Lo que se sabe del atentado a Trump: qué pasó, quiénes son las víctimas y cómo va la investigación
Dos personas murieron, entre ellas el atacante, durante el intento de asesinato al expresidente de Estados Unidos
El ataque a tiros contra el expresidente Donald Trump de este sábado resucitó el fantasma de la violencia política en Estados Unidos. Es imposible no pensar en el asesinato de John F. Kennedy (1963) en un país que ha visto morir en ataques similares a cuatro de sus presidentes. En el mitin de Pensilvania fueron segundos de no comprender qué estaba pasando: se escucharon tiros, Trump se tocó una oreja y posteriormente se agachó; en minutos el servicio secreto ya lo había evacuado. Dos personas murieron y otras dos resultaron gravemente heridas. Esta es una recapitulación de lo que se sabe del atentado hasta el momento.
¿Qué sucedió?
El atentado ocurrió la tarde del sábado 13 de julio mientras Donald Trump hablaba en un mítin en Butler (Pensilvania). Su discurso llevaba apenas seis minutos de haber iniciado cuando se escucharon varias detonaciones. El presidente se tomó su ojera derecha, ya cubierta de sangre, y se agachó. De acuerdo con el análisis de varios videos recabados por el diario estadounidense The New York Times, hay dos secuencias de disparos: primero tres tiros y cinco más cuando Trump ya se encontraba en el piso. Bastaron segundos para que el Servicio Secreto rodeara al exmandatario para protegerlo y luego evacuarlo del lugar.
El estado de salud de Donald Trump
Tras el atentado, Donald Trump fue trasladado a un hospital y, posteriormente, el Servicio Secreto informó que se encontraba “a salvo”. Horas después del ataque, Trump escribió en Truth, su red social: “Recibí un disparo de bala que me atravesó la parte superior de la oreja derecha (...) Supe inmediatamente que algo iba mal porque oí un zumbido, disparos, e inmediatamente sentí la bala rasgando la piel. Sangraba mucho y entonces me di cuenta de lo que estaba pasando”. El expresidente también agradeció al Servicio Secreto y a las demás fuerzas del orden “su rápida respuesta al tiroteo” y dio el pésame a las familias de las víctimas. “Es increíble que un acto así pueda suceder en nuestro país”, añadió. A pesar de este hecho, su campaña confirmó que asistirá a la Convención Republicana que inicia este lunes en Milwaukee.
El atacante
Las autoridades investigan los motivos del ataque llevado a cabo, según el FBI, por Thomas Matthew Crooks, de 20 años, residente de Bethel Park, una localidad situada a unos 85 kilómetros al sur del lugar del mitin, y que fue abatido en el lugar del tiroteo. Aunque estaba registrado como votante republicano, donó 15 dólares al Progressive Turnout Project, un grupo liberal de participación electoral, el 20 de enero de 2021, día de la toma de posesión de Joe Biden. Las autoridades investigan los fallos de seguridad que permitieron que un tirador se apostase en un tejado cercano con un fusil semiautomático. Un testigo aseguró que había advertido a la policía de la presencia del tirador desde hacía minutos sin que interviniese. Los agentes encontraron dos artefactos explosivos en el coche del tirador y un tercero en su casa. El fusil semiautomático que apareció junto a su cadáver fue comprado por su padre. El acto es investigado como un “intento de asesinato”.
La investigación
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció este domingo una investigación independiente para determinar qué ocurrió durante el atentado contra Donald Trump. El mandatario ha instado también a la ciudadanía a no sacar conclusiones apresuradas sobre lo ocurrido y dejar trabajar al FBI. “Un intento de asesinato es contrario a todo lo que defendemos como nación”, ha declarado en la Sala Roosevelt de la Casa Blanca. “La unidad es el objetivo más difícil de alcanzar, pero nada es más importante ahora”.
Las víctimas
La persona que murió durante el ataque ha sido identificada como Corey Comperatore, un jefe de bomberos, casado y padre de dos hijas que acababa de cumplir 50 años y que acudió al mitin para escuchar al expresidente, según ha confirmado el gobernador del Estado, Josh Shapiro. “Murió como un héroe, se lanzó a proteger a su familia”, ha contado Shapiro. La Policía de Pensilvania ha declarado a Reuters que las dos personas heridas en el atentado contra Trump se encuentran estables en el hospital. David Dutch (57 años), de New Kensington, Pensilvania, y James Copenhaver, (74 años), de Moon Township, Pensilvania, fueron ingresados el sábado en estado crítico, pero evolucionan favorablemente.
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