El Conacyt promete el pago de becas a cientos de posdoctorantes tras cinco días de protestas
El máximo órgano de la ciencia en México asegura que los adeudos a los investigadores mexicanos serán cubiertos a partir de la primera semana de febrero
Una semana. Treinta días. Tres meses. La incertidumbre crece cada día entre los más de 170 investigadores que siguen sin recibir el estímulo del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) que mensualmente perciben como parte del programa de Estancias Posdoctorales en México. Los primeros afectados infirieron en que era un fallo administrativo, sin embargo, la preocupación escaló con el transcurrir de los días y la suma de agraviados. Finalmente, las alarmas se encendieron en decenas de beneficiarios que no vieron cubierto el pago de este apoyo el pasado 25 de enero, fecha máxima para que el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) depositara el primer estímulo económico del año.
Ante el temor a represalias por parte del máximo órgano de la ciencia en México, los afectados optaron por resguardarse en el anonimato, unificando la voz a través de un colectivo que comenzó a difundir en redes sociales y medios de comunicación la incertidumbre y el malestar ante la falta de explicaciones directas por parte de las autoridades del Conacyt y del SNI desde la semana pasada.
Una de las investigadoras afectadas, adscritas al programa posdoctoral desde octubre de 2020, explica que desde finales del año pasado varios colegas empezaron a externar irregularidades en el pago de este estímulo económico, incluso varios de los afectados aseguraron que recibieron correos electrónicos de de las autoridades educativas en las que se les explicaba que no se les pagaría este apoyo extra porque incumplían con el reglamento del Sistema Nacional de Investigadores. “El problema fue que nos han hecho saber que ya no nos iban a pagar porque incumplimos un artículo del reglamento que existe desde hace muchos años. Conacyt dice que como la beca no las da Conacyt nosotros no estamos estrictamente adscritos a la institución pública en la que laboramos, pero históricamente sí habían considerado nuestra adscripción, aunque el contrato fuese ante Conacyt. Es el mismo artículo, pero le están dando una nueva reinterpretación a partir de este año”, señala la doctora con un proyecto en biología marina.
En el centro de la discusión se situó el artículo 62 del Reglamento del Sistema Nacional de Investigadores donde se establecen los requisitos que los investigadores deben cumplir para recibir el apoyo económico. En el primer apartado, el artículo refiere que los candidatos a recibir el estímulo deben ser personal activo, vigente y remunerado en alguna institución pública de educación superior o centro de investigación del sector público en México. Los rangos de apoyo mensuales, en el caso de los posdoctorantes Conacyt, van desde los 8.700 pesos a los 17.500 pesos.
“Una de las cosas que más tristeza genera es que hablen de nosotros como si fuéramos unos privilegiados o unos aprovechados. Es un trabajo muy exigente, con muchos años de formación, mucha inestabilidad y que está sometido a evaluaciones constantes. Y muchos sentimos un compromiso social muy fuerte. Eso es quizás lo más triste, el ver cómo se generaliza o se sacan de contexto algunas actividades para presentarnos como privilegiados”, zanja otra de la doctora en humanidades afectada.
Tras una semana de protestas, el eco de sus voces ha obligado al Conacyt a responder. El organismo federal ha asegurado que los apoyos económicos vigentes para miembros del SNI no serán cancelados o suspendidos. “Quienes no recibieron el apoyo económico correspondiente a enero verán regularizado su pago, de forma retroactiva, a partir de la primera semana del mes de febrero. Cabe señalar que, generalmente, los estímulos correspondientes al primer bimestre del año se cubren en febrero debido al proceso de revisión de adscripciones”, afirmó por escrito el órgano federal dirigido por la doctora María Elena Álvarez-Buylla.
Al aviso del Conacyt se sumó una breve reunión este lunes entre los investigadores y la directora del Sistema Nacional de Investigadores, Liza Aceves, quien garantizó que todos los adeudos, incluso lo que llevan meses en el tintero, serán subsanados en las próximas semanas. Sin embargo, los afectados han recibido con escepticismo esta noticia en medio de los recortes para la ciencia que han marcado desde el inicio este Gobierno de López Obrador y que van desde la extinción de fideicomisos hasta el anteproyecto para suspender las becas a estudiantes en caso de maternidad o paternidad.
Los afectados hacen hincapié que de concretarse la reducción de este apoyo adicional tendrán que modificar los proyectos de investigación que tenían en curso. “Perder ese estímulo significa replantear los experimentos, en cuanto al dinero que sé que cuento para ir a recolectar muestras, acudir a congresos, eso te revuelve todo”, concluye uno de los investigadores que hasta el momento permanece en vilo, a la espera de que en las próximas la promesa de pago hecha por el Conacyt se convierta en realidad.
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