Turquía recibe a Erdogan como a un héroe tras lograr el primer paso para la adhesión a la UE

Los turcos se han despertado hoy con resaca europea y comienzan a calibrar con más frialdad que entusiasmo el acuerdo del Gobierno con la Unión Europea. Pese a la frialdad en las calles, la prensa dedica elogios al primer ministro, Tayip Erdogan, cuyo liderazgo se ha visto enormemente reforzado. Sus simpatizantes sí han expresado el júbilo de un acuerdo histórico. Miles de personas recibieron anoche a Erdogan, al que califican de "conquistador de la Unión Europea".

Varios miles de simpatizantes del Partido de la Justicia y el Desarrollo (PJD), en el poder en Turquía, han dado la bienvenida esta madrugada al primer ministro, que regresaba de la cumbre europea en Bruselas.

"Bienvenido primer ministro, conquistador de la Unión Europea", "nueva estrella de la Unión Europea" y "no UE sin Turquía" eran algunas de las consignas que podían leerse en las pancartas mostradas por los manifestantes.

"Ayer en Bruselas Turquía concretó 41 años de esfuerzos", afirmó a su llegada Erdogan, en alusión al acuerdo alcanzado para comenzar a negociar la adhesión de Turquía a la UE el 3 de octubre de 2005, aunque sin garantías de éxito. "Vamos a aprovechar el periodo hasta el tres de octubre" para continuar con las reformas exigidas por la UE, añadió el primer ministro.

Se espera que de nuevo hoy miles de personas arropen a Erdogan durante un acto de celebración que tendrá lugar en la plaza Kizilay, en Ankara. Pero a pesar de la euforia que se respira en el entorno del partido gobernante, son muchos los que este sábado se han levantado un poco más euro-escépticos. "¿Por qué voy a ir hasta allí? ¿Cuál es el éxito? ¿De verdad nos hemos sumado a la UE?, se preguntaba hoy Cemal Yildirim, empleado en una inmobiliaria del barrio de Bahcelievler, en Ankara

Y es que el entusiasmo desatado en la medios de comunicación y en las instituciones, políticas y económicas -la Bolsa de Estambul supero el viernes su máximo histórico- contrasta con la apatía y la y la incredulidad de la población. La expectación que reinó durante la larga jornada negociadora en Bruselas no devino en un explosión de júbilo popular ni en celebraciones espontáneas.

Elogios en la prensa

Los principales diarios del país abrían hoy, sábado, su edición con la palabra que con más énfasis pronunció 24 horas antes el primer ministro turco, Recep Tayyib Erdogan: "Besardik" (triunfamos). El director del diario Milliyet considera el día de ayer como un paso fundamental "en la armonización de las civilizaciones y en la creación de una Europa poderosa". En una línea muy similar se expresa el rotativo islamista progubernamental Yeni Safak: "se ha abierto una de las páginas más importantes en los últimos cinco siglos de historia mundial. La revolución que ha comenzado no es solo una revolución para Turquía, si no para toda Europa".

Otros analistas se decantan hoy por resaltar la figura de Erdogan, al que califican de "héroe", y reseñan la paradoja de que un hombre que en su juventud se defendió el islamismo intransigente frente a los "valores occidentales" haya sido el político que ha conducido a Turquía a la "cristiana" UE.