Teresa Ribera, sobre la ampliación de la vida de las nucleares que propone el PP: “No es viable económicamente”

Teresa Ribera, vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, ha subrayado este miércoles que “no es viable económicamente” ampliar —como propone el PP— la vida de las cinco centrales nucleares existentes en España más allá del calendario de cierre pactado con las empresas propietarias. Ese calendario contempla una clausura progresiva que empezará en 2027 y concluirá en 2035. El Pa...

Teresa Ribera, vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, ha subrayado este miércoles que “no es viable económicamente” ampliar —como propone el PP— la vida de las cinco centrales nucleares existentes en España más allá del calendario de cierre pactado con las empresas propietarias. Ese calendario contempla una clausura progresiva que empezará en 2027 y concluirá en 2035. El Partido Popular ha prometido revertir, si gobierna, el cierre de las centrales, aunque sin aclarar los interrogantes que esa reversión plantea. Y uno de los principales es cómo se costearía que siguieran funcionando las centrales, porque en cada extensión de la vida de una nuclear se deben hacer importantes inversiones en seguridad y recalcular los costes de gestión de unos residuos nucleares que están activos durante cientos de años.

Ribera ha recordado que, cuando en 2019 se decidió ese calendario de cierre, las propietarias de las centrales (las grandes compañías eléctricas españolas) “tenían muy claro” que no querían invertir en “un nuevo ciclo” de vida, ya que a partir de ese umbral “el desembolso es tan grande que no es rentable” seguir operando. Y, si no es rentable, “¿quién pagaría esta factura?”, le ha preguntado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a Ribera, en un acto del PSOE en el que ha charlado con su ministra. “Solo hay dos respuestas: el Presupuesto público o los consumidores de electricidad”, ha contestado la vicepresidenta.

Sánchez y Ribera han compartido un acto de partido centrado en la transición energética, dentro de la serie de conversaciones del presidente con sus ministros —difundidas por su canal de televisión— que empezó la semana pasada y con la que pretende reivindicar la gestión de la parte socialista del Gobierno. Lo han hecho un día después de que el Ejecutivo anunciara el nuevo Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), que actualiza los objetivos de implantación de renovables y de otras tecnologías para reducir los gases de efecto invernadero que genera la economía española. Este plan, cuyos objetivos son para 2030, ya contempla “la retirada ordenada y escalonada de una parte del parque nuclear” para finales de esta década, aunque según el calendario pactado no se concluirá hasta 2035.

Cierres en el aire

De acuerdo con las promesas realizadas por el PP y con las manifestaciones públicas de Vox en los últimos años a favor de la energía nuclear, el calendario de cierre de las centrales estaría en el aire si ambos partidos gobiernan tras las elecciones del 23-J. Los populares, dirigidos por Alberto Núñez Feijóo, ya han mantenido algunas reuniones con las compañías eléctricas. Y los responsables de algunas de estas empresas, como Enel e Iberdrola, han dicho que, si se cambia la retribución que reciben las centrales y se disminuye la presión fiscal, podrían continuar con su actividad. De ahí que la pregunta clave es cómo se pagaría esa ampliación de la vida de estas nucleares.

Porque lo que tienen en frente, y como competidoras, son tecnologías —como la solar, la eólica o el almacenamiento— cuyos costes siguen bajando y que tienen un respaldo claro de las instituciones europeas, basado también en los acuerdos internacionales de lucha contra el cambio climático. Ribera ha insistido en que “un nuevo ciclo” de vida de las centrales “no tiene sentido económico” y cuenta con “contestación social”, por lo que probablemente las empresas prefieran redirigir sus inversiones precisamente hacia las energías renovables y el almacenamiento. “No he visto a ningún alcalde levantando la mano para construir una central”, ha ironizado Pedro Sánchez para subrayar esa contestación social, algo que también se ha constatado hasta ahora con el intento de instalar el almacén de residuos nucleares, que ninguna comunidad autónoma está dispuesta a asumir.

Ribera ha defendido la implantación de renovables que se ha acometido en esta legislatura. “El cambio del modelo energético se ha activado”, ha resaltado la vicepresidenta, quien ha recalcado que, además de reducir la dependencia del exterior, en esta transición se están utilizando los recursos propios del país, en referencia al sol y al viento, pero también a “los recursos humanos y la industria”. “Si hay un partido ecologista en nuestro país, es el PSOE”, ha asegurado Sánchez durante este acto de su partido.

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