Halle Berry pierde el intento de obligar a Olivier Martinez a asistir a su terapia de crianza compartida

Una nueva demanda de Halle Berry (Cleveland, Ohio, 57 años) a Olivier Martinez (París, 58 años), en esta ocasión por la custodia de su hijo Maceo, de 10 años, demuestra que el enfrentamiento entre ambos actores aún no ha terminado. Ha pasado justo un año desde que el exmatrimonio pusiera fin en agosto de 2023 a un largo y controvertido divorcio, un proceso de separación que duró ocho años. En los documentos judiciales publicados recientemente por la web estadounidense TMZ, la ganadora de un Oscar acusaba a su exmarido de intentar retrasar las sesiones de terapia a las que acordaron acudir para solucionar sus diferencias y así ejercer en buenos términos la custodia compartida de su único hijo. La actriz pretendía que un juez lo obligara a cumplir con el cronograma establecido en su acuerdo, que incluye las sesiones de terapia y otros requisitos. Pero finalmente su petición ha sido denegada este 5 de agosto.

Estas terapias de crianza compartida fueron acordadas durante el proceso de divorcio a fin de resolver los problemas relacionados con la educación de Maceo. La actriz alegaba que su marido deseaba retrasar las sesiones para poder “tomarse el verano libre”, sin aclararlo siquiera con ella o con su terapeuta. También afirmaba que Martinez ya canceló sus sesiones en julio para viajar a Francia (país natal del intérprete), y quería saltarse las citas de este agosto porque “su hermano está de visita”. Según publica TMZ, la actriz no se ha creído sus excusas sobre viajes y visitas, ya que “las sesiones se realizan a través de Zoom y se pueden hacer desde cualquier lugar”. En su nueva petición al juez, también agregaba que había una fecha límite del 14 de junio para finalizar sus seis sesiones conjuntas, y que aún no las han culminado. El equipo legal de Berry argumentaba que la ausencia de Martinez está “frustrando todo el proceso terapéutico” y obstaculizando el “desarrollo y los mejores intereses” de su hijo.

Por su parte, el equipo de Martinez respondió a la solicitud argumentando que ella está “constantemente presionándolo [a él] y obligándolo a la sumisión, usando su riqueza y los profesionales legales a su disposición”, según ha publicado el medio estadounidense Page Six. Además, su abogado agregó que Maceo no muestra ningún daño inmediato y que la intérprete de X-Men decidió presentar la solicitud cuando “sabía” que Martinez viajaría. Finalmente, el juez ha rechazado la petición de estrella de Catwoman, citando una “falta de circunstancias apremiantes”.

En el momento de la separación, los actores acordaron compartir la toma de decisiones en lo que respecta a la educación y la salud de Maceo. Todos los detalles estaban estrictamente pactados: horarios, lugares de recogida de la escuela y quien se ocupa de él entre semana y los festivos. Desde que el juez dictó sentencia hace un año, la actriz cuida de su hijo de lunes a miércoles y el actor de miércoles a viernes. Ambos se alternan los fines de semana. En cuanto a las vacaciones, estas están ya divididas: Berry se hace cargo de Maceo en las vacaciones de primavera y el Día de Acción de Gracias de los años pares, mientras que Martinez lo hace en los años impares. Además, Berry es la encargada de pagar la matrícula escolar de su hijo en el colegio privado Lycée Français de Los Ángeles (California) y el 100% de las actividades extraescolares en las que participe.

El pequeño Maceo tenía un año cuando empezó el proceso de divorcio de sus padres. Teniendo en cuenta la complejidad para llegar a un acuerdo y la prolongación de la disputa judicial, sus progenitores acordaron que el niño recibiese la ayuda de especialistas para poder gestionar la situación familiar y los problemas derivados de estos años de rivalidades. También participa en las sesiones de terapia familiar, donde acuden Berry, Martinez y Nahla Aubry, la primogénita de la actriz, nacida de su relación con Gabriel Aubry. Aun así, el juez denegó la participación a Van Hunt, actual pareja de Berry.

En el acuerdo de divorcio, Martinez salió claramente beneficiado. En él, se determinó que la intérprete de Monster’s Ball (2001) debe pagarle 8.000 dólares (unos 7.300 euros, al cambio actual) al mes para la manutención de su hijo. Además de pagar el 4,3% de cualquier ingreso que reciba por encima de los dos millones de dólares.