La dirección de Podemos evita pedir a Errejón que deje el escaño
El diputado asegura que si los responsables del partido se lo solicitan dejará su asiento en el Congreso
La guerra en Podemos ha llegado a un punto de bloqueo. Íñigo Errejón mantiene que es el candidato del partido en las próximas elecciones a la Comunidad de Madrid y, por tanto, no va abandonar su escaño en el Congreso. Aunque desde el sábado hace una precisión: dejará su asiento si desde la dirección de Podemos se lo piden. Los responsables de la formación evitan, de momento, hacerlo, al menos formalmente. “No se puede echar a alguien que se ha ido”, dice Irene Montero.
“No voy a agarrarme ni un minuto al escaño”, dijo la noche del sábado en una entrevista en La Sexta. “Los puestos son temporales, las ideas no. No las voy a cambiar por un escaño, las tengo en más estima”.
Con los puentes de diálogo dinamitados, Unidos Podemos comienza una semana crucial. El Gobierno tratará de sacar adelante un paquete de reales decretos que determinarán su pervivencia en La Moncloa y el futuro de los Presupuestos acordados con Unidos Podemos. El voto de Errejón es uno de los 67 que su grupo parlamentario necesita para definir su posición frente a las propuestas que el Ejecutivo pretende aprobar. “Iré a votar”, dice Errejón aún en condición de diputado.
La dirección de Podemos considera que la pelota está en el lado de Errejón, que debe aclarar ya “el motivo para seguir en el escaño de Unidos Podemos si ha montado otro partido para presentarse a las elecciones”. Pablo Echenique, secretario de organización, ha sido hasta ahora el más contundente. “Yo dejaría el escaño, pero de algo tiene que vivir hasta mayo”. En un sentido parecido se pronunció Montero: “Una persona que anuncia que se va a presentar con otra formación a las elecciones se está yendo, y a partir de ahí, consecuentemente, si fuese él, dimitiría, pero se lo tenéis que preguntar a él”.
Desde el entorno de Errejón aseguran que si finalmente se produjera esa petición, dejaría su acta de diputado y se dedicaría a la campaña electoral. En ningún caso, dicen, pasaría al grupo mixto.
Ambos lados llevan sin hablar desde el pasado jueves por la mañana, cuando Errejón anunció que se presentará a los comicios del próximo mayo en alianza con Manuela Carmena con la plataforma Más Madrid de la regidora. Montero, líder interina durante el permiso de paternidad de Iglesias, respondió a las palabras de Errejón a través de Twitter con un mensaje para intentar redirigir la atención que se cierne sobre su partido desde el pasado jueves. “¿Cuántas veces desde hace cinco años nos han dicho que Podemos se hunde? Y mientras, nosotros conseguimos echar a Rajoy o un SMI [salario mínimo interprofesional] de 900 euros. Nos falta camino para cumplir todos los objetivos, pero algunos pasos importantes damos”, escribió.
Los responsables de Podemos tratan de centrar la conversación en el acuerdo de Presupuestos Generales que alcanzó el pasado octubre con el Gobierno de Pedro Sánchez. “Es una situación bochornosa”, califican sobre el conflicto que atraviesa su partido. “Es un error que ya hemos cometido demasiadas veces”, dicen respecto a tener que volver a hablar sobre cuestiones internas.
Errejón, en una precampaña adelantada, trata de hacer lo mismo. Centra su defensa en los logros de su nueva socia de plataforma. “¿Lo que es bueno para la ciudad de Madrid no es bueno para la Comunidad?, ¿la fórmula que ha sido buena para concurrir con muchos y ganar la alcaldía no puede ser buena para la Comunidad?”. Son dos de las cuestiones que repite el todavía diputado de Unidos Podemos para poner de manifiesto que su partido mantiene su compromiso de formar parte de la lista de Carmena en la alcaldía, mientras que inicia la búsqueda de un candidato propio para la región.
Sin candidato
Ramón Espinar, secretario general de Podemos Madrid, sigue sin concretar cómo será el proceso para encontrar al aspirante. “Espero que podamos pasar página y mirar al futuro”, se limitó a decir el pasado sábado antes de la reunión del comité de campaña de su partido.
La dirección estatal y regional de Podemos sigue esperando a que sus diputados en la Asamblea de Madrid decidan si siguen a Errejón o permanecen en el partido. Los fieles al candidato como Clara Serra, su número dos, Tania Sánchez o Eduardo Rubiño muestran su apoyo a la alianza con Carmena públicamente, pero no dan una respuesta definitiva sobre su futuro. En este lado se sitúan los también fundadores Carolina Bescansa, apartada de la toma de decisiones, y Luis Alegre, ya fuera del partido.
Errejón confirma este apoyo y suma el de “compañeros que no pueden decirlo públicamente”, en una referencia velada a miembros de Podemos cercanos a la dirección de Iglesias.
La otra idea en la que Errejón apuntala su defensa es el respaldo que recibió de los inscritos en 2018, cuando ganó las primarias de Podemos para ser candidato. “20.000 militantes me eligieron para ganar la Comunidad de Madrid”, argumenta desde hace días. “Y el mejor modelo para conseguir ese objetivo es el de Manuela Carmena”.
Sube el tono en la guerra interna
Desde el pasado jueves, cuando Errejón anunció que se presentará a las elecciones autonómicas con Más Madrid,la plataforma de Manuela Carmena, los miembros más fieles a la dirección de Podemos, el que por el momento es su partido, elevan el tono de sus recriminaciones a medida que pasan las horas.
“No sé por qué Errejón, diputado de Podemos, ha organizado una plataforma al margen de Podemos, sin hablar con sus bases y órganos y no ha entregado el escaño. Entiendo que le sobre Podemos, pero no acepto nada que parezca transfuguismo”, escribió en Twitter Juan Carlos Monedero, fundador de la formación. “A mí no me sale decirle eso a gente con la que llevo tanto tiempo trabajando, no contestaría, ese no es mi estilo”, trató de zanjar Errejón.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.