Harald de Noruega ha sido dado de alta tras su operación de corazón

Después de tres días ingresado en un hospital de Oslo por una intervención cardiaca, el rey Harald de Noruega, de 83 años, ha sido dado de alta. Según ha comunicado la casa real del país nórdico, la operación ha sido exitosa y el soberano salía del centro el 12 de octubre, aunque pasará de baja médica lo que resta del mes.

El palacio real anunció el jueves que Harald sería intervenido apenas un día después. El motivo era el reemplazo de una válvula artificial que le habían colocado en marzo de 2005 durante una operación a corazón abierto. Estas válvulas tienen una vida útil de entre 10 y 15 años y “por lo tanto, no es inhabitual que deban ser renovadas tras un tiempo determinado”, explicó en un comunicado la casa real noruega, que también explicaba que el monarca sería intervenido con anestesia local y que, por tanto, se mantendría despierto a lo largo de la intervención, que iba a ser realizada desde la ingle.

Esta operación del rey de Noruega ha sido relativamente leve, pero requiere de una cierta recuperación que lo mantendrá unas semanas descansando. Mientras tanto, será su hijo Haakon quien se encargue de realizar las tareas que le suelen corresponder a su padre. Este relevo es algo que se realiza con normalidad en la casa real noruega y que se ha convertido en habitual durante los últimos años; de hecho, en algún momento incluso la princesa Marta Luisa realizó esas labores.

Hace un año, en una entrevista con la NTB, la agencia de noticias del país, Haakon de Noruega relató cómo asumía sus labores en los momentos de ausencia de su padre. “Hasta ahora, creo que hemos gestionado el trabajo bastante bien juntos. Lo contemplo como si fuéramos un equipo. Distribuimos el trabajo para lograr el mejor resultado posible”, afirmaba entonces el heredero. “Creo que seguiremos haciéndolo así en los años venideros”, explicaba el que en estos momentos es denominado Su Alteza Real el príncipe heredero regente.

Este es el segundo problema de salud que ha tenido Harald en las últimas semanas, y al parecer ambos iban asociados. A finales de septiembre el rey fue ingresado a causa de unos mareos, motivados a su vez por una afección respiratoria, pero no por coronavirus, como se apresuraron a aclarar desde la casa real. Al parecer, esos problemas tenían que ver con la válvula ahora sustituida. “Su Majestad el Rey se ha sometido a chequeos regulares y la evaluación que realizamos muestra que tal intervención es necesaria para mejorar la respiración del Rey”, explicaba su médico en el comunicado previo a su operación, la pasada semana.

En marzo de 2005, el monarca fue operado de un problema coronario a causa de un estrechamiento de la aorta, y en abril de ese año se le repitió la operación. Dos años antes, diciembre del año 2003, con 66 años, fue operado de un cáncer de vejiga

Tras un tiempo estable, los últimos años también han sido complicados para el soberano. En noviembre de 2017 padeció una infección que le obligó a permanecer tres días hospitalizado. Y el año pasado, en diciembre de 2019, un virus le obligó a pasar unos días fuera de juego y a que, de nuevo, Haakon ocupara su lugar. Ya en enero de este año una serie de mareos le obligaron a pasar de nuevo por el hospital.