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La investidura de Biden acaba con reguetón

En un programa plagado de artistas, los expresidentes Barack Obama, George W. Bush y Bill Clinton aparecen en un vídeo para reafirmar la transición democrática

Antonia Laborde
Fuegos artificiales lanzados desde el National Mall para festejar la investidura de Joe Biden.
Fuegos artificiales lanzados desde el National Mall para festejar la investidura de Joe Biden.JIM URQUHART (Reuters)

La toma de posesión del presidente Joe Biden acabó este miércoles donde se han escrito grandes capítulos de la historia estadounidense: a los pies del monumento de Abraham Lincoln. Celebrating America, el programa de televisión para festejar la investidura, contó con la participación de pesos pesados de la música americana de costa a costa, desde el rock hasta el reguetón. El mandatario sostuvo en su último acto público de este miércoles que nunca se ha sentido tan optimista sobre el futuro de Estados Unidos como hoy. “¿Estaremos a la altura del momento como lo hicieron nuestros antepasados?”, preguntó el demócrata. “Creo que debemos y creo que lo haremos”.

Apenas unos minutos después de que Luis Fonsi invitara a bailar Despacito desde un salón, el nuevo escenario de los artistas en pandemia, se proyectó un vídeo con los expresidentes Barack Obama, George W. Bush y Bill Clinton para desearle suerte al nuevo presidente. “El hecho de que los tres estemos aquí parados hablando de una transferencia pacífica del poder habla de la integridad institucional de nuestro país”, apuntó Bush, republicano. Un potente mensaje en una sociedad polarizada que hace tres semanas fue testigo del asalto al Capitolio perpetrado por simpatizantes del expresidente Donald Trump.

Bruce Springsteen cantó sobre la tierra de las esperanzas y los sueños, Bon Jovi de que el sol se estaba asomando y Justin Timberlake de que hay luz al final del túnel. Melodías de esperanza en el arranque de la era Biden, un presidente que promete sanar el país. “Un gran experimento requiere de gran determinación”, afirmó la vicepresidenta Kamala Harris desde el monumento a Lincoln. Recordó el mensaje del activista por los derechos civiles Martin Luther King que en esa misma escalinata pronunció su icónico discurso sobre una sociedad más justa. Harris hizo énfasis en el objetivo de conseguir la igualdad racial y económica con que soñaba King.

Esta jornada de investidura rompe con tradiciones de más de dos siglos. La pandemia del coronavirus y las amenazas de posibles ataques forzó a las autoridades a que la invitación a los estadounidenses fuera no viajar a Washington. No hubo casi público en la toma de posesión ni un desfile tradicional por la Avenida Pensilvania -Biden y Harris llegaron caminando a la Casa Blanca, saludando a los periodistas que habían conseguido acreditación-. Pero aunque la noche no cerrara con el baile inaugural, como es costumbre desde 1809, sí se agenciaron que las estrellas de la escena musical aparecieran. Y la noche acabó con fuegos artificiales iluminando el monumento de Washington en el corazón del National Mall.

Sinatra cantó en la noche inaugural de John G. Kennedy y Arthea Franklin y Beyonce en las de Barack Obama, entre otros grandes artistas. El comité de inauguración de Biden y Harris organizaron que Bruce Springsteen, Foo Fighters, Jon Bon Jovi, Demi Lovato y Justin Timberlake figuraran como los platos fuertes de la primera velada de la Administración Biden y Harris. Los estadounidenses, llamados a quedarse en casa para prevenir la propagación del virus que ya ha dejado más de 400.000 víctimas mortales en EE UU, pudieron seguir el programa especial a través de ABC, CBS, CNN, NBC y MSNBC, y otras plataformas online.

Tom Hanks, uno de las celebridades más queridas en Estados Unidos fue el encargado de dirigir el programa apoyado por Eva Longoria. La elección de Hanks tiene un significado especial este año azotado por la pandemia porque es el primer actor de peso mundial en contagiarse con la covid-19, el 11 de marzo. Otra participación estelar fue la de Brayden Harrington, el niño tartamudo que acompañó a Biden durante varios episodios de su campaña después de que el demócrata se sintiera identificado con él por haber padecido la misma dificultad para hablar con fluidez cuando era pequeño. A él y a todos los telespectadores, esta noche el presidente les dijo: “Unidos podemos hacer cosas extraordinarias”.

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Sobre la firma

Antonia Laborde
Periodista en Chile desde 2022, antes estuvo cuatro años como corresponsal en la oficina de Washington. Ha trabajado en Telemundo (España), en el periódico económico Pulso (Chile) y en el medio online El Definido (Chile). Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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