La empresaria que hay en Sarah Jessica Parker: vinos, cócteles y un sello editorial, pero una marca de zapatos que llega a su fin
La actriz es también una mujer de negocios que ha sabido aprovechar la fama de su icónico personaje de ‘Sexo en Nueva York’ para lanzar proyectos al más puro estilo Carrie Bradshaw. A pesar de que su firma de calzado cierra tras una década, el resto resisten
“Tantos zapatos y solo dos pies”, lamenta Carrie Bradshaw, interpretada por Sarah Jessica Parker (Ohio, Estados Unidos, 59 años), en uno de los capítulos de Sexo en Nueva York. Su amor/obsesión por el calzado es una constante en la trama. “¿Me estás diciendo que gasté 40.000 dólares en zapatos y no tengo un lugar donde vivir? Literalmente tendré que vivir en mis zapatos…“, se dice en otro episodio, por no hablar de que son unos zapatos, concretamente unos lujosos Manolo Blahnik azules, lo que Big le ofrece para declararse en vez del clásico anillo de compromiso. Algo o mucho de Bradshaw se contagió Parker cuando en 2014 decidió lanzar su propia marca homónima de calzado con George Malkemus, el entonces director de Manolo Blahnik en Estados Unidos ―fallecido en 2021―, como socio. “De alguna manera tonta, creo que es lo que la gente esperaba de mí por Carrie Bradshaw”, declaró la actriz hace una década, cuando anunció el nacimiento de la marca. El pasado 16 de agosto, en cambio, le tocó anunciar su final. “Después de 10 años llenos de colorido, SJP by Sarah Jessica Parker ha tomado la difícil decisión de cerrar sus puertas este otoño”, decía el comunicado compartido a los medios.
La última tienda que quedaba de la marca en Estados Unidos, situada en el número 385 de la calle Bleecker de Nueva York, cerró sus puertas este 25 de agosto. Mientras tanto, todavía tiene sucursales físicas en Dubái, Qatar y los Emiratos Árabes Unidos y las compras online seguirán disponibles hasta una fecha aún por determinar. “El equipo de SJP Collection expresa su enorme gratitud a todos sus fieles clientes y seguidores, así como a todos aquellos con los que han trabajado”, agradecía la compañía en su despedida. Desde este anuncio, la marca ha reducido el precio de sus zapatos, que antes se vendían a más de 600 euros de media, en un 25%.
Parker es conocida por usar sus propios zapatos en las alfombras rojas. En octubre de 2023, por ejemplo, ella y el que es su marido desde 1997, Matthew Broderick, asistieron a un evento en el New York City Ballet y la actriz lució un vestido de Carolina Herrera con un par de sandalias de su colección, pensadas para llevarlas desparejadas ―una era negra y la otra rosa―. También ha lucido calzado de su marca en la ficción: en junio, por ejemplo, rodó una escena de And Just Like That... —la secuela de Sexo en Nueva York— en las calles del Soho neoyorquino con un par de tacones desiguales de SJP de lunares blancos y negros. De hecho, la calle Bleecker está cerca del apartamento de Carrie Bradshaw, algo que facilitaba que la tienda se convirtiera en una parada turística para los fans que llevaban a cabo su recorrido por los lugares del rodaje de la serie en Manhattan. Sin embargo, eso parece que no ha sido suficiente para la supervivencia de la firma, aunque de momento no se han compartido los motivos del cierre.
“Como bien saben los fans de la serie original, la moda y específicamente el calzado, siempre han sido una parte muy importante de la historia, especialmente para mi personaje”, afirmó Parker en una entrevista con FootwearNews en 2022. “Al conocer a Carrie tan íntimamente, me sentí privilegiada de estar en una posición en la que podía trabajar con George [Malkemus] para diseñar zapatos desde cero que fueran fieles tanto a su apasionado amor por el calzado como a su evolución de carácter”, aclaró. Este sueño empresarial ahora se ha truncado. Sin embargo, Parker ha diversificado su faceta como empresaria con otras empresas, incluidas sus marcas de belleza, vino, cócteles y literatura, que siguen funcionando.
Puede que los zapatos sean el negocio que más le pega a la actriz, pero su faceta de empresaria tiene muchas otras vertientes. No hay más que fijarse en la biografía de su perfil de Instagram, en el que acumula casi 10 millones de seguidores, que no es más que una sucesión de perfiles de todos sus proyectos. Uno de ellos es el de Invivo X, SJP, la marca de vinos que lanzó en 2019. “El descaro de Nueva York combinado con las mejores regiones vinícolas del mundo”, se anuncia en redes sociales, uniéndose así a la creciente moda de famosos que crean su propia marca de bebidas alcohólicas. De hecho, ella también se ha aliado con la marca de cócteles y licores estadounidense Thomas Ashbourne para sacar una línea de Cosmopolitan ―el cóctel favorito de Carrie en la serie― llamada The Perfect Cosmo by SJP, que servía gratis a los clientes de su zapatería de Nueva York, donde ella misma acudía a veces a ejercer como vendedora.
Otro de sus negocios más desconocido es el del sello editorial SJP Lit, centrado en “historias amplias, profundas, que invitan a la reflexión y al debate, que incluyen voces internacionales y subrepresentadas”, según se presenta en su página web. El sello nació en 2016, dentro de la editorial independiente Zando. “Siempre me ha gustado leer por la misma razón que me encanta actuar, por la creencia de que las historias de otras personas me resultan más interesantes que la mía propia”, explicaba entonces a The New York Times.
La actriz también ha lanzado productos con marcas de belleza, cosmética, perfumes, moda... En 2018, por ejemplo, se asoció con la tienda online Gilt para sacar al mercado su propia colección nupcial “para novias modernas no tradicionales”, como lo fue su personaje en Sexo en Nueva York. En todos los negocios de Parker hay mucho de Bradshaw, al menos en lo que a promoción y marketing se refiere.
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