Los amargos inicios de David Broncano en televisión: “Me fui a casa llorando”

El cómico ha desvelado que su primera vez en un plató fue a los 19 años en un concurso en el que acabó perdiendo

David Broncano, en el programa '¿Quién quiere ser millonario?'Atresmedia
Madrid -

Ha sido capaz de conquistar al público por su naturalidad ante las cámaras y los micrófonos y también por ser capaz de poner en apuros a cualquier entrevistado preguntándoles cuánto dinero tienen en el banco o cuánto sexo han practicado en el último mes, pero ese desparpajo y soltura ante las cámaras que caracteriza a David Broncano no siempre fue así. Al menos durante sus inicios pues, según ha contado el presentador de La Resistencia, sus comienzos en televisión fueron algo traumáticos.

Así lo aseguró hace ...

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Ha sido capaz de conquistar al público por su naturalidad ante las cámaras y los micrófonos y también por ser capaz de poner en apuros a cualquier entrevistado preguntándoles cuánto dinero tienen en el banco o cuánto sexo han practicado en el último mes, pero ese desparpajo y soltura ante las cámaras que caracteriza a David Broncano no siempre fue así. Al menos durante sus inicios pues, según ha contado el presentador de La Resistencia, sus comienzos en televisión fueron algo traumáticos.

Así lo aseguró hace unas semanas durante su paso por ¿Quién quiere ser millonario?, donde acudió como una de las estrellas invitadas a uno de los programas especiales con el que se celebra el 20º aniversario del concurso que en su momento encumbró a Carlos Sobera y que ahora conduce Juanra Bonet. Fue al comienzo del programa cuando Broncano contó que ya tenía experiencia en concursos televisivos, pues la primera vez que pisó un plató de televisión lo hizo precisamente como concursante. Fue en Metro a Metro, un programa de Telemadrid presentado por Javier Capitán. Entonces él tenía 19 años y aún no sabía que tiempo después se convertiría en uno de los humoristas más aclamados del país.

“Fue con 18 o 19 años y perdí. No me acuerdo qué pasó. Tengo como un vacío. Me acuerdo que iba bien, pero la cagué al final. Me ganó un yayo. Fue un trauma”, dijo en tono de humor sobre aquella experiencia. “Yo a los yayos es a lo que más quiero en el mundo, pero a nivel físico entre un chaval de 19 años y un señor de 68 en principio el chaval tiene más velocidad de mano, y dije le doy yo, pues al final le dio él primero y me fui a casa llorando, literalmente llorando”, resumió el presentador. Hace unos días el programa La Redacción, también de Telemadrid, sacó a la luz las imágenes de este joven Broncano durante su estreno en la pequeña pantalla donde le resultó inevitable ocultar sus nervios.

Esto ocurrió en 2006 y solo dos años después un monólogo en Paramount Comedy le lanzó directo al universo del humor. Este jiennense de adopción que estudió Publicidad en Madrid trabajó en una agencia hasta 2008, cuando descubrió que la comedia era su mundo. Participó en varios espacios de radio y televisión y en 2014 arrancó La vida moderna en la cadena SER junto a otros dos humoristas, Ignatius Farray y Quequé. Dos años después Andreu Buenafuente le fichó como colaborador de Late Motiv a la vez que se estrenaba en Movistar+ su primer espacio televisivo como presentador, Loco mundo, un formato de humor en el que se trataban temas peliagudos como el aborto o la eutanasia. En 2018 llegó La Resistencia y tras tres Ondas, dos premios del Festival de Televisión de Vitoria y un premio Iris de la Academia de Televisión, hoy David Broncano puede presumir de ser uno de los presentadores del momento.

La sencillez y saber reírse de sí mismo han sido claves para conseguir esa complicidad con el público. En estos años y siempre a través de sus programas, el cómico se ha dado a conocer como una persona muy competitiva, que practica tenis y alpinismo, no bebe alcohol y es un forofo del Atlético de Madrid. Ha conseguido que Manuela Carmena le firmase en directo una multa, que María Teresa Campos perrease con él, que Gerard Piqué se autoinvitase a su programa por Twitter o jugar un partido de tenis con Rafa Nadal. Esto no le ha impedido escapar del centro de atención por algunas polémicas o por su vida sentimental, tan cuestionada en los últimos años. Le han relacionado con la actriz Adriana Ugarte y con la tenista Paula Badosa, pero él, fiel a ese hermetismo autoimpuesto en lo que a su parcela más personal se refiere, prefiere seguir dando de qué hablar solo por su humor.

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