Harald de Noruega, la crónica de 30 años de reinado y polémica
El monarca ha colaborado en un libro en el que aborda desde su matrimonio a la masacre de Utøya y a la relación de su hija Marta Luisa con un chamán
Aunque es conocida su reticencia a la hora de hablar de sí mismo en los encuentros con periodistas y medios de comunicación, el rey Harald de Noruega se ha permitido una excepción. Y lo ha hecho con el reconocido comentarista político Harald Stangehelle, exeditor del diario noruego Aftenposten, con quien ha mantenido 11 conversaciones en el palacio y la villa real del Kongsgården que verán la luz a mediados del próximo octubre en forma de libro, bajo el título Kongen forteller (El rey cuenta). En él hace repaso de sus 30 años de reinado.
En una entrevista concedida a la cadena de televisión TV2, el autor se reserva los detalles del contenido de la nueva biografía del rey, sin embargo avanza que se trata de un libro en el que el monarca noruego reflexiona sobre su vida y explica su historia en paralelo a la evolución del país escandinavo desde los tiempos de la ocupación alemana en la Segunda Guerra Mundial hasta los episodios más recientes como la masacre de Utøya.
Animado por el editor Erling Kagge, el periodista Stanghelle confiesa que le sorprendió que el rey Harald aceptara ser entrevistado para el libro. Tras los encuentros mantenidos con el soberano, el autor describe al rey Harald como una persona “abierta y emocionante” que ha visto y vivido mucho, desde que empezara a servir al gobierno del Estado desde 1957, cuando apenas contaba con 20 años, y que tuvo que hacer frente a la oposición de su familia al elegir como esposa a una plebeya. “Después de hablar con él, se comprende mejor lo que implica el papel del rey y no menos importante, se siente un gran respeto por el hombre. El rey es tanto una persona como un papel, y ambas cosas se entrelazan y se colocan en una especie de posición de marcha entre sí. Es completamente imposible separar al rey como rey y al rey como humano”, recalca Stanghelle.
En el libro también intervienen otras voces, como la de su hermana, la princesa Astrid, para recordar las experiencias bélicas y su regreso de Estados Unidos en 1945. “También he hablado con la Reina Sonia y el Príncipe Heredero Haakon en un par de capítulos, especialmente donde cuentan historias conmovedoras sobre cómo vivieron el 22 de julio y la época posterior”, señala el autor, quien enfatiza sobre la libertad que ha tenido al escribir el libro. “El rey no ha recibido las preguntas de antemano, ni las ha pedido. Ha sido muy abierto y paciente. Con no poca cantidad de humor, ha respondido en todos los sentidos a mis preguntas”.
La obra de Stanghelle no es el primer libro que aterriza en las librerías este año sobre la figura del rey. A mediados de agosto, el veterano presentador Christian Borch publicó Konge for sin tid [Un rey para su tiempo], en el que explora el papel de “la única monarquía elegida en el mundo” como un factor esencial en el desarrollo de la sociedad noruega de las últimas tres décadas. Sin embargo, a diferencia del título de Stanghelle, el rey Harald declinó la oferta de participar en el libro de Borch.
Ambos libros reales llegan en un año especialmente revuelto para la monarquía noruega, marcado por la muerte de Ari Behn, ex marido de la primogénita de Harald y Sonia, los problemas de salud del rey, la crisis sanitaria del coronavirus que ha llevado a la pareja real a cumplir con el confinamiento en el palacio, y las continuas polémicas de Marta Luisa y su pareja, el chamán Durek Verrett , que han acaparado la mayor parte de los titulares de prensa sobre la casa real noruega.
Precisamente, la princesa vuelve a la actualidad a raíz de una publicación en su cuenta de Instagram el pasado lunes, en la que confesaba atravesar un momento difícil en su vida. “Algunos días son mejores que otros y debo admitir que últimamente he tenido algunos días realmente malos. A veces, todo se siente demasiado y es abrumador, y tiendo a terminar en un agujero de desesperación, autocompasión, y me siento como una víctima ‘‘, escribió Marta Luisa en la red social, en la que reconocía sentirse “sin energía”.
“Literalmente, una depresión que se cuela (mi pobre novio que tiene que soportar todas mis emociones en esta montaña rusa ...). Incluso con muchas personas que me apoyan y están ahí para mí, no puedo salir de la oscuridad”, continua el post de la princesa, en el que acompaña, como contraste, una imagen de sus vacaciones en familia en Lofoten, rebosante de alegría, y a la que hace referencia también en su mensaje. “El viaje a las montañas ha mejorado mi estado de ánimo. Un amigo viene y pone todo patas arriba, y de repente vuelves a ver la belleza a tu alrededor y te das cuenta de que en realidad estás parada en la cima de una montaña y contemplas esta vista espectacular”, celebraba Marta Luisa.
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