Paula Echevarría explota su faceta de ‘influencer’ incluso durante el confinamiento
La actriz, con tres millones de seguidores, comparte sus estilismos, sus rutinas de ejercicios y sus actividades junto a su pareja y su hija
Paula Echevarría se ha propuesto llevar el confinamiento de una manera positiva. La actriz en su faceta de influencer comparte todos los días en las redes sociales cada detalle de su vida durante la crisis del coronavirus. Deporte, cocina, videollamadas, recuerdos, películas, series... Todo tiene cabida en su perfil de Instagram, donde cuenta con más de tres millones d...
Paula Echevarría se ha propuesto llevar el confinamiento de una manera positiva. La actriz en su faceta de influencer comparte todos los días en las redes sociales cada detalle de su vida durante la crisis del coronavirus. Deporte, cocina, videollamadas, recuerdos, películas, series... Todo tiene cabida en su perfil de Instagram, donde cuenta con más de tres millones de seguidores.
Por el momento no puede rodar, pero sus quehaceres como influencer los intenta mantener al máximo posible. El estado de alarma ha provocado la suspensión de dos anuncios y tres sesiones de fotos para campañas publicitarias que tenía previstos. Pero desde casa sigue publicando instantáneas, dando consejos, retransmitiendo sus actividades... En definitiva, generando contenido.
Una actividad que se ha convertido en una norma es mostrar los estilismos que luce durante la cuarentena. Estos empezaron siendo conjuntos cómodos con sudaderas, pantalones cortos holgados y zapatillas de andar por casa. Algo que en su momento denominó como “uniforme”. Pero Echevarría se ha aburrido de tanta comodidad y ha ido cambiando poco a poco a prendas más vistosas y elegantes, como si saliera a la calle. Y por supuesto no se olvida de etiquetar a las marcas que luce: Zara, Stradivarius, Hermès o Dior, entre otras. “Quizás porque es domingo o porque llevo 18 días con un pantalón de algodón y una sudadera (bueno, no los mismos). Necesitaba quitarme el uniforme y vestirme un poquito. Eso sí, lo de los zapatos por casa sigo sin verlo”, escribió en su perfil de Instagram a finales de marzo.
También ha aprovechado para promocionar su propia firma de ropa, Space Flamingo, y su línea de cosméticos, Paula Echevarría Fragancias, algo muy habitual entre las influencers, como Chiara Ferragni o Dulceida. “No es porque lleve mi nombre… Pero este es uno de los mejores esmaltes de uñas que tengo”, comentó en referencia a una de las lacas de uñas de su colección. Sin embargo, no hay ni rastro de publicaciones promocionales de sus marcas más habituales, como Zara o Samsung, por las que le han llegado a calificar de “teletienda”. La única referencia que ha tenido a una empresa ha sido a Pantene, de la que es embajadora desde hace 14 años, para anunciar que el grupo Procter & Gamble, a la que pertenece la marca de productos para el cuidado del cabello, ha donado 500.000 euros a Cruz Roja para la construcción de centros médicos. “Me alegra trabajar en un grupo que se preocupa por los demás”, ha dicho en un vídeo.
De hecho, Echevarría no ha dado la espalda a la situación y ha convertido su cuenta de Instagram también en una plataforma para enviar mensajes optimistas o llenos de humor. Asimismo, ha sido una más de los famosos que se sumó a la iniciativa de la modelo Eugenia Silva para cantar el tema Color esperanza, de Diego Torres, como un himno en medio de la pandemia de coronavirus.
La actriz vive el confinamiento junto a su actual pareja, el exfutbolista Miguel Torres, y su hija Daniella, de 11 años, fruto de su matrimonio con el cantante David Bustamante. Ellos son también protagonistas de su frenética actividad en redes sociales durante la cuarentena. Junto al deportista, se pone en contacto con sus amigos mediante videollamadas. Y si la conversación le parece monótona, organiza una fiesta. El pasado 11 de abril apostó por una celebración temática inspirada en los años ochenta para la que llama su “chupipandi”, en la que la que la influencer lució una cinta en el pelo y una camiseta ancha sobre otra de color neón.
Con su hija se dedica a jugar y a ver películas y series. Este fin de semana se han decantado por Big Hero 6, de Disney, y en otra ocasión le dieron una oportunidad a Stranger Things. Echevarría no estaba muy convencida de si esta serie era apropiada para su hija, por lo que consultó a sus seguidores: “Aquí pone que es para mayores de 16 años, pero todas las niñas de su edad la han visto. No sé qué hacer”. Finalmente madre e hija comenzaron la serie y la actriz quiso inmortalizar el momento como buena influencer: “Dani, dale las gracias a todo el mundo que te dijo que podías verla”. A lo que la niña contestó: “Mamá, estamos viendo Stranger Things así que calla”.
Instagram también le ha servido a Echevarría para protestar sobre la persecución de los paparazis que soporta incluso en plena crisis del coronavirus. La actriz fue fotografiada a mediados de marzo saliendo de un supermercado con bolsas de naranjas y criticada posteriormente por no llevar guantes ni mascarilla, cuando su uso no es obligatorio, solo recomendable. Pero recientemente ha perdido la paciencia tras percatarse de que la seguía un vehículo y ha decidido publicar un vídeo en el que ha mencionado a la Policía Nacional y Policía Municipal. “¿Veis ese coche? Pues me está siguiendo mientras salgo a hacer mis recados. Entonces yo me pregunto si aquí el confinamiento es solo para algunos o para todos. Porque yo creo que cotillear la vida de los demás no es de primera necesidad. Es lo que creo. Así que un poquito de respeto. Espero que por lo menos no se baje del coche y no se me acerque”, ha contado.
Además, si su exposición en las redes sociales está siendo tan constante, también le llueven las críticas por ello. Junto a un médico, explicó que se iba a someter a una terapia específica porque ella es exfumadora y tiene las defensas bajas. En concreto, a unos tratamientos llamados “hemoterapia y sueroterapia con vitamina C y ozono" que, afirman, sirven "para aumentar tus defensas y tu capacidad de resistencia”. Algo por lo que estuvo en el punto de mira de los usuarios. Ella, por su parte, agregó que era una persona que había dejado de fumar y que había “tenido neumonía, además de alergia asmática”. “Me podría afectar mogollón. Con esto evitamos que la afección sea mayor”, ha afirmado.