La defensa de Pablo Ibar se plantea pedir de nuevo un juicio rápido

El tiempo se sigue acumulando como una losa sobre Pablo Ibar. Tras la decisión de ayer del juez de retrasar hasta el 6 de febrero el inicio de la selección del jurado previsto para este miércoles, los abogados del preso, acusado de un triple homicido en Florida en 1994, se plantean seguir batallando por acelerar al máximo el proceso. La semana pasada hicieron una petición de juicio rápido que el juez consideró inválida y ahora, según afirmó hoy a EL PAÍS Benjamin Waxman, uno de sus defensores, barajan la opción de solicitarlo de nuevo.

Ibar fue condenado a muerte en el año 2000 y estuvo en el corredor de la muerte hasta febrero de 2016, cuando el Tribunal Supremo de Florida revocó la sentencia por falta de pruebas. "Desde entonces Pablo es presunto inocente y tiene derecho a un juicio, y sin embargo en pocos meses se van a cumplir tres años preso sin que lo juzguen. No pueden tenerlo otro año así", dice Waxman. El abogado sostiene que la negativa del juez al juicio rápido no tiene base. Si vuelven a pedirlo y se acepta, el juicio tendría que empezar en un máximo de 50 días desde la solicitud.

Cándido Ibar, padre del preso, lamentaba esta mañana por teléfono la demora del inicio del juicio: "Ahora que parecía que estaba todo a punto, salen con esto. Queremos terminar de una vez y sacarlo de la cárcel. Lleva 24 años dentro. Hay que ponerse en su lugar". Ibar, que sueña con el día en que pueda ver salir a su hijo de prisión y llevarlo a conocer el País Vasco, su tierra paterna, reprocha a la fiscalía su supuesta estrategia de dilatar el proceso para rearmar su estrategia.

El juez Dennis Bailey retrasó el comienzo del juicio a petición de la fiscalía, que pidió más tiempo para tomar declaración previa a dos nuevos testigos presentados por la defensa de Ibar, peritos especializados en identificación de material genético. Meses después de que se anulase en 2016 la pena de muerte, la fiscalía dijo que se habían hallado restos de ADN que coincidían parcialmente con el de Ibar en una camiseta que llevaba el autor del triple asesinato del que se le acusa y que fue hallada en la escena del crimen. Desde 1994 se habían hecho otras cuatro pruebas genéticas que habían dado negativo. La fiscalía ha anunciado que en el juicio volverá a pedir la pena capital.

La principal prueba que sostuvo la condena a muerte del año 200 fue un vídeo de muy baja calidad en el que aparece una persona parecida a Ibar, así como un testimonio de un hombre que dijo haber visto al español por el retrovisor de su coche en el lugar de los hechos. El Supremo consideró que ninguna de estas pruebas era sólida y revocó la sentencia que tuvo a Ibar 16 años en el corredor.

Ibar, de 46 años y nacido en EE UU de padre español, está acusado de los asesinatos del dueño de un club nocturno y dos modelos durante un robo en el domicilio del primero en Miramar, al norte de Miami. El preso siempre ha mantenido su inocencia. Actualmente está encarcelado en una cárcel común del condado de Broward (Florida) en un módulo de alta seguridad.