Francia Márquez: “Muchos se quedaron con una visión de África del siglo XVI”

La vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez, inicia este miércoles una gira de nueve días por África. Visitará tres países —Sudáfrica, Kenia y Etiopía— junto a una comitiva de 53 personas para promover intercambios comerciales y desarrollar diálogos sobre medio ambiente, turismo, reconciliación posconflicto y transición energética. En una entrevista con Caracol Radio este miércoles, ha respondido a quienes han criticado los costos y la necesidad del viaje. “Muchos se quedaron con una visión de África del siglo XVI. África no es eso hoy. África ha cambiado”, ha declarado. Asimismo, ha resaltado que el país tiene mucho que aprender de “un continente de reconciliación”.

La agenda incluye encuentros con el vicepresidente de Sudáfrica y los presidentes de Kenia y Etiopía, además de una reunión con la Agencia de Desarrollo de la Unión Africana. La vicepresidenta espera concretar una conexión aérea con ese continente a través de Ethiopian Airlines, avanzar en la apertura de nuevas embajadas y aprender de prácticas de conservación ambiental en Kenia que puedan implementarse en la Amazonía y el Pacífico colombiano. La comitiva que acompaña a Márquez está integrada por el ministro encargado de Cultura, los viceministros de Educación y Turismo, empresarios, congresistas y artistas.

La funcionaria se ha referido, además, al significado emocional que tiene su visita como la primera vicepresidenta afro de Colombia. “Que una mujer afrodescendiente esté volviendo a pisar este continente, en calidad de vicepresidenta, es un momento histórico, de mucho amor y alegría”, ha comentado. Para ella, es importante señalar cómo ha cambiado el mundo desde que sus ancestros llegaron a Colombia en condiciones de esclavitud. “Hoy yo voy, no con grilletes, sino como vicepresidenta a representar a mi país”.

Los costos de la gira estuvieron en el centro de la polémica durante las últimas semanas, pese a que las mismas críticas no se realizaron respecto al viaje a Europa que realizó la semana pasada el presidente Gustavo Petro ni, en general, a visitas internacionales pasadas de mandatarios o vicepresidentes. Algunos medios, periodistas y políticos opositores cuestionaron el tamaño de la comitiva y los gastos de transporte para un viaje que denominaron como “un safari”. “No les da pena estar de paseo, mientras los ‘nadies’ pasan hambre. Creen que se lo merecen y que no tienen que dar explicaciones del despilfarro”, escribió en Twitter la senadora María Fernanda Cabal.

El presidente salió a respaldar a Márquez tras los ataques mediáticos. “El mensaje subliminal en esta noticia [de gastos de combustible] es que sí se puede ir a Europa pero no a África. ¿Por qué? ¿Por qué la mayoría de su pueblo es negro? ¿Por que hay más pobres? Racismo puro y simple. Colombia debe relacionarse con todo el mundo, con toda la humanidad”, afirmó.

Márquez, por su parte, se ha defendido durante la entrevista de este miércoles en Caracol Radio. “El problema es porque es África y el problema es porque tienen una visión de África negra, una visión colonial que no les permite ver más allá”, ha enfatizado. También ha explicado que el continente tiene 1.390 millones de habitantes, que ha eliminado la mayor parte de sus conflictos armados y que las principales potencias mundiales tienen sus ojos puestos allí. Ha resaltado que África y América Latina comparten problemáticas comunes y deben fomentar la cooperación Sur-Sur: “Son las regiones que más están sufriendo los efectos del cambio climático, a pesar de que no son los mayores emisores de gas de efecto invernadero”.

Jerónimo Delgado-Caicedo, investigador de Estudios Africanos, explicó en una tribuna en EL PAÍS que la decisión de acercarse a África es estratégica para la política exterior. “Empieza a saldar una falencia histórica en la política exterior colombiana y que está acorde con los intereses no sólo del Gobierno, sino también de la empresa privada y de la población en general”, subrayó. Según el experto, entre los aspectos a considerar se encuentran las expectativas de que la población se duplique para 2050, las altas tasas de crecimiento económico y el relativamente elevado nivel de integración regional.

La polémica por este viaje no es la primera que rodea a la vicepresidenta, que en los últimos meses ha registrado una caída de 15 puntos en su popularidad. Márquez enfrenta desde hace semanas las críticas de varios medios y de la oposición, bajo el mando de la senadora Cabal. En marzo, denunciaron costos exorbitantes por utilizar un helicóptero para desplazarse a su residencia en las afueras de Cali. Márquez calificó como racista que se le exigiera viajar por tierra, cuando esto no se le pidió a otros vicepresidentes y cuando su vida corre riesgo tras varios atentados.

Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS sobre Colombia y reciba todas las claves informativas de la actualidad del país.