El Ejército israelí mata a ocho palestinos durante una incursión en Gaza

Testigos del ataque han visto cómo un gran número de tanques, blindados y excavadoras se han introducido en el barrio palestino, en una incursión que fue precedida por un intenso bombardeo. Según sus relatos, las excavadoras arrasaron varios terrenos de cultivo palestinos, poco antes de que comenzaran los enfrentamientos entre soldados israelíes y milicianos. El resultado: nueve palestinos muertos, entre ellos un menor de once años, y al menos una decena de heridos.

Así lo han confirmado fuentes médicas palestinas del hospital Al-Shifa de Gaza, que han denunciado que los equipos médicos y ambulancias apenas pudieron socorrer a los heridos, ya que las tropas israelíes no cesaron sus bombardeos contra las casas de Zeitún.

Entretanto, el representante de la Yihad Islámica en Gaza, Abdula al-Shami, ha informado de que que cinco de los muertos durante la operación eran miembros del brazo armado de su movimiento. "Lo que ha sucedido en el barrio Zeitún y la muerte de estos palestinos sólo incrementará la respuesta de la resistencia palestina contra la ocupación israelí", ha desafiado al-Shami. En términos menos agresivos se ha pronunciado la Autoridad Palestina, que ha considerado el ataque "un sabotaje a los esfuerzos palestinos y de la comunidad internacional, que intentan resolver la crisis por medios diplomáticos". Para el asesor del veterano presidente palestino Yasir Arafat no hay duda de que la operación israelí tiene el objeto de boicotear los esfuerzos de Egipto y EE UU y ha llamado a la ONU para que provea de protección internacional a los palestinos.

"Un nuevo crimen de Israel"

La operación israelí ha tenido una inmediata repercusión en el encuentro que han mantenido en Ramala el enviado estadounidense, John Wolf, y el primer ministro palestino Ahmed Qurei (más conocido como Abú Alá). En presencia de Wolf, el primer ministro palestino ha descrito la operación en Gaza como "un nuevo crimen de Israel cometido con la peor de las intenciones" y ha pedido la ayuda de Washington para frenar lo que ha denominado una "agresión continuada contra nuestra gente".

Después de meses sin contactos, Washington ha vuelto a activar la maquinaria diplomática para presionar a Qurei y al israelí Ariel Sharon para que mantengan un encuentro que sirva para desenterrar la Hoja de Ruta, el paz para Oriente Próximo que prevé la creación de un Estado palestino. Wolf ha aprovechado la visita a Ramala para volver a pedir a las autoridades palestinas que frenen la actuación de los terroristas.

Desde que comenzó la segunda Intifada, en septiembre de 2000, han muerto 3.716 personas en acciones violentas, 2.784 palestinos y 865 israelíes.