no tenía ni perfil en Tik tok pero lo creé para responder a los ataques islamófobos. Leí un montón de comentarios de ‘¿por qué no me iba a mi país?’, cuando yo soy española, igual que mis padres y mis abuelos, marroquíes de origen.
P. ¿De qué hablas en tus redes?
R. Hablo de todo, pero mis contenidos tienen que ver con el activismo. Normalmente me encuentro con esos de ‘vete a tu país’, de tipo islamófobo. A veces hago vídeos de la compra en Alemania, para que la gente de España compare, y alguno me dice: ‘Claro, viviendo de ayudas, así cualquiera’. O estás en directo charlando y alguien salta con ’¿Y tu marido sabe que estás aquí? A ver si te va a pegar’. Otros te consideran inmigrante por ser musulmana. Y hay una cosa que se repite muchísimo y es que se ha propagado la falsa idea de que en el Islam está permitido el matrimonio infantil y muchos me preguntan a qué edad me casaron mis padres. Pues me casé yo, siendo mayor de edad y por decisión propia. No obstante, hay comentarios más positivos que negativos.
P. ¿Cómo reaccionas a los malos comentarios?
R. Tengo dos formas de combatirlos. Cuando el hate (odio) viene de alguien que considero que tiene influencia y su pensamiento puede influir en su comunidad y aumentar el odio hacia nosotros, suelo hacer un video respuesta. A lo mejor estoy en un directo y entra alguien que me dice ‘¿cuántas mujeres tiene tu marido? y le digo que cuatro, una está limpiando, la otra cocinando y se lo creen. O cuando me acusan de vivir de las ayudas y respondo que tienen que trabajar porque si no las ayudas no llegan. A veces tengo que bloquearlos.
P. Muchas musulmanas están cansadas de que les pregunten solo por si usan o no el pañuelo. Dicen que no necesitan ser salvadas...
R. No es que no necesitamos que se hable por nosotras. Ojo, hay mujeres que sí están siendo obligadas a llevar el hiyab en determinados países, y a lo mejor esas mujeres sí necesitan la voz del resto porque desde donde están no pueden hablar. Y yo lo apoyo. ¿Hay mujeres que utilizan el hiyab obligadas? Si. ¿Necesitan que hablen por ellas? Quizás. ¿Todas las que utilizan hiyab son obligadas? No. Yo lo llevo por mis creencias religiosas.
P. El congreso contra la Islamofobia en Valencia advierte de que el odio contra las personas musulmanas se ha disparado en todo el mundo. ¿Lo percibes en redes, sobre todo, con el auge de la ultraderecha?
R. Vengo de Ceuta, que es una ciudad donde hemos convivido varias culturas diferentes. De repente, aparece Vox y le da legitimidad y voz a un grupo de personas que desconocíamos que había entre nosotros. Personas que no nos quieren, que tienen una mala opinión sobre nosotros pero nunca nos lo habían hecho saber. No era correcto. El hecho de que en España no esté penado el delito de odio por islamofobia no ayuda.
P. Hablas de Gaza en tus vídeos. Las imágenes que vemos todos los días son estremecedoras.
R. Me provoca mucha tristeza que haya gente que piense que el conflicto empezó el 7 de octubre porque esto lleva pasando 75 años. Quiero pensar, y estoy muy orgullosa de España en ese sentido, que Occidente está empezando a despertar. Para mi Israel es la niña mimada de Occidente, de los EE UU, que ha perpetrado un crimen desde hace años, pero agradezco a Pedro Sánchez que haya dicho basta. Gaza no es un cárcel al aire libre, es un campo de concentración porque a prisión van los criminales y en Gaza hay bebés y ancianos que no han hecho nada. Creo en la convivencia de los dos pueblos, palestinos e israelíes. Pero no se puede seguir masacrando gente.
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