Francia salva de la austeridad a la escuela y recluta 60.000 profesores
Hollande hace de la educación la bandera de su mandato. Refuerza la primaria y la formación de los docentes, amplía el horario y hace evaluable ‘Ciudadanía’
François Hollande ha dicho muchas veces que las grandes prioridades políticas de su presidencia son los jóvenes y la educación. Las pruebas empiezan a llegar. El Consejo de Ministros celebrado ayer aprobó el proyecto de ley para la Refundación de la Escuela Republicana, que trata de frenar el deterioro sufrido por la educación pública tras una década de Gobiernos de corte neoliberal que redujeron el número de profesores y de horas lectivas para favorecer a la enseñanza privada.
La reforma, que ha sido acordada con padres y profesores por el ministro de Educación, Vincent Peillon, aportará al sistema público 60.000 profesores y funcionarios en cinco años (54.000 en la escuela y 6.000 en la enseñanza superior y agrícola). La medida trata de compensar la pérdida de 80.000 puestos sufrida durante el quinquenio de Nicolas Sarkozy, cuando el Ejecutivo aplicaba a rajatabla la norma de sustituir a uno de cada dos jubilados.
En realidad, la estimación oficial afirma que cifra total de incorporaciones nuevas al sistema educativo público alcanzará las 150.000 personas, ya que los profesores que cubrirán a los docentes que accedan a la pensión trabajarán a tiempo parcial los dos primeros años.
Hollande se ha comprometido a reducir en 60.000 millones de euros el gasto público en cinco años, pero ha puesto a la escuela pública a salvo del austericidio. La inversión en Educación para 2013, que supera los 62.000 millones, es la única partida estatal, junto a la de Interior, que crece respecto a 2012.
El ministro Peillon recordó que, por cada profesor nuevo, la Administración “perderá un funcionario”, pero el coste de la reforma aún no se conoce. Un portavoz del ministerio dijo a este diario que la memoria económica no está terminada, aunque se prevé que distribuirá los recursos de forma distinta para privilegiar a la primaria y la infantil, que son “las grandes prioridades”.
Hollande ha puesto a la escuela pública a salvo del austericidio
Con un gasto público en educación por alumno algo superior a la media europea en 2009 (pero algo por debaje en las etapas de infantil y primaria), los organismos que miden la calidad de la enseñanza, como la OCDE, cada vez colocan a Francia más abajo, y recuerdan que el problema básico es una organización del tiempo pésima, sobre todo en primaria: seis horas diarias, repartidas desde 2008 en cuatro días a la semana, lo que suma 144 días de clase al año frente a los 180/200 días de países similares.
Pese al consenso en el diagnóstico, y aunque la reforma solo plantea recuperar 45 minutos semanales volviendo a dar media jornada de clase los miércoles, los sindicatos de profesores han recibido la futura ley con dos días de huelgas masivamente seguidas. Alegan que no piensan trabajar más sin cobrar, y revindican un privilegio que según Le Monde procede de los tiempos de la monarquía de Julio: las clases de música, dibujo y gimnasia no las imparten ellos sino los profesores municipales.
La filosofía del cambio consiste, según el ministro Peillon, en “construir la escuela del futuro, una escuela justa para todos y exigente con cada uno”, y sus objetivos son “elevar el nivel de conocimientos, competencias y cultura de los alumnos, reducir las desigualdades sociales y territoriales, y disminuir las cifras de abandono escolar”. Las novedades principales del proyecto de ley, que ahora emprende su tramitación parlamentaria, son las siguientes.
Las reformas
»Más profesores. El plan creará 21.000 plazas nuevas de profesores y maestros, 26.000 de docentes en prácticas, 1.000 que trabajarán para formar maestros, 6.000 profesores de Universidad y formación agrícola y 6.000 puestos de otros oficios: administración, médicos, asistentes sociales y consejeros. Para sustituir a los jubilados entre 2012 y 2014, 43.450 aspirantes a profesores y maestros serán reclutados en dos oposiciones. 22.100 empezarán a trabajar en septiembre y 21.350 se incorporarán un año más tarde.
»Refuerzo de infantil. Dos tercios de todas las nuevas plazas docentes, unos 14.000 serán destinados a infantil y primaria. 3.000 de ellos se ocuparán de recibir a los alumnos de cero a tres años, 4.000 trabajarán por la igualdad territorial interacadémica y 7.000 a reforzar la atención a los niños de áreas conflictivas. La idea es que haya "más maestros que clases".
»Más formación del docente. Se crearán las Escuelas Superiores del Profesorado y la Educación: desde septiembre de 2013, un millar de profesores se ocuparán de la formación inicial y continua de los docentes nuevos.
»Refundación pedagógica. La instauración de un servicio público de enseñanza digital modificará "en profundidad" las prácticas de la enseñanza. "El contenido y la progresividad del aprendizaje" es el corazón de la reforma.
» Educación para la ciudadanía' será evaluable. Un Consejo Superior elaborará los nuevos programas escolares. Se enriquecerá la educación artística y cultural, la asignatura de moral laica (equivalente a Educación para la Ciudadanía) será evaluable en todos los cursos, y se introducirá el estudio de un idioma extranjero desde el inicio de la primaria (seis años). El consejo revisará la duración y el número de ciclos para mejorar la transición de la escuela primaria a la secundaria, y habilitará nuevos dispositivos de ayuda para los alumnos con dificultades.
»Nuevos horarios. Se suma media jornada los miércoles por la mañana a la semana de 4 días, y se reduce la actual jornada —de seis horas— en 45 minutos. Se añade tiempo "extraescolar", que organizarán los Ayuntamientos con proyectos educativos, culturales o deportivos. Un fondo estatal financiará su puesta en marcha.
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