Ácido salicílico hiperlocalizado: por qué la loción de Mario Badescu es imbatible contra el acné desde los años sesenta

Cuando el río suena, agua lleva. Y si un producto pasa, en escasos tres años, de tener 0 comentarios en Amazon a atesorar casi 18.000 valoraciones positivas, es que algo está pasando. Más si se trata de un cosmético, que no acostumbran a ser los más buscados en dicha plataforma. Es lo que ha ocurrido con la loción secante de Mario Badescu, que llegó a España a finales de 2018 (Douglas la lanzó en exclusiva en el mes de noviembre) pero que, si has prestado un poco de atención, ya habrás visto por un sinfín de tiendas y redes sociales. No en vano fue lanzada al mercado americano nada más y nada menos que en 1967 y se ha mantenido durante más de cinco décadas como best-seller de la marca.

La historia de su creación bien podría ser convertida en una ficción de Netflix como lo fuera el año pasado la de los productos capilares de Madame CJ Walker: «Mario Badescu fundó su marca homónima en un apartamento de dos habitaciones en el East Side de Manhattan. Era químico y esteticista y su negocio comenzó como un salón de belleza conocido por sus exclusivos tratamientos faciales. Su línea de productos personalizados se convirtió en un recurso fiable para sus clientes, muchos modelos, actores y vecinos de Nueva York», cuentan desde la firma.

Y quizá hayan sido, precisamente, esas genuinas formulaciones y un packaging que, a todas luces, mantiene esa esencia retro tan solicitada, las grandes bazas que hayan llevado a la firma hasta las estanterías de Walmart, Nordstrom, Anthropologie o Urban Outfitters. A este lado del Atlántico, además de Amazon, también ha conquistado vitrinas completas en retailers como Douglas o Sephora. Sin embargo, si en un primer momento se dio a conocer gracias a sus brumas y sprays (que se adelantaban magistralmente a su auge durante la pandemia y al boom de la Divina de Josie), el producto que realmente la ha catapultado hasta el podio, ha sido su loción secante.

¿Qué es una loción secante?

Cuando llegó, supuso una auténtica novedad y nos tuvieron que enseñar a usarla, pero en los últimos años se ha replicado y reversionado por parte de numerosas firmas que han olido el éxito. Aún así, Mario Badescu sigue siendo estrella: «Nuestros equipos ofrecen la marca siendo una de las más eficaces para combatir los problemas de acné. Muchos clientes acuden a nuestras tiendas solicitando la marca, sabiendo que el limpiador facial y la loción secante les ayudarán a mantener su piel en mejor estado, siendo estos dos productos los más solicitados», apunta Vanessa Meléndez, Training Manager de Douglas España.

El término, aunque no del todo familiar, no puede ser más revelador: es, literalmente, un producto que funciona secando los granitos y eliminando desde dentro la suciedad y el sebo. «Se ha formulado especialmente con ácido salicílico, azufre y óxido de zinc para eliminar las impurezas de la piel y tratar las espinillas durante la noche» -detalla Vanessa- «También contiene calamina y alcanfor, para ayudar a calmar y refrescar la piel irritada».

Así, ese sedimento rosa que se observa al fondo del frasco, contiene:

– Ácido salicílico: un poderoso exfoliante que se encuentra en muchos tratamientos para combatir el acné. Ayuda a eliminar de las células muertas de la piel que obstruyen los poros y empeoran la imperfección.

– Azufre: ayuda a absorber el exceso de grasa y a secar la imperfección.

– Calamina: calma y enfría el área irritada. Se usa con frecuencia para tratar afecciones de la piel como las picaduras de mosquitos.

– Óxido de zinc: protege la piel y previene una mayor irritación.

Un arma contra el maskné

Si desde la década de los 60 ha cosechado éxito, ¿qué no hará en la era del maskné? «Ahora, con el uso de las mascarillas de protección frente al Covid-19, es el mejor aliado para mantener una piel saludable y cuidada», asegura Vanessa, de Douglas. Y es que el galardonado tratamiento contra el acné que combate y reseca con eficacia las espinillas, ha disparado sus ventas este año agotándose en varias ocasiones en Amazon a lo largo de los últimos meses. Porque, además, es apto para todos los tipos de piel. ¿Funciona? La respuesta es sí. Y una servidora puede corroborarlo. 

«Se utiliza sin agitar el frasco. Antes de acostarse (tras aplicar el limpiador y el tónico), impregnar un bastoncillo de algodón en el sedimento rosa del fondo del frasco. Aplicar directamente sobre las espinillas, sin frotar. Deje secar durante toda la noche y retirar con agua por la mañana», explica Vanessa sobre todas las dudas que surgen al contemplar la composición de un pequeño botecito que, aunque pueda no parecerlo, dura años.

Su secreto es una fórmula sencilla, suave y eficaz que combate el acné sin ser un antibiótico ni una crema que puedan tener contraindicaciones y efectos secundarios, sino un tratamiento inofensivo y localizado: «El ácido salicílico es un beta hidroxiácido que cristaliza a un tamaño lo suficientemente pequeño, lo que permite que se asiente dentro de nuestros poros para limpiarlos de adentro hacia afuera y así prevenir la acumulación de células muertas de la piel, suciedad y sebo. Es un ácido químico que se utiliza para la exfoliación, por lo que ayuda a renovar la piel e incluso a acelerar la aclaración de manchas que pueden haberse creado a partir de brotes de acné anteriores», explicaba la dermatóloga Sandra Lee (aka Dr. Pimple Popper) en uno de sus directos de Instagram. 

Eso sí, un plus de prevención si se va a utilizar no viene mal, como aconseja Marta Barrero, farmacéutica, experta en dermocosmética y directora de The Secret Lab a S Moda: «Ya que no indican la concentración de sus ingredientes, es probable que deshidrate mucho la piel, por lo que sería muy recomendable siempre que se utilice este producto, compensar a la mañana siguiente con un sérum de ácido hialurónico. Además, siempre aplicar solo en la zona del granito para evitar que altere la piel y la reseque».